El presidente Mauricio Macri paseó ayer por el centro de la localidad neuquina de Villa La Angostura, compró regalos para el día de los Reyes Magos y dialogó con comerciantes, quienes le manifestaron su preocupación por la reducción de la actividad comercial por la despareja competencia con Chile.
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El presidente Mauricio Macri paseó ayer por el centro de la localidad neuquina de Villa La Angostura, compró regalos para el día de los Reyes Magos y dialogó con comerciantes, quienes le manifestaron su preocupación por la reducción de la actividad comercial por la despareja competencia con Chile.
Tras varios días de lluvia y frío, el mandatario y la primera dama, Juliana Awada, aprovecharon el mejoramiento de las condiciones meteorológicas para recorrer la tradicional villa patagónica y comprarle algunos regalos a la hija de ambos, Antonia Macri.
Durante su paseo por la Avenida Arrayanes, el jefe de Estado también se sacó fotos con vecinos, comerciantes y turistas.
El presidente se mostró descontracturado, con pantalones cortos y zapatillas, y con una campera de abrigo eligiendo regalos.
En ese marco, el líder del PRO se interiorizó en la situación de los comercios de la zona, quienes sufren por la dura competencia con sus pares chilenos.
Macri permanecerá en la Patagonia varios días más, pero el martes realizará una visita a San Rafael, Mendoza, para dar inicio oficial a obras de repavimentación en esa ciudad y luego retomar su descanso en la localidad nequina, descartando la posibilidad de que asista a la reinauguración de un hospital del Sindicato de Camioneros. En Mendoza, estará acompañado por el gobernador Alfredo Cornejo.