Organismos de Ddhh, organizaciones sociales y agrupaciones sindicales, familiares y amigos de desaparecidos conmemoraron ayer el 40º aniversario del Golpe de Estado en Argentina, y recordaron a los 140 detenidos-desaparecidos de Jujuy, víctimas de la dictadura cívico-militar. Los numerosos oradores recordaron esa época nefasta al tiempo que cuestionaron los procedimientos que lleva adelante el Gobierno actual, pidiendo la liberación de Milagro Sala. Finalizado el acto, marcharon hasta Plaza Belgrano.
Al igual que en distintas provincias, en Jujuy ayer se recordó nuevamente a los más de 30 mil desaparecidos, víctimas del terrorismo de Estado, y como es costumbre el acto central tuvo lugar en la Plaza de la Memoria, en el acceso sur a la ciudad.
En la ocasión, Eva Arroyo, integrante de la organización "Hijos" (Hijas e Hijos por la Identidad y la Justicia, contra el Olvido y el Silencio en Jujuy) explicó que esta agrupación continua la lucha de las madres y las abuelas de desaparecidos, sosteniendo las demandas de memoria, verdad y justicia. Consideró que las políticas de Derechos Humanos deben atravesar todas las políticas de Gobierno, "no solo la de memoria, porque esto significa reivindicar la lucha de nuestros padres y de sus compañeros caídos que se planteaban un mundo digno, lleno de derechos para los sectores más postergados", dijo.
Por otro lado consideró que luego de 40 años es necesario revisar los procesos, "rever casi medio siglo de historia, la construcción de poder real que han creado los organismos a través de sus demandas".
Destacó el hambre de justicia permanente y en todos los ámbitos de la vida, y el repudio hacia las medidas coercitivas impulsadas por el actual Gobierno. "Cuando quede el último genocida vivo nosotros seguiremos demandando justicia, porque esto no se acaba con el juicio a los genocidas, es por eso que hoy consideramos que desarticular las organizaciones sociales y castigar la protesta es una coerción a los derechos básicos humanos", considerando que estas prácticas se llevan adelante.
Arroyo ponderó el desarrollo de los juicios de lesa humanidad, que demandaron muchos años para su concreción. Recordó que en Jujuy se lleva adelante el cuarto juicio que tendrá su condena en mayo, en tanto que adelantó que el próximo juicio será contra los responsables de la "Noche del Apagón".
En este sentido esperan que estos procesos judiciales sigan y no se vean demorados por la falta de recursos, teniendo en cuenta los despidos de numerosos trabajadores en la justicia.
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Organismos de Ddhh, organizaciones sociales y agrupaciones sindicales, familiares y amigos de desaparecidos conmemoraron ayer el 40º aniversario del Golpe de Estado en Argentina, y recordaron a los 140 detenidos-desaparecidos de Jujuy, víctimas de la dictadura cívico-militar. Los numerosos oradores recordaron esa época nefasta al tiempo que cuestionaron los procedimientos que lleva adelante el Gobierno actual, pidiendo la liberación de Milagro Sala. Finalizado el acto, marcharon hasta Plaza Belgrano.
Al igual que en distintas provincias, en Jujuy ayer se recordó nuevamente a los más de 30 mil desaparecidos, víctimas del terrorismo de Estado, y como es costumbre el acto central tuvo lugar en la Plaza de la Memoria, en el acceso sur a la ciudad.
En la ocasión, Eva Arroyo, integrante de la organización "Hijos" (Hijas e Hijos por la Identidad y la Justicia, contra el Olvido y el Silencio en Jujuy) explicó que esta agrupación continua la lucha de las madres y las abuelas de desaparecidos, sosteniendo las demandas de memoria, verdad y justicia. Consideró que las políticas de Derechos Humanos deben atravesar todas las políticas de Gobierno, "no solo la de memoria, porque esto significa reivindicar la lucha de nuestros padres y de sus compañeros caídos que se planteaban un mundo digno, lleno de derechos para los sectores más postergados", dijo.
Por otro lado consideró que luego de 40 años es necesario revisar los procesos, "rever casi medio siglo de historia, la construcción de poder real que han creado los organismos a través de sus demandas".
Destacó el hambre de justicia permanente y en todos los ámbitos de la vida, y el repudio hacia las medidas coercitivas impulsadas por el actual Gobierno. "Cuando quede el último genocida vivo nosotros seguiremos demandando justicia, porque esto no se acaba con el juicio a los genocidas, es por eso que hoy consideramos que desarticular las organizaciones sociales y castigar la protesta es una coerción a los derechos básicos humanos", considerando que estas prácticas se llevan adelante.
Arroyo ponderó el desarrollo de los juicios de lesa humanidad, que demandaron muchos años para su concreción. Recordó que en Jujuy se lleva adelante el cuarto juicio que tendrá su condena en mayo, en tanto que adelantó que el próximo juicio será contra los responsables de la "Noche del Apagón".
En este sentido esperan que estos procesos judiciales sigan y no se vean demorados por la falta de recursos, teniendo en cuenta los despidos de numerosos trabajadores en la justicia.