La producción industrial se desplomó 9,5% en junio en comparación con igual mes de 2015 y cerró el primer semestre con una contracción del 3,9%, por la recesión en Brasil, la compleja situación del comercio mundial y el crecimiento en las importaciones, según un informe difundido por la UIA.
Con relación a mayo, la caída fue del 0,3% en la versión desestacionalizada, de acuerdo con el informe del Centro de Estudios de esa cámara empresaria.
La entidad informó que si se descuenta el crecimiento atípico que registró el complejo de oleaginosas (en el primer trimestre creció 61,2% interanual) la contracción de la producción industrial durante enero-
junio fue del 5,8%.
Para la UIA, los factores que más afectaron la industria fueron: el bajo dinamismo del comercio mundial que condicionó las exportaciones principalmente a Brasil; la desaceleración de la economía china y la incertidumbre sobre el futuro de la actividad global.
Por otro lado, el incremento en los volúmenes de las importaciones impactó negativamente en la producción nacional en los segmentos más expuestos al comercio desleal.
Según el Indec informó que las cantidades importadas crecieron 9,1% durante el primer semestre, y las compras del exterior de bienes de consumo aumentaron 22,2% y en junio 28,6%.
Los sectores que experimentaron las mayores contracciones entre enero y junio fueron el automotriz, el de metales básicos, el de minerales no metálicos y la metalmecánica.
La fabricación de vehículos estuvo 14% por debajo con relación al primer semestre de 2015, debido fundamentalmente a la caída en las exportaciones (30,9% en la medición interanual), en particular hacia Brasil.
La actividad del bloque de minerales no metálicos descendió 12,6% por la contracción que experimentó la construcción y el sector más afectado fue el de despachos de cemento (14,4%).
"Este bloque había sido el principal motor de la industria durante 2015, pero durante este año no logró mantener la misma tendencia.
Por último, la producción metalúrgica se contrajo 9,7 por ciento", explicó.
Por su parte, la producción de alimentos y bebidas descendió 5 por ciento durante el primer semestre del año.
Con relación a mayo, la caída fue del 0,3% en la versión desestacionalizada, de acuerdo con el informe del Centro de Estudios de esa cámara empresaria.
La entidad informó que si se descuenta el crecimiento atípico que registró el complejo de oleaginosas (en el primer trimestre creció 61,2% interanual) la contracción de la producción industrial durante enero-
junio fue del 5,8%.
Para la UIA, los factores que más afectaron la industria fueron: el bajo dinamismo del comercio mundial que condicionó las exportaciones principalmente a Brasil; la desaceleración de la economía china y la incertidumbre sobre el futuro de la actividad global.
Por otro lado, el incremento en los volúmenes de las importaciones impactó negativamente en la producción nacional en los segmentos más expuestos al comercio desleal.
Según el Indec informó que las cantidades importadas crecieron 9,1% durante el primer semestre, y las compras del exterior de bienes de consumo aumentaron 22,2% y en junio 28,6%.
Los sectores que experimentaron las mayores contracciones entre enero y junio fueron el automotriz, el de metales básicos, el de minerales no metálicos y la metalmecánica.
La fabricación de vehículos estuvo 14% por debajo con relación al primer semestre de 2015, debido fundamentalmente a la caída en las exportaciones (30,9% en la medición interanual), en particular hacia Brasil.
La actividad del bloque de minerales no metálicos descendió 12,6% por la contracción que experimentó la construcción y el sector más afectado fue el de despachos de cemento (14,4%).
"Este bloque había sido el principal motor de la industria durante 2015, pero durante este año no logró mantener la misma tendencia.
Por último, la producción metalúrgica se contrajo 9,7 por ciento", explicó.
Por su parte, la producción de alimentos y bebidas descendió 5 por ciento durante el primer semestre del año.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla
La producción industrial se desplomó 9,5% en junio en comparación con igual mes de 2015 y cerró el primer semestre con una contracción del 3,9%, por la recesión en Brasil, la compleja situación del comercio mundial y el crecimiento en las importaciones, según un informe difundido por la UIA.
Con relación a mayo, la caída fue del 0,3% en la versión desestacionalizada, de acuerdo con el informe del Centro de Estudios de esa cámara empresaria.
La entidad informó que si se descuenta el crecimiento atípico que registró el complejo de oleaginosas (en el primer trimestre creció 61,2% interanual) la contracción de la producción industrial durante enero-
junio fue del 5,8%.
Para la UIA, los factores que más afectaron la industria fueron: el bajo dinamismo del comercio mundial que condicionó las exportaciones principalmente a Brasil; la desaceleración de la economía china y la incertidumbre sobre el futuro de la actividad global.
Por otro lado, el incremento en los volúmenes de las importaciones impactó negativamente en la producción nacional en los segmentos más expuestos al comercio desleal.
Según el Indec informó que las cantidades importadas crecieron 9,1% durante el primer semestre, y las compras del exterior de bienes de consumo aumentaron 22,2% y en junio 28,6%.
Los sectores que experimentaron las mayores contracciones entre enero y junio fueron el automotriz, el de metales básicos, el de minerales no metálicos y la metalmecánica.
La fabricación de vehículos estuvo 14% por debajo con relación al primer semestre de 2015, debido fundamentalmente a la caída en las exportaciones (30,9% en la medición interanual), en particular hacia Brasil.
La actividad del bloque de minerales no metálicos descendió 12,6% por la contracción que experimentó la construcción y el sector más afectado fue el de despachos de cemento (14,4%).
"Este bloque había sido el principal motor de la industria durante 2015, pero durante este año no logró mantener la misma tendencia.
Por último, la producción metalúrgica se contrajo 9,7 por ciento", explicó.
Por su parte, la producción de alimentos y bebidas descendió 5 por ciento durante el primer semestre del año.
Con relación a mayo, la caída fue del 0,3% en la versión desestacionalizada, de acuerdo con el informe del Centro de Estudios de esa cámara empresaria.
La entidad informó que si se descuenta el crecimiento atípico que registró el complejo de oleaginosas (en el primer trimestre creció 61,2% interanual) la contracción de la producción industrial durante enero-
junio fue del 5,8%.
Para la UIA, los factores que más afectaron la industria fueron: el bajo dinamismo del comercio mundial que condicionó las exportaciones principalmente a Brasil; la desaceleración de la economía china y la incertidumbre sobre el futuro de la actividad global.
Por otro lado, el incremento en los volúmenes de las importaciones impactó negativamente en la producción nacional en los segmentos más expuestos al comercio desleal.
Según el Indec informó que las cantidades importadas crecieron 9,1% durante el primer semestre, y las compras del exterior de bienes de consumo aumentaron 22,2% y en junio 28,6%.
Los sectores que experimentaron las mayores contracciones entre enero y junio fueron el automotriz, el de metales básicos, el de minerales no metálicos y la metalmecánica.
La fabricación de vehículos estuvo 14% por debajo con relación al primer semestre de 2015, debido fundamentalmente a la caída en las exportaciones (30,9% en la medición interanual), en particular hacia Brasil.
La actividad del bloque de minerales no metálicos descendió 12,6% por la contracción que experimentó la construcción y el sector más afectado fue el de despachos de cemento (14,4%).
"Este bloque había sido el principal motor de la industria durante 2015, pero durante este año no logró mantener la misma tendencia.
Por último, la producción metalúrgica se contrajo 9,7 por ciento", explicó.
Por su parte, la producción de alimentos y bebidas descendió 5 por ciento durante el primer semestre del año.