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Dos triunfos que llevaron tranquilidad a la Selección

Jueves, 31 de marzo de 2016 01:30
GONZALO HIGUAÍN / EN EL PARTIDO ANTE LOS BOLIVIANOS EN CÓRDOBA.
Tres triunfos en línea le permitieron al seleccionado argentino de fútbol volver a encarrilar la clasificación a Rusia 2018 en las Eliminatorias Sudamericanas y pensar en la Copa América Estados Unidos 2016 como objetivo inmediato, dejando de lado -por ahora- la doble fecha de las clasificatorias de agosto y septiembre.
El equipo del "Tata" Gerardo Martino sumó seis de seis en las últimas presentaciones (2 a 1 a Chile en Santiago, 2 a 0 a Bolivia en Córdoba) para "cumplir con lo que el público presumía de nosotros" tal como especificó el propio entrenador rosarino en conferencia de prensa.
Cierto es que las dos victorias entregan más respaldo desde lo numérico que desde lo analítico, porque el conjunto "albiceleste" aún no parece tener afianzada esa "idea" que el DT pregona y enarbola desde que asumió el cargo hace ya 14 meses.
Argentina, tercera en las posiciones con 11 puntos, a dos de los líderes Uruguay y Ecuador, es un núcleo de jugadores de muy buena jerarquía individual que, todavía y de a ratos, suele caer en confusiones en el funcionamiento colectivo.
Pero la indudable capacidad de un Lionel Messi, cada vez más timonel y capitán del combinado argentino, hace que el equipo disfrute de un hándicap superior al resto de sus rivales, más allá de que estas eliminatorias continentales sean "las más parejas de la historia", tal como le respondió a Télam el propio Martino.
Más allá de esas "lagunas" que asoman en el horizonte de los distintos encuentros, el conjunto argentino apuntala la intención de ser protagonista en los diferentes escenarios, por más difíciles que puedan presentarse. Inclusive, en Santiago, hace exactamente una semana, cuando Chile apretaba y buscaba empatar con pocos argumentos pero con una sostenida voluntad ofensiva, Argentina supo mantenerse sólida atrás e intentó protegerse con la tenencia de la pelota.
Se dice en muchas oportunidades que el fútbol no escapa tampoco a los parámetros de otras actividades, en las que "la cabeza manda". Y no alcanzar los dos triunfos en esta doble fecha eliminatoria hubiera representado "carga pesada" en ánimo de jugadores y cuerpo técnico para lo que vendrá.

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Tres triunfos en línea le permitieron al seleccionado argentino de fútbol volver a encarrilar la clasificación a Rusia 2018 en las Eliminatorias Sudamericanas y pensar en la Copa América Estados Unidos 2016 como objetivo inmediato, dejando de lado -por ahora- la doble fecha de las clasificatorias de agosto y septiembre.
El equipo del "Tata" Gerardo Martino sumó seis de seis en las últimas presentaciones (2 a 1 a Chile en Santiago, 2 a 0 a Bolivia en Córdoba) para "cumplir con lo que el público presumía de nosotros" tal como especificó el propio entrenador rosarino en conferencia de prensa.
Cierto es que las dos victorias entregan más respaldo desde lo numérico que desde lo analítico, porque el conjunto "albiceleste" aún no parece tener afianzada esa "idea" que el DT pregona y enarbola desde que asumió el cargo hace ya 14 meses.
Argentina, tercera en las posiciones con 11 puntos, a dos de los líderes Uruguay y Ecuador, es un núcleo de jugadores de muy buena jerarquía individual que, todavía y de a ratos, suele caer en confusiones en el funcionamiento colectivo.
Pero la indudable capacidad de un Lionel Messi, cada vez más timonel y capitán del combinado argentino, hace que el equipo disfrute de un hándicap superior al resto de sus rivales, más allá de que estas eliminatorias continentales sean "las más parejas de la historia", tal como le respondió a Télam el propio Martino.
Más allá de esas "lagunas" que asoman en el horizonte de los distintos encuentros, el conjunto argentino apuntala la intención de ser protagonista en los diferentes escenarios, por más difíciles que puedan presentarse. Inclusive, en Santiago, hace exactamente una semana, cuando Chile apretaba y buscaba empatar con pocos argumentos pero con una sostenida voluntad ofensiva, Argentina supo mantenerse sólida atrás e intentó protegerse con la tenencia de la pelota.
Se dice en muchas oportunidades que el fútbol no escapa tampoco a los parámetros de otras actividades, en las que "la cabeza manda". Y no alcanzar los dos triunfos en esta doble fecha eliminatoria hubiera representado "carga pesada" en ánimo de jugadores y cuerpo técnico para lo que vendrá.

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