Efectivos de la División Robos y Hurtos de la Brigada de Investigaciones detuvieron a dos mujeres y una mujer trans oriundas de la provincia de Salta, por reiterados robos a comercios del microcentro jujeño. Las ahora detenidas se movilizaban en una camioneta de alta gama.
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Efectivos de la División Robos y Hurtos de la Brigada de Investigaciones detuvieron a dos mujeres y una mujer trans oriundas de la provincia de Salta, por reiterados robos a comercios del microcentro jujeño. Las ahora detenidas se movilizaban en una camioneta de alta gama.
Las imputadas usaban carteras o bolsos con placas de aluminio, con lo que evitaban que sonaran las alarmas de los comercios afectados.
Tendrían frondosos prontuarios en Salta, y al parecer decidieron probar suerte en nuestra provincia, debido a que en el vecino estado argentino estaban identificadas por los comerciantes y la policía
El procedimiento se concretó el pasado viernes, en el marco de una investigación por ilícitos contra la propiedad, tipos de robos y hurtos de la Dirección de Investigaciones, arrestando a las "mecheras" salteñas y recuperando elementos robados que trasladaban en un rodado.
Elementos secuestrados
Por tareas de inteligencia criminal se determina que las salteñas usarían de "aguantadero" un inmueble ubicado en Díaz Vélez al 1300 barrio Coronel Arias de esta ciudad capital, por lo que se llevó a cabo un allanamiento en el inmueble,
El procedimiento arrojó el siguiente resultado: secuestro de varias prendas de vestir, todas nuevas, todas con broches de seguridad y tickets de precio de diferentes marcas, y talles, y elementos de higiene personal, los cuales serían producto de origen delictivo.
En el lugar se arrestó a dos mujeres y una mujer transexual, dos de ellas oriundas de la provincia de Salta, que se identificaron con nombres falsos, sin acreditar sus documentos de identidad, quedando demoradas por averiguación de antecedentes y a disposición del juez de Control N§ 1 Gaston Mercau, a solicitud de Fiscalía Penal N§1 de Diego Cussel.
Las mismas empleaban para su traslado un vehículo marca Chery modelo Tiggo color gris, y al preguntarles sobre la titular del vehículo en primer instancia negaron que sea de propiedad de algunas de ellas. Por orden del juez competente, se ordenó el registro del automóvil, realizado en presencia de testigos requeridos al efecto, arrojando el secuestro de otras prendas.
Se corroboró luego el apellido de la propietaria del rodado, la que sería conocida en el ambiente delictivo como "mechera y/o punga".