El consumo de alcohol, es una problemática cada vez más evidente en la sociedad, y sobre todo, en los jóvenes de Jujuy, y la falta de controles en el territorio provincial, agrava aún más la situación.
Si bien la norma aprobada en el año 2009 establece que sólo se podrá vender bebidas envasadas hasta las 0 horas y la venta en para ingerir en los locales nocturnos, hasta las 4 de la mañana, lejos está de cumplirse.
Hoy, "la previa" y el "after", son dos etapas que los jóvenes jujeños convirtieron en algo habitual, por eso el cambio de horario en el cierre de boliches, tiene injerencia directa en estos "rituales".
El proyecto de autoría del diputado del bloque Justicialista Germán Fellner, en este sentido, remarca la necesidad de controlar y evitar la continuidad en el consumo de bebidas alcohólicas que actualmente se ha visto incrementada a la salida de estos lugares bailables en sitios que funcionan al margen del control municipal (los "afters").
Las instituciones o comercios que no figuren en el registro, serán multados económicamente o con prisión.
"Resulta fundamental regular la venta de bebidas alcohólicas dentro y fuera de los locales bailables, implementar un estricto un control de la cantidad de personas que ingresan a los boliches respetando la cantidad máxima establecida en cada uno de ellos. Considero además que este tema involucra a toda la comunidad y a las autoridades municipales y provinciales, por lo que debemos trabajar en conjunto por la seguridad de los jóvenes", expresó al respecto el legislador.
Precisó que para regular la venta de bebidas alcohólicas, el proyecto establece crear un registro de expendedores, en el que deberán inscribirse todos los comercios que expendan o suministren bebidas alcohólicas.
Asimismo, la iniciativa decreta que únicamente se podrá vender o suministrar bebidas alcohólicas en lugares públicos o de acceso público para su consumo en el lugar de expendio, cuando se trate de establecimientos autorizados para ello por el municipio local y por la Policía de la Provincia.
En ese marco, todos aquellos locales o instituciones que no se encuentren inscriptos, serán pasibles de penas que van desde la clausura, multas económicas y hasta el arresto de sus titulares, de acuerdo a lo que fija la normativa.
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El consumo de alcohol, es una problemática cada vez más evidente en la sociedad, y sobre todo, en los jóvenes de Jujuy, y la falta de controles en el territorio provincial, agrava aún más la situación.
Si bien la norma aprobada en el año 2009 establece que sólo se podrá vender bebidas envasadas hasta las 0 horas y la venta en para ingerir en los locales nocturnos, hasta las 4 de la mañana, lejos está de cumplirse.
Hoy, "la previa" y el "after", son dos etapas que los jóvenes jujeños convirtieron en algo habitual, por eso el cambio de horario en el cierre de boliches, tiene injerencia directa en estos "rituales".
El proyecto de autoría del diputado del bloque Justicialista Germán Fellner, en este sentido, remarca la necesidad de controlar y evitar la continuidad en el consumo de bebidas alcohólicas que actualmente se ha visto incrementada a la salida de estos lugares bailables en sitios que funcionan al margen del control municipal (los "afters").
Las instituciones o comercios que no figuren en el registro, serán multados económicamente o con prisión.
"Resulta fundamental regular la venta de bebidas alcohólicas dentro y fuera de los locales bailables, implementar un estricto un control de la cantidad de personas que ingresan a los boliches respetando la cantidad máxima establecida en cada uno de ellos. Considero además que este tema involucra a toda la comunidad y a las autoridades municipales y provinciales, por lo que debemos trabajar en conjunto por la seguridad de los jóvenes", expresó al respecto el legislador.
Precisó que para regular la venta de bebidas alcohólicas, el proyecto establece crear un registro de expendedores, en el que deberán inscribirse todos los comercios que expendan o suministren bebidas alcohólicas.
Asimismo, la iniciativa decreta que únicamente se podrá vender o suministrar bebidas alcohólicas en lugares públicos o de acceso público para su consumo en el lugar de expendio, cuando se trate de establecimientos autorizados para ello por el municipio local y por la Policía de la Provincia.
En ese marco, todos aquellos locales o instituciones que no se encuentren inscriptos, serán pasibles de penas que van desde la clausura, multas económicas y hasta el arresto de sus titulares, de acuerdo a lo que fija la normativa.