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Formaciones
River Plate: Germán Lux; Gonzalo Montiel, Jonatan Maidana, Javier Pinola y Milton Casco; Enzo Pérez, Leonardo Ponzio, Ignacio Fernández y Ariel Rojas; Gonzalo Martínez e Ignacio Scocco. DT: Marcelo Gallardo.
Boca Juniors: Agustín Rossi; Leonardo Jara, Paolo Goltz, Lisandro Magallán y Frank Fabra; Nahitan Nández, Wilmar Barrios y Pablo Pérez; Cristian Pavón, Darío Benedetto y Edwin Cardona. DT: Guillermo Barros Schelotto.
Para Guillermo Boca ayer impuso “su juego”
Barros Schelotto, DT “xeneize”, aclaró que fue un “partido parejo” y destacó el trabajo colectivo realizado por sus dirigidos.
El año pasado Boca también había derrotado a River en el “Monumental”. Aquel encuentro finalizó 4 a 2 para los “xeneizes”.
El entrenador Guillermo Barros Schelotto celebró ayer la victoria del líder Boca en el Superclásico sobre River, en el contexto de un “partido parejo” en el que pudieron imponer su juego e individualidad.
“Teníamos al país entero mirando por televisión porque no lo dejan entrar. Fue un partido parejo, pudimos imponer nuestro juego, usamos la individualidad de Cardona en el primer gol y el juego colectivo en el segundo”, explicó.
Barros Schelotto se lamentó por los veinte minutos iniciales del segundo tiempo en los que no pudieron aprovechar el hombre de más por la expulsión de Ignacio Fernández y valoró el carácter de su equipo tras la roja a Edwin Cardona.
“Lástima esos veinte minutos que no pudimos aprovechar el hombre de más. El equipo asumió la responsabilidad y siguió jugando”, destacó.
También le dejó un mensaje a todos los hinchas de Boca, que festejan el momento del “xeneize”, con ocho triunfos en misma cantidad de partidos en la Superliga.
“A los hinchas le pedimos que sigan apoyando porque vamos a seguir buscando ser los mejores. No va ni el 35 por ciento del campeonato, así que ahora a disfrutar el Superclásico”, afirmó.
Guillermo Barros Schelotto está viviendo una de las semanas más felices desde que es entrenador de Boca porque encuentra respuestas dentro de la cancha que entre otras cosas lo ponen como líder indiscutido del campeonato.
Nahitan Nández
El volante uruguayo Nahitan Nández marcó el triunfo de Boca Juniors en cancha de River Plate y fue para este joven de 21 años “un sueño cumplido”, luego de conocer en su país lo que es también jugar un “superclásico” como el de su anterior equipo, Peñarol, y Nacional.
“Uno siempre sueña con hacer un gol así, pero cuando se lo lleva a la realidad es otra cosa”, confió el volante por derecha, que anotó el segundo tanto para la victoria por 2 a 1 de los “xeneizes” tomando el balón de aire tras un centro de Pablo Pérez.
”En lo personal venía luchando para tener la posibilidad de jugar un partido así y ganarlo, y esto último ocurrió porque mantuvimos el orden, que en definitiva fue nuestra mayor virtud”, puntualizó.
El también integrante del seleccionado de Uruguay habla con la madurez de un veterano y cuando se lo interroga respecto de la holgura con que Boca encabeza la Superliga advirtió que “todavía falta mucho para que termine el torneo”.
Y a su lado se hizo eco de estas expresiones otro jugador que llegó en esta temporada al club de la Ribera, el zaguero Paolo Goltz, quien también alertó que “todavía es muy temprano para hablar de algún logro, porque falta demasiado, ya que recién van ocho fechas”.Lo que hay que rescatar es la personalidad del equipo, algo que el técnico valoró cuando terminó el partido”, destacó.
“Y en cuanto a la expulsión de (Edwin) Cardona, fue injusta y apresurada, porque no era para roja directa pese a que intentó sacarse de encima a Enzo Pérez”, sentenció el exHuracán y América, de México.
El uruguayo Nahitan Nández, debutante en el superclásico, marcó el gol del triunfo, fue la figura de Boca y dejó en claro que está llamado a ser un jugador emblema del equipo xeneize.El volante derecho de la selección uruguaya que jugará el Mundial de Rusia 2018, de sólo 21 años, fue el de mejor rendimiento en un equipo que tuvo otros puntos altos en el arquero Agustín Rossi, el zaguero Lisandro Magallán y Edwin Cardona.
Bronca y tristeza
EL “MUÑECO”*Bb-0ExPonto Regular16.5h50\#124hb-0.5 EL DT DE RIVER SE MOSTRÓ DOLIDO POR LA DERROTA ANTE BOCA.
El entrenador de River, Marcelo Gallardo, admitió tener bronca y tristeza por perder estos partidos, los que uno quiere ganar, pero la respuestas anímicas estuvieron, tras la derrota como local ante Boca 2 a 1 por al Superliga.
