El Tribunal en lo Criminal N° 3 resolvió condenar a la pena de 8 años de prisión a Karen Liliana Muñoz Calani, luego de hallarla autora penalmente responsable del delito de "robo en poblado y en banda con el uso de arma de fuego cuya actitud para el disparo no pudo ser acreditada", en un hecho ocurrido en junio del 2014 en la ciudad de La Quiaca.
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El Tribunal en lo Criminal N° 3 resolvió condenar a la pena de 8 años de prisión a Karen Liliana Muñoz Calani, luego de hallarla autora penalmente responsable del delito de "robo en poblado y en banda con el uso de arma de fuego cuya actitud para el disparo no pudo ser acreditada", en un hecho ocurrido en junio del 2014 en la ciudad de La Quiaca.
La parte resolutiva del fallo se leyó anoche a última hora, luego de la producción de los alegatos, donde la fiscal de Cámara Delia Ortiz había solicitado la pena de 16 años de prisión, mientras que la defensa oficial que representó legalmente a Muñoz Calani solicitó su absolución lisa y llana tras manifestar una serie de nulidades que le fueron denegadas.
Para la fiscal de Cámara Delia Ortiz quedó acreditado que Muñoz Calani y al menos tres personas más ingresaron a robar al negocio del matrimonio Alem ubicado sobre calle Siria de la ciudad fronteriza, en un hecho ocurrido la siesta del 26 de junio del mencionado año.
En otro tramo de la producción de los alegatos de la fiscal de Cámara, hizo referencia a que Muñoz Calani y un hombre merodeaban la zona desde horas de la mañana.
Este dato quedó sentado con la declaración del testigo Miguel Chehadi, un comerciante que tiene su local ubicado a unos 60 metros del comercio de los Alem.
"Andaban preguntando por precios, pero no sabían especificar qué era lo que en realidad querían, tuve como una corazonada que algo no andaba bien, era gente que no frecuentaba el lugar", dijo.
Además quedaron acreditados los dichos de la víctima, que atendió a una pareja alrededor de las 13.30, que compraron mercadería por valor de 1.300 pesos y quedaron en retirarla una hora después.
Aprovechando la hora de la siesta y que en esa fecha la Selección Argentina de fútbol jugaba un partido, llamaron a la puerta de la mujer y cuando ésta abrió se abalanzaron sobre ella, la amenazaron con un arma de fuego y le propinaron una feroz golpiza, tanto a ella como a su marido, que dormía en la segunda planta de la vivienda.
Según el relato de Blanca Safar de Alem, los delincuentes se alzaron con una suma aproximada al millón de pesos, entre 56 mil dólares, unos 400 mil pesos argentinos y otra cantidad de pesos bolivianos.
Nulidades
En sus alegatos el defensor oficial Martín Meriles había solicitado la absolución lisa y llana de su defendida, luego de plantear una serie de nulidades.
En su extenso relato, Meriles solicitó el planteo de nulidad a los alegatos de la fiscal de Cámara, manifestando que estaban en escena delictiva tres hombres, y que su defendida no fue nombrada en tales hechos.
Además planteó lo mismo para los actos de reconocimiento fotográfico, nulidad de las actas y de todas las instrumentales que se incorporaron desde el vecino país de Bolivia, planteos que no fueron dados a lugar.
Es que Muñoz Calani tenía pedido de captura internacional y fue detenida cuando estaba a punto de tomar un coche desde Tupiza la ciudad de La Paz en Bolivia y había sido reconocida por su víctima en una serie de fotografías que habrían sido aportadas por la fuerza del vecino país, luego de que la víctima se reuniera con la cónsul argentina en esa localidad.
Por otra parte, el letrado adelantó que apelará el fallo.