¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

22°
18 de Abril,  Jujuy, Argentina
PUBLICIDAD

Las lluvias convirtieron a las Salinas en un "lago"

Turistas de distintas partes del país y del mundo se desviven por conocer el bello destino jujeño. Ahora con otro aspecto.
Miércoles, 21 de febrero de 2018 00:00
SELFIE / UNA PAREJA TOMÁNDOSE UNA FOROGRAFÍA JUNTO A UNA ESTATUA DE SAL, EN MEDIO DEL AGUA (Foto: Juan Fernández)
FLAMEANDO. CON LAS PRECIPITACIONES INTENSAS EL LUGAR TOMÓ OTRA FISONOMÍA. (Foto: Juan Fernández)
ATRACTIVO / EL NUEVO ASPECTO DE LAS SALINAS CAUSÓ SORPRESA (Foto: Juan Fernández)
RUTA NACIONAL 52 / AHORA DISCURRE EN MEDIO DE EXTENSOS "LAGOS" (Foto: Juan Fernández)
POSTAL TÍPICA / AL NORTE DE LA RUTA 52 LAS SALINAS SIGUEN FIRMES (Foto: Juan Fernández)
PAISAJE MAGNÍFICO / UNA CAMINATA EN MEDIO DEL AGUA Y SAL (Foto: Juan Fernández)
EL TRIBUNO DE JUJUY / VISITÓ EL ESPEJO DE AGUA QUE SE FORMÓ POR LAS LLUVIAS EN LAS SALINAS GRANDES

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Las Salinas Grandes, a más de 3.400 metros sobre el nivel del mar se convirtieron en un verdadero espejo, de los más altos de nuestro país. Es que a partir de las fuertes lluvias que se vienen registrando en toda la provincia de Jujuy, el salar, uno de nuestros sitios más visitados por turistas durante todo año, se llenó de agua y potenció su atractivo paisajístico.

El extenso salar está ubicado a unos 70 kilómetros de Susques por la ruta nacional 52 y desde el sábado se vio colmado de agua, alcanzando una altura de unos 50 centímetros, y por las fuertes corrientes de viento se formó un intenso oleaje, pocas veces observado o, al menos, captado por una cámara, llegando incluso a salpicar la calzada de la ruta.

 

 

El nivel de agua es dispar en el salar. Es que la ruta nacional 52 divide en dos al extenso terreno blanco que alcanza una superficie aproximada de 212 kilómetros cuadrados, y que se extiende hasta la provincia de Salta inclusive.

Al Norte de la vía que conduce directo al Paso de Jama estaba la parte "playa", donde el nivel del agua apenas toca los tobillos de los miles de turistas que ingresan para fotografiarse, o bien simplemente disfrutar de las propiedades curativas del agua salada. En cambio, al sur de la ruta, donde están paradores, casillas de información turística y las estatuas construidas con sal, el nivel del agua ayer era un poco más profundo, unos 20 ó 30 centímetros aproximadamente dependiendo de la zona.

La lluvia, que a lo largo del verano provoca estragos en la región, en el blanco territorio puneño no hace más que embellecerlo y potenciarlo turísticamente.

 

 

De hecho, a lo largo de la jornada de la víspera, cientos de personas ingresaron al salitre para disfrutar del paisaje y de los efectos visuales que ofrece, sobre todo a los amantes y aficionados a la fotografía.

El suelo del salar es engañoso, ya que su aspereza se ve disimulada por la capa de agua que lo cubre, aunque es solo un efecto, ya que la dureza del terreno obliga a que aquellos que quieren "mojar sus pies" ingresen con ojotas o sandalias, y en el caso de aquellos que lo hacen descalzos deben cuidar sus pasos y caminar lentamente, ya que los granos de sal que reposan en el fondo del agua no tienen nada que envidiarle al filo y dureza de las piedras.

Más allá de todo, en los accesos al salar se ven las zapatillas acomodadas en par de aquellos visitantes que previo ingreso al espejo "arremangaron" las botamangas de sus pantalones y luego marcharon lentamente por el infinito paisaje.

Visitantes jujeños, turistas de distintos puntos de nuestro país, al igual que del mundo, se maravillaron con el escenario que dejaron las lluvias que vienen reiterándose de manera cotidiana en la zona. Ya que allí, lejos de causar daños, no hace más que ponerle un condimento adicional al espectacular paisaje que ofrecen las Salinas Grandes.

 

 

Tramos de ruta con precaución

La ruta nacional 52 que conduce a Salinas Grandes, previo paso por la localidad de Purmamarca, se encuentra en buen estado general, aunque hay gran cantidad de vehículos pesados que trabajan en el mantenimiento de la misma, a partir de las intensas lluvias caídas en la zona a lo largo de las últimas semanas.

Así como potenció la espectacularidad del paisaje del salar, las precipitaciones han provocado daños en distintos puntos de la provincia, en particular de las rutas por las que se transita por la Quebrada y Puna jujeña.

De hecho, la ruta nacional 9 en la zona conocida como la Cuesta de Bárcena, a la altura del Arroyo del Medio, se encuentra cortada por trabajos de mantenimiento, por lo que el tránsito fue desviado por la “vieja” vía que corre en paralelo al río Grande.

También hay que circular con precaución en la zona de Volcán, a la altura de la calera, ya que la ruta nacional 9 es atravesada por un pequeño arroyo.

De allí hasta Purmamarca el camino está en perfectas condiciones, aunque claro, hay que circular con mucha precaución dado lo sinuoso del camino.

Vale destacar que más allá de las Salinas, ya en proximidades del Paso de Jama existe un paso alternativo de la ruta nacional 52 por una crecida en Taire.