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19 de Abril,  Jujuy, Argentina
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Justicia errática, oficialismo tenso, oposición aturdida

Lunes, 26 de marzo de 2018 00:00
GERARDO MORALES. Jujuy se pone difícil.
CARLOS SADIR. Situación financiera límite.
DARIO ABAN. Los maestros van al paro.
VICTOR ARAMAYO. El FAP en plan de lucha.
RUBEN RIVAROLA. El “modelo Jujuy” en Bs. As.

El Perú, la presidente de la Nación, Pedro Pablo Kuczinsky renuncio a su cargo, apretado por las denuncias de corrupción derivadas del escándalo Odebretch. En Argentina, en cambio, las causas por corrupción parecen haber comenzado a licuarse rápidamente. El lunes pasado, cuando escribía una frase incluyendo el concepto de que el gobierno se había comido una piña feroz, con la excarcelación de Cristóbal López y su lugarteniente Fabián de Souza, tal vez los dos más escandalosos y prolíficos estafadores que sufrió Argentina durante la década pasada –favorecidos por los correspondientes e imprescindibles cómplices dentro del aparato del estado- (a los que además se les cambiaba la carátula de sus expedientes dejándolos casi en situación de perjudicados, para poder iniciar juicios en contra del estado exigiendo ellos una reparación), pensaba si no estaba usando una expresión exagerada. Desde el viernes, estoy seguro de haber acertado: si aquel fue un violento cross de derecha, la liberación de Carlos Zannini y de Luis D´Elía, fue cross de izquierda terrible en pleno mentón del gobierno del PRO. Ese gobierno, por más que insista en que esto ocurre porque la Justicia es independiente, no puede disimular la irritación y tampoco haber quedado al borde del knock out judicial, cosa que puede ocurrir en cualquier momento, si no consigue prorrogar la detención de Lázaro Báez, quien en los próximos días alcanzará los dos años preso con preventiva, sin haber llegado a juicio, símil situación a la de la señora Milagro Amalia Ángela Sala de Noro en Jujuy. Mientras tanto, tal como dijimos el lunes pasado, la ciudadanía se va acostumbrando rápidamente a las sorpresas judiciales: en el 2016 fueron las denuncias y los encarcelamientos, en el 2017, las dilaciones y los titubeos, y en este todavía joven 2018, las marchas atrás y la promesas de más acciones sorprendentes. NI Mauricio Macri ni sus funcionarios ocultan la contrariedad. Compensando apenas las trompadas, otro juez, Javier Cosentino, intervino las empresas petroleras de Cristóbal y hechó a la calle a los supuestos posibles compradores del imperio, Santiago Dellatorre e Ignacio Rosner, quienes en pleno proceso concursal, habían sido designados administradores del mismo, y a pesar del quebranto de la empresa, se descubrió que en cuestión de meses habían embolsado para sí 44 millones de pesos en concepto de sueldos y representaciones, consumando el desfalco final y el último vaciamiento posible, delante de las barbas del gobierno y de la justicia y lo que es peor, riéndose del mismísimo pueblo argentino, que con cara bobo (habrán pensado ellos), miraba esperanzado los procesos en marcha. Otro juez, en una acción francamente de menor entidad, intervino el viernes el banco Finansur, todavía propiedad de López y vibrante administrador financiero de sus innumerables propiedades y negocios. La libertad del ex Secretario Legal y Técnico de la presidencia K Carlos Zannini y del piquetero Luis DÉlía, vinculados a la investigación de la causa AMIA, se concretó tras la relevante opinión de la fiscal Gabriela Baigún y el consentimiento del TOF 8. Y así como Cristóbal López prepara juicios en contra del estado, Zannini aprovechó para decir que su libertad prácticamente daría por tierra con todo el andamiaje legal de acusaciones en contra de la expresidente Cristina Elisabet Fernández de Kirchner. D´Elía, más rudimentario, así como al momento de su detención se victimizó poniéndose a la altura de Nelson Mandela, el sábado no trepidó en compararse a los mártires de la dictadura que precisamente un 24 de marzo iniciaba el gobierno de facto en la Argentina. Tan revuelto está todo, que por reacción de sectores políticos y de la misma Justicia Federal, las quejas llegaron hasta la SCJ, que debió ceder a los pedidos de investigación de jueces y cámaras de tomaron las últimas disposiciones, acusados de haber cobrado coimas por sus decisiones. Lo más patético, fue el juez Eduardo Farah, de cuyas vinculaciones y militancias no vale la pena explayarse por ser conocidas y obvias. El magistrado, naturalmente negó haber recibido “atenciones” por las “molestias” y se permitió recomendarle al Presidente de la Nación que había reaccionado con indignación, que debería informarse mejor: “Tiene derecho a opinar, debería medirse un poco”. Debería agradecer la Presidencia, que su señoría le concedió el derecho de opinar. Y mientras continúen las inexplicables dilaciones judiciales por las sempiternas chicanas de las defensas o los “descuidos” de sus magistrados, (tanto en Comodoro Py como en “la Copa” jujeña),  comienzan a enfrentarse los que vuelven a sentirse soberbios dueños de la impunidad, con muchos ciudadanos que –exasperados- confunden justicia con venganza. Una cosa tan mala como la otra. Pero es así nomás: a veces da la sensación de que tenía razón la genial María Elena Walsh cuando compuso “El Reino del Revés”: “Me dijeron que en el Reino del Revés/ nadie baila con los pies,/ que un ladrón es vigilante y otro es juez,/ y que dos y dos…son tres!”.

