El Congreso Extraordinario de la Asociación de Educadores Provinciales (Adep) sesionó ayer bajo la denominación "Marina Vilte, siempre presente" en el Salón del Maestro.
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El Congreso Extraordinario de la Asociación de Educadores Provinciales (Adep) sesionó ayer bajo la denominación "Marina Vilte, siempre presente" en el Salón del Maestro.
Los docentes jujeños realizaron un homenaje a su par detenida desaparecida Marina Vilte, al cumplirse 42 años del golpe de estado.
Luego las autoridades del Congreso, presidido por el secretario general de Adep Darío Abán, comenzaron la sesión tratando el orden del día.
Después de unas horas de debate, los congresales resolvieron rechazar la imposición del 5% de aumento salarial por parte del Gobierno Provincial. También decidieron adherir al paro y movilización con todos los sectores de los trabajadores (que aún no tiene fecha), ratificar la adhesión a las medidas de la Ctera, rechazar el Pacto Social Educativo por la no convocatoria al sindicato a la participación activa al mismo con quite de colaboración en el abordaje del documento.
Asimismo dispusieron avanzar en la concreción de un Congreso Provincial Sindical en defensa de la educación pública y gratuita.
Adep resolvió en Congreso "intimar al Ministerio de Educación a la solución inmediata de las necesidades educativas que se solicitaron desde 2017, y las determinaciones en cuanto a infraestructura, transporte, control liquidación de haberes, situación de establecimientos como la escuela especial N° 3 "Eufrasia Pelletier", "Helen Keller', "La Salle', anexos y demás problemáticas educativas".
Finalmente decidieron "mantener el Congreso de Adep en sesión permanente, en estado de alerta y movilización".
Fueron muchos los congresales que ayer representaron a los docentes de la provincia para determinar los pasos a seguir junto a los gremios del Frente Amplio Gremial.
Marina Vilte
Marina Vilte nació en San Salvador de Jujuy en 1938 y en 1956 se recibió de maestra normal nacional.
Fue una militante sindical con sello propio: la contracara del burócrata sindical, defensora honesta del trabajo y el estudio. Por tres períodos consecutivos fue electa autoridad de Adep. Estuvo presente el 12 de septiembre de 1973 cuando nació la Ctera y fue secretaria adjunta.
El mismo 24 de marzo de 1976, día en que se produjo el golpe de estado, Marina Vilte cayó presa por primera vez.
Fue liberada después de un mes y fiel a sus convicciones retomó su lugar en Adep.
Fue al final de ese mismo año, el 31 de diciembre a las cinco de la mañana, cuando fue arrebatada de su casa y llevada para siempre con rumbo desconocido.