Desde hoy el estudio de la FM Abra Pampa -97.9 del dial- llevará el nombre de Aldo Victor Ábalos, un hijo dilecto de la Puna. La ceremonia de imposición tendrá lugar a las 10.30 en la sede de la emisora ubicada en Sarmiento 128 de la ciudad de Abra Pampa.
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Desde hoy el estudio de la FM Abra Pampa -97.9 del dial- llevará el nombre de Aldo Victor Ábalos, un hijo dilecto de la Puna. La ceremonia de imposición tendrá lugar a las 10.30 en la sede de la emisora ubicada en Sarmiento 128 de la ciudad de Abra Pampa.
Aldo Ábalos, que fue el corresponsal de nuestro diario en la zona por más de veinte años, falleció el 28 de febrero de 2011. Este gran periodista supo cronicar como pocos los hechos de actualidad de su terruño, como también rescatar del olvido la rica historia, paisajes y protagonistas del quehacer puneño. No hubo actividad en beneficio de la comunidad en la que el desaparecido periodista no haya participado.
Y el día para la imposición de su nombre al estudio de la emisora tiene mucho significado, ya que hoy hubiera festejado su cumpleaños. Ábalos nació el 1 de noviembre de 1959 en Pan de Azúcar. Cursó sus estudios primarios en la escuelita del lugar y Mina Pirquitas, para concluirlos en la Escuela 245 de Abra Pampa. A los medios los realizó en el Colegio El Salvador, Normal "Gendarmería Nacional" y Normal Superior "Sargento Cabral" de la "Capital de la Puna".
Fue uno de los mentores del Festival Folclórico del Huancar. Su hijo Guido describió a su padre como un "caminante como muy pocos" que recorrió la Puna "de palmo a palmo, más allá de los inconvenientes de la presión arterial transitó por los lugares más inhóspitos y agrestes para llevar al conocimiento provincial y nacional las realidades de la América profunda". Agregó que desde aquel domingo 27 de febrero de 2011 "en cada uno de los corazones abrapampeños que sí saben de reconocimientos, existe un vacío que no supo regocijarse en algún micrófono. En las alturas de Cusi Cusi, Lagunillas del Farallón o la fría Coyaguayma, no retumba la voz del trovador de la Puna; ya en El Aguilar, en Tres Cruces o en el mágico Huancar, no se conjugan los versos del corazón y la razón; ya la Puna se quedó sin voz".
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