Ya le había pasado a Racing, frente a Boca: ganaba 2-0 y el "xeneize" logró el 2-2 en los últimos minutos. Y le volvió a pasar contra San Martín en Tucumán: se imponía 1-0, con gol de Augusto Solari, y jugaba 11 contra 10, por la expulsión de Arce, el portero local. Pero el conjunto de Walter Coyette, en dos contragolpes rápidos, convirtió gracias al olfato de Claudio Bieler y consiguió un sorpresivo primer triunfo en la Superliga.
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Ya le había pasado a Racing, frente a Boca: ganaba 2-0 y el "xeneize" logró el 2-2 en los últimos minutos. Y le volvió a pasar contra San Martín en Tucumán: se imponía 1-0, con gol de Augusto Solari, y jugaba 11 contra 10, por la expulsión de Arce, el portero local. Pero el conjunto de Walter Coyette, en dos contragolpes rápidos, convirtió gracias al olfato de Claudio Bieler y consiguió un sorpresivo primer triunfo en la Superliga.
El duelo que demoró su inicio por problemas en la iluminación del estadio mostró al dueño de casa con la iniciativa en el arranque. Sin embargo, hubo un punto de inflexión con la expulsión polémica del arquero Ignacio Arce, quien fue sancionado por el árbitro Nicolás Lamolina por tocar el balón con la mano afuera del área en un ataque de Lisandro López.
Más tarde, un rollo de papel le dio en la cabeza a Renzo Saravia, quien fue atendido por los auxiliares médicos.
El conjunto de Eduardo Coudet fue superior en la mayor parte del partido, aunque no siempre logró traducir esa mejor imagen en elaboración. Y, cuando llegó al arco de San Martín, se encontró con un Jorge Carranza gigante. En el inicio de la segunda parte rompió la paridad con un centro de Centurión y un cabezazo preciso de Augusto Solari.
Sin embargo, el "santo" nunca abdicó. Aprovechando los espacios que la visita dejó por las bandas y las grietas que ofreció en las transiciones (¿ayudadas por los desequilibrios en los camios de Coudet?), en dos desbordes (uno de Costa, el otro de García), encontró al goleador Claudio Bieler en dos oportunidades para el impensado 2-1.