SAN PEDRO (Corresponsal)Con marcado éxito y con gran participación de la feligresía, se realizó la caravana en honor a San Pedro Apóstol, actividad que está incluida en el programa de las fiestas patronales, donde el gran atractivo fueron las luminarias realizadas en tres sectores de la ciudad, en torno a las cuales las comunidades recibieron la imagen del santo patrono.
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SAN PEDRO (Corresponsal)Con marcado éxito y con gran participación de la feligresía, se realizó la caravana en honor a San Pedro Apóstol, actividad que está incluida en el programa de las fiestas patronales, donde el gran atractivo fueron las luminarias realizadas en tres sectores de la ciudad, en torno a las cuales las comunidades recibieron la imagen del santo patrono.
Con el propósito de recuperar las tradicionales fogatas o luminarias, que se realizan para la festividad de San Juan y de San Pedro, el párroco Daniel Baca, por sugerencia de la comunidad, decidió realizar la caravana que unió tres puntos importantes de la ciudad. En esta oportunidad fue nocturna, ya que salió desde la parroquia San Pedro Apóstol a las 21, con la imagen del santo patrono que fue colocada en un vehículo con la debida seguridad y ornamentada con globos con los colores papales. Otra camioneta acompañó con altavoces, encabezando la larga caravana y anunciado la llegada de la sagrada imagen del patrono. Luego de recorrer las arterias se dirigió hasta el barrio La Merced, donde aguardaban los feligreses con la primera luminaria y se compartió un momento de oración. Horas más tarde, la caravana arribó hasta el sector de las 100 hectáreas, conocido como la nueva ciudad, ubicada en la franja sudoeste, donde aguardaron las familias y se encendió la segunda luminaria ubicada en inmediaciones de la escuela Papa Francisco y desde allí partió hasta el sector norte de la ciudad.
En barrio Santa Ana, la comunidad aguardó desde tempranas horas la llegada de la caravana que arribó poco antes de la medianoche, siendo recibida con fuegos artificiales y chocolate caliente con facturas para atenuar el frio de la noche. Un momento cargado de emoción se vivió cuando se encendió una gran luminaria y alrededor se ubicaron las familias. Allí se compartió un momento de oración, se bendijo el fuego, el agua, para luego compartir canticos de alegría por el encuentro de las dos comunidades parroquiales.
“Ha sido maravillosa la experiencia porque a lo largo del camino, las familias de los aguardaban en la puerta para saludar a la imagen y pedir la bendición. Fue emocionante compartir el ritual de las luminarias, esta riqueza que tiene la religiosidad popular con tanto significado, con tantos mensajes, algo que tenemos que recuperar, teniendo el debido cuidado de seguridad porque se trata de fuego. Es una tradición maravillosa y tenemos que mantenerla viva, tanto para la fiesta de San Juan como la de San Pedro. El cierre de la caravana fue maravilloso porque las luminarias simbolizan la fe en Cristo que es luz, la fe de San Juan y de los apóstoles Pablo y Pedro que fueron capaz de dar la vida por Jesús”, dijo el padre Daniel Baca.
Por su parte el párroco de San Andrés Apóstol, Héctor Martínez, indicó que el especial encuentro surgió por iniciativa del padre Daniel para recuperar las tradiciones que nos dejaron nuestros abuelos. Explicó que la fogata de San Juan, se realiza en primeras vísperas, pero en este marco de las fiestas patronales en honor a San Pedro, se decidió realizarlo en este día y a este horario.
“Es conmovedor y muy lindo porque simboliza la luz que ilumina la oscuridad, que disipa las tinieblas, que es Cristo resucitado. Generalmente alrededor de la misma se reúne la familia y se pide perdón por las cosas malas para que Dios disipe las tinieblas del corazón el hombre. Arriba de la fogata se coloca un muñeco que simboliza el martirio de San Pedro y San Pablo. También se vive el ritual del agua, en el día de San Juan, haciendo memoria que fue él quien bautizó a Jesús. Es un día muy sagrado para nuestro pueblo”, dijo el padre Héctor.
Agregó que además de recuperar las tradiciones y valores que se están perdiendo, siguiendo el mandato del Papa se creó un espacio de encuentro, “qué lindo ver a la familia reunida en torno a una fogata, escuchar el canto de los jóvenes, ver bailar a las personas mayores, fue una fiesta familiar donde nos encontramos con amigos y en medio de las tristezas, compartimos en alegría”, finalizó.