Una nueva tendencia llegó a Jujuy para el embellecer el paisaje urbano. Se trata de los jardines verticales que de a poco van apareciendo en nuestras calles para disfrute de los jujeños.
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Una nueva tendencia llegó a Jujuy para el embellecer el paisaje urbano. Se trata de los jardines verticales que de a poco van apareciendo en nuestras calles para disfrute de los jujeños.
Estos ecosistemas verticales contribuyen a mejorar notablemente el aspecto de la arquitectura urbana y brindan una sensación de frescura y relax en medio de una ciudad que está en constante movimiento.
En nuestra ciudad ya contamos con algunos en confiterías, panaderías, domicilios particulares y en la fachada del edificio Azahares, ubicado en la calle Juan Bautista Alberdi casi esquina San Martín.
Según un vivero especializado, cada vez son más los interesados por este sistema que permite aprovechar los pequeños espacios de las casas al poder ser colocados en paredes (internas y externas), balcones y terrazas. Es una opción colorida y natural para dar vida y aire a nuestros espacios.
Se trata de una estructura de madera forrada en plástico y fieltro. Cuenta con bolsillos rellenos de tierra común y vermiculita (una sustancia mineral que se usa como aislante y absorbente) para facilitar el drenaje del agua y la circulación del aire. Algunos pueden hacerlo con un sistema de riego interno y una canaleta en la parte inferior para recibir el agua sobrante.
Según un vivero que brinda este servicio de construcción de jardines verticales ubicado en el barrio Chijra, cualquier tipo de planta puede adaptarse a esta estructura dependiendo de su ubicación. Si el usuario busca embellecer una pared en el interior de su hogar, el garaje o la galería se deben utilizar plantas de interior y si se decide colocar la estructura al aire libre y bajo el sol deberán utilizar plantas de exterior.
Aseguran que cada vez son más las personas que consultan y compran para sus viviendas este ecosistema vertical que tiene un valor aproximado de $ 2.000 por metro cuadrado (incluye la tierra y la vermiculita pero no las plantas). Otra opción son las bases para jardines colgantes. Son estructuras de tela que ya vienen listas para colgar en cualquier superficie. Dependiendo de sus medidas el precio ronda entre los $ 210 y $ 340.
Es una buena opción para aquellas personas amantes de las plantas y la naturaleza que no cuentan con un jardín o espacio verde en sus viviendas.
Tendencia mundial
Esta tendencia se ha desplazado a miles de ciudades de todo el mundo ya que cada vez son más las personas, comercios y cadenas de hoteles que eligen instalarlos como elemento diferenciador teniendo en cuenta que la gran cantidad de plantas y variedad de formas y colores llaman mucho la atención a sus clientes y transmiten al exterior un mensaje de responsabilidad medioambiental.
El jardín vertical más grande del mundo se encuentra en la ciudad de Bogotá (Colombia). Para la construcción de este ecosistema de alrededor de 3.100 metros cuadrados en el edificio Santalaia, se emplearon más de 84.000 plantas. En el centro comercial IlFiordaliso en las afueras de Milán (Italia) se encuentra el jardín vertical más grande de Europa para el que se utilizaron 44.000 plantas de más de 200 especies.
Las plantas carnívoras, una variedad que es inofensiva
Las plantas carnívoras o insectívoras se van asomando muy tímidamente a Jujuy. De a poco se incrementa el número de personas que se interesan por estas plantas que en muy pocos lugares se comercializan en sus diferentes variedades.
Una planta carnívora es aquella que aún siendo autótrofa obtiene un suplemento nutritivo gracias a que se alimenta de animales, sobre todo insectos.
Marcan tendencia
Axel Garzón Escobar, coleccionista y productor de plantas carnívoras, comentó a El Tribuno de Jujuy que esta es una tendencia que tomó terreno fuertemente en las provincias de Córdoba y Buenos Aires y que de a poco intenta instalarse en nuestra provincia a través de la producción y difusión.
