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Cumplió 100 años la escuela de Rumi Cruz

"No significa necesariamente celebrar, significa hacer memoria, recuperar lo transitado", dijo el director Cruz.
Jueves, 04 de octubre de 2018 01:02

Deslumbró como oro, la Escuela Nº 331 de Rumi Cruz, que acaba de festejar sus 100 años de vida en una fecha muy emotiva con la presencia de una importantísima delegación de exalumnos y docentes que llegaron para recordar su paso por la casa de estudios. En la víspera una serenata al aire libre rompió el silencio de la tranquila comunidad de la Puna jujeña.

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Deslumbró como oro, la Escuela Nº 331 de Rumi Cruz, que acaba de festejar sus 100 años de vida en una fecha muy emotiva con la presencia de una importantísima delegación de exalumnos y docentes que llegaron para recordar su paso por la casa de estudios. En la víspera una serenata al aire libre rompió el silencio de la tranquila comunidad de la Puna jujeña.

Durante toda la mañana del martes se produjo el arribo de los visitantes, en su mayoría exalumnos, como por ejemplo la presencia de la abuela Francisca Figueroa quien en los próximos días estará cumpliendo 90 años de vida, con su salud todavía vigorosa, fue digna de un reconocimiento y no sólo por parte de la institución, sino también de todo el público presente.

RECONOCIMIENTO/ PARA LA ABUELA FRANCISCA FIGUEROA, DE CASI 90 AÑOS.

Pasadas las 11 de la mañana comenzó el acto protocolar, entre las autoridades presentes estuvieron, Miriam Ramos, directora de Nivel Primario junto a su par Otilia Subia, directora de Nivel Inicial, ambas en representación del Gobierno provincial; el intendente de Abra Pampa José Luis Liquín; César Alberto Cruz, director de la escuela centenaria, entre otros.

Grupo de entusiastas en 1918

"Transcurría el año 1918 cuando un grupo de entusiastas sembraba la semilla fundacional de lo que es nuestra querida institución. Un pequeño grupo de grandes personas motivado por la falta de una escuela primaria en la zona alcanzaban el anhelo de este gran sueño", decía una de las glosas que anunciaba el conductor del acto que comenzaba bajo un imponente sol, con la participación de banderas de ceremonia de la Escuela de Potrero de la Puna, de Abra Pampa y los anfitriones.

Fueron numerosos los presentes que recibió la escuela en el día de su cumpleaños, entre ellos numerosas placas recordatorias y una Bandera Argentina, todos de la mano de exalumnos.

Y no faltó la inspiración de quienes pasaron por sus aulas, como por ejemplo la poesía de Bartolomé Ramos o la narración de Armando Díaz quien contó cómo fueron sus años de clases, escrito que quedó en manos del actual director de la escuela centenaria.

AGRADECIDOS/ GRUPO DE EXALUMNOS QUE VOLVIÓ A LA ESCUELA PARA EL FESTEJO.

Justamente el director César Cruz fue el encargado de las palabras de bienvenida.

"Estos 100 años no significa necesariamente celebrar, significa sobre todo hacer memoria, recuperar lo transitado, explicar y diagnosticar el presente para lanzarnos con más fuerza hacia el futuro".

Por su parte Miriam Ramos, directora de Nivel Primario, dejó el saludo de la ministra de Educación de la Provincia Isolda Calsina, además anunció gestiones para poder convertir a la escuela de Rumi Cruz en jornada extendida antes de finalizar el ciclo lectivo 2018, situación que ayudaría a que la matrícula escolar se mantenga o bien aumente, ya que en la actualidad la institución educativa cuenta con cinco alumnos y uno de ellos egresa de séptimo grado.

Largas caminatas

También y quizás a modo de regalo, la Municipalidad de Abra Pampa de la mano de su titular José Luis Liquín, se comprometió en trabajar para la construcción de un playón deportivo, de mucha necesidad para los alumnos de la escuela. 

Tras las alocuciones, la entrega de recordatorios para exalumnos y docentes, se realizaron los números alusivos a la fecha, entre ellos una puesta en escena de clases de años atrás, cuando los alumnos caminaban varios kilómetros para llegar al dictado de clases, de cómo se guiaban por la sombra de una piedra, esa proyección indicaba si estaban en horario o no para el ingreso a la escuela, entre sus pertenencias llevaban el tostado que les servía de alimento para mitigar el hambre y el cansancio que generaba caminar por los cerros de ida y regreso a sus casas.

No faltó el puntero en manos del maestro que utilizaría en caso de que algún alumno no haya estudiado. 

En el final, vino la interpretación del “Feliz Cumpleaños” cantado a viva voz con el número 100 sobre una hermosa torta, posteriormente el alumno de séptimo grado René Yamil Giménez fue el encargado de soltar globos con deseos y anhelos en su interior. De esa manera la escuela de Rumi Cruz festejó sus flamantes 100 años. 
 

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