Al menos 35 personas murieron en las últimas horas en supuestos bombardeos de la coalición internacional liderada por Washington, en un respaldo de las fuerzas kurdosirias en el noreste de Siria que el presidente turco espera lograr hoy que su par estadounidense, Donald Trump, modere.
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Al menos 35 personas murieron en las últimas horas en supuestos bombardeos de la coalición internacional liderada por Washington, en un respaldo de las fuerzas kurdosirias en el noreste de Siria que el presidente turco espera lograr hoy que su par estadounidense, Donald Trump, modere.
En tanto, el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, indicó ayer, un día antes del inicio de la sexta ronda de conversaciones indirectas en Ginebra entre Damasco y los rebeldes, que las "zonas seguras" acordadas en Astaná no podrán sostenerse "si no hay un horizonte político concreto, en una dirección u otra".
De los fallecidos en los ataques, al menos 23 perdieron la vida en tres presuntos raids de aviones de la alianza internacional contra la localidad de Al Bukamal, controlada por el grupo islamista Estado Islámico (EI) y en la frontera entre la provincia siria de Deir Ezzor e Irak.
Entre los muertos, hay al menos quince desplazados iraquíes y sirios procedentes de otras zonas que se encontraban en Al Bukamal.
La ONG no descartó que el número de muertos aumente porque entre los escombros hay heridos.
En la vecina provincia de Al Raqqa, al menos doce personas perecieron en un ataque similar contra el pueblo de Al Akirshi.
Mientras tanto, en una respuesta implícita al presidente de Siria, Bashar al Assad, quien el jueves pasado afirmó ante la televisión bielorrusa que los encuentros de Ginebra eran solo "para los medios" y no producirían "nada sustancial", De Mistura resaltó en rueda de prensa que había una delegación oficial siria trabajando en la localidad suiza.
"No quiero entrar en ningún tipo de comentario con respecto a las declaraciones hechas por el presidente Al Assad. Lo que puedo decir es que su delegación ha llegado (a Ginebra) y tiene la autoridad para entablar conversaciones serias", recalcó.
"Ninguna reducción de la violencia se mantendrá si no hay un horizonte político concreto en una dirección o en otra", dijo el mediador, interrogado sobre el acuerdo que el pasado 4 de mayo firmaron Rusia, Turquía e Irán en Astaná, Kazajistán, para reducir las hostilidades .