Es necesario destacar que las carnívoras son plantas inofensivas, muchas personas creen que por su denominación (carnívoras), pueden resultar tóxicas o peligrosas tanto para los niños como para los animales pero no es así.
Casi todas crecen en donde el suelo es ácido y pobre en nitrógeno asimilable, en estas condiciones, capturar insectos es una forma de obtener compuestos nitrogenados sin necesidad de sintetizarlos del suelo.
Tiene sus beneficios
Lejos de ser peligroso y nocivo para la familia, poseer una planta carnívora en casa tiene sus beneficios: además de dar vida a nuestros espacios, colabora en el control de plagas (mosquitos machos y moscas, entre otros) ya que se alimentan de ellos. Además, no requieren de cuidados específicos ni fertilizantes sólo necesitan de riego y contar con buena iluminación.
En la capital son muy pocos los productores y vendedores de estas plantas pero a pesar de ello el interés crece cada vez más. Se pueden conseguir, a veces, algunas especies en el Paseo de las Plantas ubicado en avenida 19 de Abril los fines de semana o bien en mayor variedad a través de la red social Facebook.
Guía de cuidados para mantener las insectívoras
El científico Charles Darwin le fascinaban las plantas carnívoras. Con sus estudios descartó su pertenencia a una especie animal.
El coleccionista Garzón Escobar destacó que en la provincia de Jujuy “cada vez son más las personas que se interesan y compran variedades en carnívoras”. Destacó que actualmente “son los jóvenes los que se interesan por este tipo de plantas”.
Señaló además que en los últimos años “son muchos los padres que buscan estas plantas como regalo para sus hijos que a través de los videojuegos como Plantas Vs Zombies y Super Mario Bros llegan a conocerlas por lo que quieren tener una”.
Mantener vivas a estas plantas no es muy difícil requiere de algunos cuidados específicos pero nada complicado.
Como todo ser vivo requiere de agua y buena iluminación, debido a que son de exterior.
Guía de cuidados
Riego: El agua del grifo suele ser demasiado dura (contiene muchos carbonatos y bicarbonatos). Las más adecuadas son: el agua destilada, el agua de lluvia, agua de aire acondicionado y agua de condensación.
Riego con bandeja: casi todas las carnívoras se riegan por el “método de la bandeja”. Consiste en poner la maceta dentro de un recipiente o plato hondo con 2 ó 3 centímetros de agua para que siempre esté húmeda y sirve además para aumentar la humedad del aire.
Luz: las plantas carnívoras necesitan bastante luz. Las trampas ofrecerán colores más vivos con más luz. Convienen al menos 5 horas de rayos de sol directo a las siguientes especies: Dionaea, Sarracenia, Heliamphora, Pinguicula, Cephalotus y Darlingtonia. Eso sí, el sol de la mañana, entre las 8 y las 12, cuando no es tan intenso.
Es preferible la luz solar natural a la artificial, pero ésta última también se utiliza en terrarios.
Temperatura: los requerimientos de temperatura varían de unas especies a otras, dependiendo de si es de origen tropical o no.
Dionea y Sarracenia necesitan pasar unos meses hibernando, con temperatura fría inferiores a + 5ºC. Si no hibernaran, en la primavera brotarían débilmente y podrían morir. La hibernación se puede hacer al aire libre en la provincia de Jujuy.
Macetas: el tipo de maceta más recomendable para estas plantas son las de plástico debido a que no despiden sustancias en el agua como así también las de porcelana o cristal. Las macetas de barro o terracota contienen minerales y otras sustancias que se disuelven con el agua y es mejor evitarlas.
Sustratos: como en su hábitat natural viven en suelos muy pobres en nutrientes, el sustrato de las macetas también debe ser pobre. Por eso deben plantarse en una mezcla de sphagnum (musgo) que es el sustrato, perlitas agrícolas y turba.