El Partido Socialista (Psoe), que terminó segundo en las elecciones generales celebradas el domingo en España, descartó ayer apoyar al gubernamental Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy en la formación de un nuevo gobierno, e insistió en que corresponde a esa fuerza de derecha, como ganadora de los comicios, intentar formarlo, según expresó su portavoz Antonio Hernando.
En una rueda de prensa, el portavoz de la formación de centroizquierda insistió en que ahora corresponde a Rajoy, ganador de los comicios, "dar el primer paso", ya que los socialistas consiguieron 85 diputados frente a 137 de los populares.
Con esos números, y pese a haber sumado 14 escaños respecto de las elecciones celebradas hace seis meses, el PP no alcanza la mayoría absoluta, por lo que deberá pactar con otros partidos para intentar formar Gobierno.
Esto lo sitúa en buena posición para negociar, previsiblemente con los liberales de Ciudadanos, que quedaron en cuarto lugar al sumar 32 escaños de los 40 que tenían.
Los socialistas lograron mantenerse como segunda fuerza política, pero perdieron cinco de sus 90 diputados, aunque evitaron ser superados por la coalición de izquierda Unidos Podemos, que, liderada por Pablo Iglesias, llegó a 71 escaños.
Hernando comentó ayer que "Rajoy debería agradecer a Iglesias por todo lo que ha hecho para que el cambio se aleje de nuestras vidas".
Por su parte, Susana Díaz, presidenta de Andalucía, tradicional bastión del socialismo español, admitió que, también en esta comunidad, el Psoe quedó por debajo del PP, razón de más para que deba irse a la oposición.
Según Díaz, los resultados del domingo evidencian la necesidad de "reconstruir" un proyecto socialista "alejado de inmovilismos y de las políticas regresivas de la derecha, pero alejado también con claridad del aventurerismo y del populismo".
En una rueda de prensa, el portavoz de la formación de centroizquierda insistió en que ahora corresponde a Rajoy, ganador de los comicios, "dar el primer paso", ya que los socialistas consiguieron 85 diputados frente a 137 de los populares.
Con esos números, y pese a haber sumado 14 escaños respecto de las elecciones celebradas hace seis meses, el PP no alcanza la mayoría absoluta, por lo que deberá pactar con otros partidos para intentar formar Gobierno.
Esto lo sitúa en buena posición para negociar, previsiblemente con los liberales de Ciudadanos, que quedaron en cuarto lugar al sumar 32 escaños de los 40 que tenían.
Los socialistas lograron mantenerse como segunda fuerza política, pero perdieron cinco de sus 90 diputados, aunque evitaron ser superados por la coalición de izquierda Unidos Podemos, que, liderada por Pablo Iglesias, llegó a 71 escaños.
Hernando comentó ayer que "Rajoy debería agradecer a Iglesias por todo lo que ha hecho para que el cambio se aleje de nuestras vidas".
Por su parte, Susana Díaz, presidenta de Andalucía, tradicional bastión del socialismo español, admitió que, también en esta comunidad, el Psoe quedó por debajo del PP, razón de más para que deba irse a la oposición.
Según Díaz, los resultados del domingo evidencian la necesidad de "reconstruir" un proyecto socialista "alejado de inmovilismos y de las políticas regresivas de la derecha, pero alejado también con claridad del aventurerismo y del populismo".
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El Partido Socialista (Psoe), que terminó segundo en las elecciones generales celebradas el domingo en España, descartó ayer apoyar al gubernamental Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy en la formación de un nuevo gobierno, e insistió en que corresponde a esa fuerza de derecha, como ganadora de los comicios, intentar formarlo, según expresó su portavoz Antonio Hernando.
En una rueda de prensa, el portavoz de la formación de centroizquierda insistió en que ahora corresponde a Rajoy, ganador de los comicios, "dar el primer paso", ya que los socialistas consiguieron 85 diputados frente a 137 de los populares.
Con esos números, y pese a haber sumado 14 escaños respecto de las elecciones celebradas hace seis meses, el PP no alcanza la mayoría absoluta, por lo que deberá pactar con otros partidos para intentar formar Gobierno.
Esto lo sitúa en buena posición para negociar, previsiblemente con los liberales de Ciudadanos, que quedaron en cuarto lugar al sumar 32 escaños de los 40 que tenían.
Los socialistas lograron mantenerse como segunda fuerza política, pero perdieron cinco de sus 90 diputados, aunque evitaron ser superados por la coalición de izquierda Unidos Podemos, que, liderada por Pablo Iglesias, llegó a 71 escaños.
Hernando comentó ayer que "Rajoy debería agradecer a Iglesias por todo lo que ha hecho para que el cambio se aleje de nuestras vidas".
Por su parte, Susana Díaz, presidenta de Andalucía, tradicional bastión del socialismo español, admitió que, también en esta comunidad, el Psoe quedó por debajo del PP, razón de más para que deba irse a la oposición.
Según Díaz, los resultados del domingo evidencian la necesidad de "reconstruir" un proyecto socialista "alejado de inmovilismos y de las políticas regresivas de la derecha, pero alejado también con claridad del aventurerismo y del populismo".
En una rueda de prensa, el portavoz de la formación de centroizquierda insistió en que ahora corresponde a Rajoy, ganador de los comicios, "dar el primer paso", ya que los socialistas consiguieron 85 diputados frente a 137 de los populares.
Con esos números, y pese a haber sumado 14 escaños respecto de las elecciones celebradas hace seis meses, el PP no alcanza la mayoría absoluta, por lo que deberá pactar con otros partidos para intentar formar Gobierno.
Esto lo sitúa en buena posición para negociar, previsiblemente con los liberales de Ciudadanos, que quedaron en cuarto lugar al sumar 32 escaños de los 40 que tenían.
Los socialistas lograron mantenerse como segunda fuerza política, pero perdieron cinco de sus 90 diputados, aunque evitaron ser superados por la coalición de izquierda Unidos Podemos, que, liderada por Pablo Iglesias, llegó a 71 escaños.
Hernando comentó ayer que "Rajoy debería agradecer a Iglesias por todo lo que ha hecho para que el cambio se aleje de nuestras vidas".
Por su parte, Susana Díaz, presidenta de Andalucía, tradicional bastión del socialismo español, admitió que, también en esta comunidad, el Psoe quedó por debajo del PP, razón de más para que deba irse a la oposición.
Según Díaz, los resultados del domingo evidencian la necesidad de "reconstruir" un proyecto socialista "alejado de inmovilismos y de las políticas regresivas de la derecha, pero alejado también con claridad del aventurerismo y del populismo".