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La Salamanca despidió al diablo

Como marca la tradición durante el domingo de tentación, se cumplió con el entierro del Carnaval, con el que culminan los festejos.

Domingo, 18 de febrero de 2018 22:05
LA COMPARSA LA SALAMANCA REALIZÓ LA CEREMONIA AL PIE DEL CERRO COLORADO.

Entre llantos y gritos de despedida de un hasta pronto que se hicieron eco por los cerros de colores, la comparsa La Salamanca enterró al diablito en el domingo de tentación junto a los integrantes, simpatizantes y visitantes que se reunieron en torno al mojón luego de compartir el último día del Carnaval 2018.

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Entre llantos y gritos de despedida de un hasta pronto que se hicieron eco por los cerros de colores, la comparsa La Salamanca enterró al diablito en el domingo de tentación junto a los integrantes, simpatizantes y visitantes que se reunieron en torno al mojón luego de compartir el último día del Carnaval 2018.

La Salamanca al igual que la mayoría de las comparsas purmamarqueñas sacó al Rey Momo el pasado sábado para vivir días de alegría y festejos entre familiares y amigos en los distintos fortines.

Poco después de las 13 en el salón municipal la comparsa ofreció el almuerzo de despedida y las anatas empezaron a convocar a más gente para bailar durante toda la tarde en la última jornada carnavalera para esta agrupación y sus simpatizantes.

Carnavalitos, sayas, cumbias, cuartetos, dianas, distintos ritmos sonaron en el predio y cerca de las 18 la banda de anateros del pueblo emprendió la marcha por calle Florida mientras los diablos disfrazados llevaban la bandera de este Carnaval y los copleros no dejaban de entonar los últimos versos llevando las cajas en alto y manteniendo viva esta fiel tradición purmamarqueña.

Ante los últimos rayos del sol recorrieron el cerro de los siete colores, el mirador El Porito, la cancha de fútbol hasta llegar al mojón emplazado al pie del paseo de Los Colorados. Una gran cantidad de personas rodeó el lugar, algunas subidas a los cerros y otras se quedaron más cerca del mojón para poder apreciar la ceremonia de despedida.

Selva Vilte, Laura Vilte, Jesús Ramos, Martín y Alejandro Vilte, María Ramos, entre otros miembros y seguidores de la comparsa chayaron el mojón por última vez y le agradecieron a la Pachamama por haber vivido una buena, divertida y tranquila edición del Carnaval. Asimismo, agradecieron a los padrinos y a todas las personas que colaboraron de una u otra manera aportando su granito de arena para que los festejos puedan realizarse y finalmente nombraron a la nueva comisión y a los nuevos padrinos.

El aroma del talco y la albahaca empezaron a sentirse cuando todos los presentes debieron sacudirse la ropa y los sombreros, como marca la tradición; es que deben dejar la serpentina y limpiarse lo más que puedan en el mojón. Al mismo tiempo se empezaron a oír los llantos y los lamentos de los diablitos picarescos que no querían que el carnaval se termine.

A pesar de ello llevaron sus trajes coloridos con el sonido de los cascabeles hasta la punta del cerro colorado para desde allí saludar a la gente y despedirse hasta el próximo año.

"Fue un Carnaval lindo y alegre, a su vez muy unido porque se vio que la solidaridad y la confraternidad existen. Hicimos un Carnaval lejos de lo que es comercial y lejos de intereses políticos, económicos, es un Carnaval de familias y de gente que ama su cultura", expresó Selva Vilte, integrante de la comisión organizadora de la comparsa La Salamanca.

 

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