Gallardo dijo en conferencia de prensa que “la derrota hubiera tenido un sabor amargo si los jugadores hubiesen estado sin reacción, sin orgullo, y eso no pasó”.
“Era un partido importante porque podía ser la mejor manera de reaccionar ante nuestro público, perdimos con cierto orgullo y eso me deja tranquilo”, confió el entrenador, y agregó que “hay que absorber estas derrotas, poner el pecho, uno está acá en las buenas y en las no tan buenas”.
“No puedo reprocharle nada al equipo, más allá de los errores puntuales, pero nos podemos mirar a la cara tranquilamente porque esfuerzo lo han hecho, el equipo reaccionó, llegó al empate, aunque duró poco porque convirtieron”, completó Gallardo.
El técnico de River rescató “la voluntad de un grupo de trabajo para la dedicación, y en eso seguirá siendo así de acá hasta fin de año” y explicó que “no cambiará las forma porque se hicieron las cosas bien”.
“No mido las cosas por el resultado, más allá de que son los que mandan, pero no es verdad que se hacen las cosas mal porque se pierde”, indicó Gallardo, y manifestó que “no queda otra que seguir”.
“Hay que reponerse porque tenemos un mes de noviembre en lo que nos queda es ganar la Copa Argentina, que por ahí suena a consuelo pero es algo que estamos jugando y si se gana es un título más”, completó el entrenador. Por su parte el volante nacido en la provincia de Santa Fe, Leonardo Ponzio, consideró que Boca “llegó dos veces y convirtió” y dijo que tras las desventaja el equipo “tuvo la pelota tuvo la pelota y llegó al empate, pero ellos llegaron otra vez y se terminó el partido”.
Boca imparable: ahora venció a River y estira diferencias
El “xeneize”, en un duelo vibrante, aprovechó mejor sus oportunidades y se quedó con su octava victoria en ocho partidos.
Al “millonario” le queda la semifinal de la Copa Argentina ante Deportivo Morón, el próximo domingo en Mendoza.
El “millonario” no pudo reponerse de la eliminación en la Copa Libertadores y dejó pasar una gran chance para prenderse en la lucha.
Boca Juniors venció a River Plate por 2-1, como visitante en el estadio “Monumental”, en un Superclásico vibrante que tuvo de todo y se afirmó como líder de la Superliga con nueve puntos de diferencia con sus perseguidores, y a doce de su eterno rival.
El colombiano Edwin Cardona y el uruguayo Nahitan Nández marcaron los goles del equipo dirigido por Guillermo Barros Schelotto, para sellar la octava victoria seguida del “xeneize” en el campeonato. El capitán de River Plate, Leonardo Ponzio, había igualado transitoriamente.
Además, el conjunto dirigido por Guillermo Barros Schelotto extendió la buena racha en Núñez, donde perdió por última vez hace siete años.
El árbitro Néstor Pitana expulsó a Ignacio Fernández, de River, a los 37 minutos del primer tiempo por una falta sobre Cardona, quien a los 16 del segundo recibió la roja por un supuesto codazo a Enzo Pérez, según la seña que hizo el árbitro.
En un primer tiempo electrizante, River fue superior a Boca pero tuvo un minuto trágico ya que la falta provocada por “Nacho” Fernández derivó en el golazo de tiro libre del volante colombiano Cardona. Su gol, fue “a lo Riquelme”. Poca carrera, un poco más al medio del recordado gol a Roberto Bonano en la Libertadores del 2000 pero mismo final: la pelota al ángulo superior del palo izquierdo de Germán Lux, quien nada pudo hacer.
La segunda parte encontró a Boca en su campo, parado de contraataque y tratando de aguantar la embestida del dueño de casa. Sin embargo, la historia cambia porque Boca tiene en Cardona a un jugador irregular. En una jugada confusa, recibió su segunda expulsión en las primeras ocho fechas.
El partido del colombiano se encaminaba a ser consagratorio pero una acción evitable complicó el trámite porque unos minutos después llegó el golazo de Leonardo Ponzio.
El capitán y emblema del ciclo exitoso de Gallardo sacó un tremendo remate que se metió pegado al palo derecho de Rossi.
El equipo del “Mellizo” tenía todo en contra porque carecía de juego y parecía encaminarse a perder el invicto con el que había llegado al Monumental. Pero en una jugada aislada se inspiró el capitán Pablo Pérez con un pase preciso para el uruguayo Nahitan Nández, quien se convirtió en el héroe inesperado en su primer Superclásico: le pegó de aire al primer palo para marcar el segundo gol.
Boca debió haber liquidado el encuentro de contraataque pero falló en las tres oportunidades por malas decisiones de Pavón, y en la último el tiro de Fabra se fue apenas desviado.
En un Superclásico cambiante, Boca se llevó una victoria importantísima -la octava seguida- en su camino a un nuevo título local y para afrontar la primera parte de la Copa Libertadores 2018 con más tranquilidad.
