Un ciudadano ruso residente en Cancún, México, está en estado de coma inducido tras haber matado a un joven que, junto a un grupo de enardecidos, fue a su casa para hacerle un planteo por los videos racistas y ofensivos difundidos en las redes sociales.
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Un ciudadano ruso residente en Cancún, México, está en estado de coma inducido tras haber matado a un joven que, junto a un grupo de enardecidos, fue a su casa para hacerle un planteo por los videos racistas y ofensivos difundidos en las redes sociales.
El hombre, identificado como Aleksei Makeev, está internado y detenido por haber matado a un integrante del grupo que fue a atacarlo a su casa, aunque podría salir libre debido a que actuó en legítima defensa.
No obstante, podría enfrentar otros cargos pues fue objeto de denuncias por su comportamiento agresivo y por difundir mensajes de odio y racismo contra los mexicanos, señala un cable de EFE.
El Instituto Nacional de Migración (INM) señaló que solicitará la cooperación del Consulado de Rusia para deportar a Aleksei Makeev, lo que ya había sido solicitado el 15 de diciembre pasado por sus actitudes discriminatorias.
El INM lo había tenido bajo resguardo durante un mes en una estación migratoria, pero el consulado ruso se había negado a extender un salvoconducto para deportarlo.
Las autoridades ordenaron su salida definitiva del país el 19 de enero pero no cumplió esta disposición.
El viernes, más de medio centenar de hombres y mujeres acudió a su casa en Cancún para protestar por videos racistas y ofensivos difundidos en sus cuentas de internet.
Al salir, el hombre apuñaló y mató a un joven que había tratado de llevarlo hasta la calle. En ese momento la muchedumbre se lanzó en su contra y lo golpeó con palos, piedras, botellas, tubos, puntapiés y hasta machetes, según señalaron testigos.
Makeev está en estado de coma inducido en el Hospital General de Cancún con un traumatismo en el cráneo y severas lesiones.