Pasaron casi dos décadas del homicidio del reportero gráfico José Luis Cabezas, un hecho que conmocionó a la opinión pública, al periodismo y puso un manto de sospecha sobre todo el poder político, y por el cual, Justicia mediante, no queda ninguna persona presa de todas las que fueron condenadas.
A pocos días de cumplirse el vigésimo año del homicidio ocurrido el 25 de enero de 1997 en la localidad de General Madariaga, partido de Pinamar, el último de los condenados que salió en libertad condicional fue el exsubcomisario de la Policía bonaerense Gustavo Prellezo, quien fue el autor material de la muerte del reportero gráfico de la revista Noticias.
La Justicia destacó la "superación personal" del condenado en base a sus estudios en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de La Plata, y resaltó que el expolicía "trabaja como gestor desde su domicilio, realiza actividad física, concurre a la Iglesia Adventista y fortaleció sus lazos familiares y sociales en general".
La noche del 24 de enero Cabezas había ido junto a su compañero Gabriel Michi al cumpleaños del empresario Oscar Andreani, en Pinamar, pero al salir solo del lugar fue seguido por cuatro personas, denominadas "Los Horneros" y el propio Prellezo.
Antes de que llegue a su casa Cabezas fue secuestrado, esposado y golpeado, y se lo llevaron en su propio auto Ford Fiesta a una cava de General Madariaga, en donde Prellezo lo hizo arrodillar y le pegó dos tiros en la nuca, para luego rociar el vehículo, y con él adentro, prenderlo fuego.
Un baqueano observó el humo en la mañana del domingo 27, se acercó y alertó a la policía.
A pocos días de cumplirse el vigésimo año del homicidio ocurrido el 25 de enero de 1997 en la localidad de General Madariaga, partido de Pinamar, el último de los condenados que salió en libertad condicional fue el exsubcomisario de la Policía bonaerense Gustavo Prellezo, quien fue el autor material de la muerte del reportero gráfico de la revista Noticias.
La Justicia destacó la "superación personal" del condenado en base a sus estudios en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de La Plata, y resaltó que el expolicía "trabaja como gestor desde su domicilio, realiza actividad física, concurre a la Iglesia Adventista y fortaleció sus lazos familiares y sociales en general".
La noche del 24 de enero Cabezas había ido junto a su compañero Gabriel Michi al cumpleaños del empresario Oscar Andreani, en Pinamar, pero al salir solo del lugar fue seguido por cuatro personas, denominadas "Los Horneros" y el propio Prellezo.
Antes de que llegue a su casa Cabezas fue secuestrado, esposado y golpeado, y se lo llevaron en su propio auto Ford Fiesta a una cava de General Madariaga, en donde Prellezo lo hizo arrodillar y le pegó dos tiros en la nuca, para luego rociar el vehículo, y con él adentro, prenderlo fuego.
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Pasaron casi dos décadas del homicidio del reportero gráfico José Luis Cabezas, un hecho que conmocionó a la opinión pública, al periodismo y puso un manto de sospecha sobre todo el poder político, y por el cual, Justicia mediante, no queda ninguna persona presa de todas las que fueron condenadas.
A pocos días de cumplirse el vigésimo año del homicidio ocurrido el 25 de enero de 1997 en la localidad de General Madariaga, partido de Pinamar, el último de los condenados que salió en libertad condicional fue el exsubcomisario de la Policía bonaerense Gustavo Prellezo, quien fue el autor material de la muerte del reportero gráfico de la revista Noticias.
La Justicia destacó la "superación personal" del condenado en base a sus estudios en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de La Plata, y resaltó que el expolicía "trabaja como gestor desde su domicilio, realiza actividad física, concurre a la Iglesia Adventista y fortaleció sus lazos familiares y sociales en general".
La noche del 24 de enero Cabezas había ido junto a su compañero Gabriel Michi al cumpleaños del empresario Oscar Andreani, en Pinamar, pero al salir solo del lugar fue seguido por cuatro personas, denominadas "Los Horneros" y el propio Prellezo.
Antes de que llegue a su casa Cabezas fue secuestrado, esposado y golpeado, y se lo llevaron en su propio auto Ford Fiesta a una cava de General Madariaga, en donde Prellezo lo hizo arrodillar y le pegó dos tiros en la nuca, para luego rociar el vehículo, y con él adentro, prenderlo fuego.
Un baqueano observó el humo en la mañana del domingo 27, se acercó y alertó a la policía.
A pocos días de cumplirse el vigésimo año del homicidio ocurrido el 25 de enero de 1997 en la localidad de General Madariaga, partido de Pinamar, el último de los condenados que salió en libertad condicional fue el exsubcomisario de la Policía bonaerense Gustavo Prellezo, quien fue el autor material de la muerte del reportero gráfico de la revista Noticias.
La Justicia destacó la "superación personal" del condenado en base a sus estudios en la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de La Plata, y resaltó que el expolicía "trabaja como gestor desde su domicilio, realiza actividad física, concurre a la Iglesia Adventista y fortaleció sus lazos familiares y sociales en general".
La noche del 24 de enero Cabezas había ido junto a su compañero Gabriel Michi al cumpleaños del empresario Oscar Andreani, en Pinamar, pero al salir solo del lugar fue seguido por cuatro personas, denominadas "Los Horneros" y el propio Prellezo.
Antes de que llegue a su casa Cabezas fue secuestrado, esposado y golpeado, y se lo llevaron en su propio auto Ford Fiesta a una cava de General Madariaga, en donde Prellezo lo hizo arrodillar y le pegó dos tiros en la nuca, para luego rociar el vehículo, y con él adentro, prenderlo fuego.
Un baqueano observó el humo en la mañana del domingo 27, se acercó y alertó a la policía.