La construcción de la comisaría en el barrio San Francisco de Álava es el resultado de la gestión de muchísimos años del centro vecinal y vecinos del lugar que trabajaron sin pausa para alcanzar el objetivo.
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La construcción de la comisaría en el barrio San Francisco de Álava es el resultado de la gestión de muchísimos años del centro vecinal y vecinos del lugar que trabajaron sin pausa para alcanzar el objetivo.
Ahora se está levantando un nuevo edificio, por lo que los promotores de la iniciativa aspiran a que se trabaje en serio en la lucha contra el narcotráfico y el consumo de sustancias prohibidas.
A lo largo de los años las mejoras en materia de seguridad llegaron al sector gracias al esfuerzo de los vecinos. En 2006, residentes del barrio encabezados por la promotora del centro comunitario "Servir" Lita Martínez de Heredia, junto a representantes de la parroquia, el puesto de salud y escuelas, iniciaron la gestión del terreno ubicado en la manzana 128 para la construcción de la sede policial. Con mucho esfuerzo, consiguieron que la Legislatura de la Provincia desafectara la parcela donde se levantó el inmueble. En aquella gestión, subrayó Lita Heredia en una entrevista con nuestro matutino, intervinieron "María Sotelo, delegada de la iglesia Nuestra Señora de la Cruz; el entonces presidente del centro vecinal, Marcelino Tolaba, médicos del puesto de salud y directivos de las escuelas de la zona".
En 2008 consiguieron un móvil policial de manera permanente, recordó la activa dirigente comunitaria. Agregó que ese año junto con Marta Ramos promovieron la limpieza del terreno para agilizar las obras de la proyectada dependencia.
El 25 de febrero de 2014, junto a un numeroso grupo de vecinos solicitaron al entonces jefe de Policía, Roberto Paniagua, el cambio de rango de destacamento a subcomisaría. Ese mismo día, en una nota dirigida al secretario de Seguridad de aquel momento, Jorge Zurueta, gestionaron una audiencia para avanzar en la articulación del decreto 3813 del 1 de noviembre de 2013 dictado por el gobernador Eduardo Fellner, vinculado con la construcción del destacamento. Entre los temas a abordar, mencionaban el cambio de rango. "Las razones que impulsan este imperioso pedido radican en que la jurisdicción que comprendería aquel primario destacamento policial, la misma es amplia geográficamente y demográficamente comprende a muchos vecinos, en tal sentido, advertimos un sensible aumento de la población conforme al Censo del año 2011", señalaron en dicha nota, destacando asimismo la inseguridad reinante en el barrio. Refirieron que "uno de los graves problemas de la falta de una dependencia policial hasta la fecha es el peligro que corren nuestros vecinos que no pueden asistir al puesto de salud de nuestro barrio, que estaría próximo al lugar a realizar la futura subcomisaría. Tanto el personal del puesto de salud como muchas de las madres y niños del barrio se ven constantemente sometidos a diversos despojos, fruto del accionar delictuoso de personas" que merodeaban la zona por aquellos tiempos. En consecuencia, era conveniente contar con una subcomisaría que "beneficie a la población las 24 horas del día".
El 21 de marzo de ese año, Lita Heredia representando al centro comunitario "Servir" pidió a Zurueta que estudie la posibilidad de cambio de rango de la dependencia policial, adjuntando notas, informes de Inmuebles, el anteproyecto, el expediente y una copia del Boletín Oficial donde se menciona el decreto.
Lo cierto es que luego de muchos años de gestiones consiguieron el objetivo.