River tenía la oportunidad de revertir la dura eliminación en la Libertadores en un Superclásico, pero recibió un nuevo cachetazo que le complicó el fin de año y pone en duda la continuidad del ciclo exitoso de Gallardo al frente del equipo.
Pitana no pasó inadvertido
El árbitro Néstor Pitana, quien volvió a conducir un Superclásico luego del recordado partido de 2014, no pudo pasar inadvertido, ya que falló en decisiones importantes que pudieron haber cambiado la historia del partido que tuvo como ganador a Boca Juniors sobre River Plate por 2-1.
El misionero no tuvo un buen trabajo en el clásico válido por la 8º fecha de la Superliga y recibió quejas de los dos equipos.
En el primer tiempo amonestó bien y a los 37 minutos acertó con la expulsión a Ignacio Fernández, quien le aplicó un tremendo planchazo a Edwin Cardona.
Sin embargo, el juez debió amonestar a Pablo Pérez y eso provocó el enojo de los futbolistas riverplatenses que le reclamaron eso y la roja a “Nacho” al final del primer tiempo.
En el segundo tiempo, Pitana se apresuró y expulsó a Edwin Cardona por un supuesto codazo a Enzo Pérez. En dicha jugada, el misionero debió apoyarse en el asistente Juan Pablo Belatti, quien tenía la visión más directa pero decidió expulsar al colombiano, autor del primer gol.
Precisamente Belatti fue protagonista sobre el final, ya que en una jugada por derecha que terminó en gol de Ignacio Scocco y sancionó tiro de esquina cuando la pelota no había salido en su totalidad.
Flojo desempeño en general para Pitana, quien a pesar de su experiencia internacional no puede pasar inadvertido en los Superclásicos del fútbol argentino.
El estadio “Monumental”, escenario del Superclásico entre River Plate y Boca Juniors, sufrió a tres horas del inicio del partido un corte de luz que demoró por algunos minutos el ingreso de los hinchas.
Por un apagón general que reportó la empresa Edenor en gran parte de la zona norte de la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, el estadio ubicado en el barrio porteño de Núñez estuvo sin luz durante varios minutos en la previa del Superclásico.
Este inconveniente, que sin embargo no puso en duda la disputa del encuentro válido por la octava fecha de la Superliga, generó una demora en la apertura de las puertas ya que el sistema de ingreso es electrónico.
Pasadas las 15.30, la energía eléctrica retornó al Monumental y la seguridad pudo habilitar el ingreso.
Números y detalles de un vibrante encuentro
River y Boca demostraron en las estadísticas del primer Superclásico de la Superliga las alternativas de un partido vibrante y lleno de situaciones, que terminó con triunfo del club de La Ribera en el “Monumental” por 2 a 1.
En la primera parte, River dispuso de seis remates al arco de los cuales tres resultaron desviados; provocó cinco situaciones de gol, tres de ellas en el área y tuvo ocho tiros libres ofensivos, seis tiros de esquina a su favor y cinco laterales ofensivos.
No le sancionaron ninguna posición adelantada y no convirtió goles.
El equipo de Marcelo Gallardo cometió doce infracciones y tuvo cuatro jugadores amonestados y un expulsado.
Boca, por su parte, tuvo nueve remates al arco, de los cuales tres resultaron desviados. Dispuso de tres situaciones de gol, una de ellas en el área. Consiguió siete tiros libres ofensivos, dos tiros de esquina, tres laterales ofensivos y, ningún tiro de esquina.
El equipo de Guillermo Barros Schelotto convirtió un gol y no le sancionaron ninguna posición adelantada. Cometió 9 infracciones y recibió una amonestación.
En la segunda parte, River remató cinco veces al arco, dos de ellas en forma desviada. Tuvo a su disposición cuatro situaciones de gol, dos en el área, dispuso de diez tiros libres ofensivos y de siete tiros de esquina.
El “millonario” sumó siete laterales ofensivos, no le sancionaron posiciones adelantadas y convirtió un gol. Cometió en la segunda parte siete infracciones y le amonestaron un jugador.
En tanto Boca, remató cinco veces al arco, tres de ellas en forma desviada y dispuso de cinco situaciones de gol, tres en el área.
Tuvo a su favor seis tiros libres ofensivos, le sancionaron un tiro de esquina y dispuso de cinco laterales en ofensiva.
Le cobraron al “xeneize” apenas una posición adelantada y convirtió un gol en esa segunda parte. También recibió cuatro tarjetas amarillas y tuvo un jugador expulsado.
Estos son los números de lo que fue el primer Superclásico de la historia de la Superliga.
Esto muestra lo que fue un vibrante encuentro que se desarrolló en un repleto estadio “Monumental” que al inicio mostró un fuerte apoyo para el entrenador Marcelo Gallardo y sus jugadores, luego de la fallida semifinal de la Copa Libertadores.