La propuesta pascual del Museo Terry incluye dos muestras que se inauguraron este sábado: la del tejedor Ricardo Alancay y las cerámicas y pinturas de Nora Guerrero y Luis Alberto Quinteros. Ricardo Alancay cuenta con una larga trayectoria como tejedor y docente. Nacido en Barrancas, donde aprendió el oficio de sus mayores, tiene el don de ofrecer piezas de una delicadeza singular, y de transmitir su saber a alumnos que resaltan por la belleza de sus trabajos.
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La propuesta pascual del Museo Terry incluye dos muestras que se inauguraron este sábado: la del tejedor Ricardo Alancay y las cerámicas y pinturas de Nora Guerrero y Luis Alberto Quinteros. Ricardo Alancay cuenta con una larga trayectoria como tejedor y docente. Nacido en Barrancas, donde aprendió el oficio de sus mayores, tiene el don de ofrecer piezas de una delicadeza singular, y de transmitir su saber a alumnos que resaltan por la belleza de sus trabajos.
Tejidos llenos de mensajes, piezas de barro que reflejan el entorno y dibujos de doble visión, son la obras que se pueden apreciar en Tilcara.
Sus tapices nos hablan de un don especial por el tejido, por el conocimiento de las lanas, las tinturas y su entramado, pero a la vez nos muestran a un hombre que anda y conoce la tierra que habita, reconociendo las relaciones de sus elementos, interpretando sus contenidos simbólicos en base al conocimiento de su pueblo, y que ha sabido observar con agudeza los mensajes escritos, desde miles de años atrás, en cuevas y aleros.
Su muestra nos abre las puertas a una visión no estereotipada de ese mundo lleno de sabiduría y consciente de pertenecer a la Pachamama. Así surgen tanto colores como temas que no siempre son los habituales a la hora en la que se quiere representar lo propio, pero que en la paleta y la temática de Alancay saben a esa herencia que nos sigue fascinando para enseñarnos a vivir en esta tierra.
Las cerámicas de Nora Guerrero también nos presentan a una aguda observadora del entorno, y a su don de plasmar en sus piezas y vasijas detalles del mundo animal y de su representación simbólica. Lejos de la quietud que tantas veces atenaza a la representación en barro, las de Guerrero parecen cobrar vida y nos seducen desde una singular belleza.
Los dibujos y pinturas de Luis Alberto Quinteros, que comparte la sala con Guerrero bajo el rótulo común de "Bohemios", presenta tres series: Damas y Flores, Entre Ángeles y Quijotes y Cristo y su Vida, donde trabaja la doble visión que nos evoca dos composiciones a la vez, temas que visualizamos en dos momentos distintos de la observación.