HUMAHUACA (Corresponsal). La comparsa humahuaqueña "La Diablada" vivió su desentierro el día sábado por la tarde acompañada de una gran cantidad de personas que siguió la celebración.
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HUMAHUACA (Corresponsal). La comparsa humahuaqueña "La Diablada" vivió su desentierro el día sábado por la tarde acompañada de una gran cantidad de personas que siguió la celebración.
La agrupación de la ciudad histórica tuvo su jornada de desentierro. La característica principal de esta comparsa es la gran cantidad de disfrazados de diablos o diablitas que participan en ella y que es un requisito indispensable ya que no hay otros tipos de disfraces. Cada disfraz es una verdadera artesanía, requiere de horas y horas de bordado. Cada uno tiene un diseño único y los diablos no pasan desapercibidos por el sonido de los cascabeles.
El sábado alrededor de las 19, la comparsa humahuaqueña se reunió al costado de la Torre de Santa Bárbara. Los disfrazados acompañados de la banda de música de la comparsa bailaron hacia su mojón.
Una vez allí, todos los diablos danzaban alrededor del mojón mientras se realizaba el ritual y las bombas de estruendo empezaban a sonar. El sonido de la tercera bomba indicó que el desentierro se había realizado. Es en ese momento cuando los disfrazados se van bailando hacia el Monumento y realizan su descenso ante una multitud congregada que mira su pasaje a lo largo de las escalinatas del majestuoso monumento humahuaqueño. La comparsa La Diablada es una de las agrupaciones más nuevas en relación a otras agrupaciones con más historia y cerca de cumplir los cien años. Sin embargo, año a año convoca a más gente por el atractivo que genera el diablo quebradeño. Como todas las agrupaciones quebradeñas de este tipo, La Diablada es una institución que trabaja durante para poder solventarse.