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PURMAMARCA (Corresponsal). La comunidad purmamarqueña también adhirió a la marcha nacional contra la violencia de género para concientizar sobre los derechos de la mujer y solicitar políticas de prevención y acción por parte de las instituciones gubernamentales que sean efectivas para combatir los femicidios en Jujuy y en el país.
La convocatoria se realizó en la plaza 9 de julio poco después de las 17.30, hubo una muestra de artesanías relacionada al tema, lectura de un documento, marcha y al finalizar una merienda.
En la esquina del algarrobo histórico y con los últimos rayos del sol que se perdían por los cerros de siete colores, mujeres, hombres y niños fueron llegando de a poco para participar de la marcha que fue organizada por un grupo de autoconvocados.
En primer lugar se pudo apreciar la muestra de la artesana Laura Baquer, de Tilcara, que consistió en la exhibición de pequeños roperitos de madera los cuales en su interior contenían los nombres y datos de las mujeres que fueron víctimas de femicidio en todo el país.
Cerca de las 18 se sumaron más adherentes y entonces se inició con palabras de la vecina Laura Vilte, quien dio la bienvenida a los presentes e invitó a las personas a dar testimonio o decir algunas palabras.
Marina Ruiz, una joven del pueblo se sumó entonces con la lectura de una poesía anónima y posteriormente Carolina Alabar, hizo lo propio con poesías escritas por Miguel Leaños, vecino de Chalala. Una visitante de la provincia de Buenos Aires animó a los lugareños a seguir con la convocatoria y la lucha contra la violencia de género a través del compromiso de toda la sociedad.
Por su parte, Claudia Barros, miembro del grupo de autoconvocados, sostuvo que "con esta marcha queremos llegar a que las instituciones se movilicen para cumplir con las funciones que tienen que cumplir para que los derechos de la mujer sean reconocidos. Necesitamos que el municipio cree un espacio en el que se trabaje sobre la violencia, también podría ser desde el puesto de salud y en síntesis un trabajo en conjunto entre los vecinos y las instituciones".
"Entre todos se debe trabajar para contener a las familias donde la violencia está naturalizada y muchas veces no se hacen las denuncias por temor, y se llega al peor final que es el femicidio, pero mucho antes hay señales de alerta, estas hay que detectarlas antes y así poder ayudarnos entre nosotras", añadió.
Con los carteles listos y bien en alto, partieron en caminata entonando cánticos.
Al retornar a la plaza 9 de julio compartieron una merienda con mate y bollo para finalizar con la actividad.