Cada 19 de septiembre se recuerda el Día del Instrumentador Quirúrgico en memoria a Guillermo Bosch Arana, primer médico que incorporar esta figura profesional al plantel quirúrgico, cuyo fallecimiento tuvo lugar en esta misma fecha.
Las profesionales de la clínica palpaleña no estuvieron ajenas a la recordación, y la jefa de las instrumentadoras, Sandra Isasmendi, sostuvo que su labor en el quirófano es muy importante, porque de su accionar depende el abastecimiento y la colaboración a los cirujanos en las intervenciones quirúrgicas de las diferentes especialidades.
En el plantel de la moderna clínica son cinco las intrumentadoras, grupo que trabaja diariamente y en guardias, cabeza a cabeza con los médicos cirujanos. Todas ellas se encuentran capacitadas para trabajar en neurocirugía, traumatología, cirugía general, cirugía endoscópica, cirugía plástica y partos.
"Todas son muy responsables en su quehacer diario, y la clínica cada vez crece más y está manejando diferentes especialidades que las instrumentadoras están listas para afrontar", sostuvo Isasmendi.
La jefa del conjunto informó además que el mayor logro que las trabajadoras experimentan día a día, es participar de los partos humanizados que la clínica impulsa para el bienestar y el respeto a las necesidades de las madres y sus familias.
La instrumentadora explicó que la llegada de cada niño llena de alegría a cada profesional, porque actualmente la clínica permite que el papá u otro familiar ingresen durante las cesáreas y en conjunto comparten la felicidad que provoca la llegada de una nueva vida. El plantel de instrumentadoras de "Nuestra Señora de Fátima" está compuesto por Sandra Isasmendi, Melisa Moreno, Laura Mas, Julieta Castro y Marta Sánchez. "Nos sentimos orgullosas de prestar servicio en una institución en constante crecimiento", dijo Isasmendi.
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Cada 19 de septiembre se recuerda el Día del Instrumentador Quirúrgico en memoria a Guillermo Bosch Arana, primer médico que incorporar esta figura profesional al plantel quirúrgico, cuyo fallecimiento tuvo lugar en esta misma fecha.
Las profesionales de la clínica palpaleña no estuvieron ajenas a la recordación, y la jefa de las instrumentadoras, Sandra Isasmendi, sostuvo que su labor en el quirófano es muy importante, porque de su accionar depende el abastecimiento y la colaboración a los cirujanos en las intervenciones quirúrgicas de las diferentes especialidades.
En el plantel de la moderna clínica son cinco las intrumentadoras, grupo que trabaja diariamente y en guardias, cabeza a cabeza con los médicos cirujanos. Todas ellas se encuentran capacitadas para trabajar en neurocirugía, traumatología, cirugía general, cirugía endoscópica, cirugía plástica y partos.
"Todas son muy responsables en su quehacer diario, y la clínica cada vez crece más y está manejando diferentes especialidades que las instrumentadoras están listas para afrontar", sostuvo Isasmendi.
La jefa del conjunto informó además que el mayor logro que las trabajadoras experimentan día a día, es participar de los partos humanizados que la clínica impulsa para el bienestar y el respeto a las necesidades de las madres y sus familias.
La instrumentadora explicó que la llegada de cada niño llena de alegría a cada profesional, porque actualmente la clínica permite que el papá u otro familiar ingresen durante las cesáreas y en conjunto comparten la felicidad que provoca la llegada de una nueva vida. El plantel de instrumentadoras de "Nuestra Señora de Fátima" está compuesto por Sandra Isasmendi, Melisa Moreno, Laura Mas, Julieta Castro y Marta Sánchez. "Nos sentimos orgullosas de prestar servicio en una institución en constante crecimiento", dijo Isasmendi.