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El Perú, la presidente de la Nación, Pedro Pablo Kuczinsky renuncio a su cargo, apretado por las denuncias de corrupción derivadas del escándalo Odebretch. En Argentina, en cambio, las causas por corrupción parecen haber comenzado a licuarse rápidamente. El lunes pasado, cuando escribía una frase incluyendo el concepto de que el gobierno se había comido una piña feroz, con la excarcelación de Cristóbal López y su lugarteniente Fabián de Souza, tal vez los dos más escandalosos y prolíficos estafadores que sufrió Argentina durante la década pasada –favorecidos por los correspondientes e imprescindibles cómplices dentro del aparato del estado- (a los que además se les cambiaba la carátula de sus expedientes dejándolos casi en situación de perjudicados, para poder iniciar juicios en contra del estado exigiendo ellos una reparación), pensaba si no estaba usando una expresión exagerada. Desde el viernes, estoy seguro de haber acertado: si aquel fue un violento cross de derecha, la liberación de Carlos Zannini y de Luis D´Elía, fue cross de izquierda terrible en pleno mentón del gobierno del PRO. Ese gobierno, por más que insista en que esto ocurre porque la Justicia es independiente, no puede disimular la irritación y tampoco haber quedado al borde del knock out judicial, cosa que puede ocurrir en cualquier momento, si no consigue prorrogar la detención de Lázaro Báez, quien en los próximos días alcanzará los dos años preso con preventiva, sin haber llegado a juicio, símil situación a la de la señora Milagro Amalia Ángela Sala de Noro en Jujuy. Mientras tanto, tal como dijimos el lunes pasado, la ciudadanía se va acostumbrando rápidamente a las sorpresas judiciales: en el 2016 fueron las denuncias y los encarcelamientos, en el 2017, las dilaciones y los titubeos, y en este todavía joven 2018, las marchas atrás y la promesas de más acciones sorprendentes. NI Mauricio Macri ni sus funcionarios ocultan la contrariedad. Compensando apenas las trompadas, otro juez, Javier Cosentino, intervino las empresas petroleras de Cristóbal y hechó a la calle a los supuestos posibles compradores del imperio, Santiago Dellatorre e Ignacio Rosner, quienes en pleno proceso concursal, habían sido designados administradores del mismo, y a pesar del quebranto de la empresa, se descubrió que en cuestión de meses habían embolsado para sí 44 millones de pesos en concepto de sueldos y representaciones, consumando el desfalco final y el último vaciamiento posible, delante de las barbas del gobierno y de la justicia y lo que es peor, riéndose del mismísimo pueblo argentino, que con cara bobo (habrán pensado ellos), miraba esperanzado los procesos en marcha. Otro juez, en una acción francamente de menor entidad, intervino el viernes el banco Finansur, todavía propiedad de López y vibrante administrador financiero de sus innumerables propiedades y negocios. La libertad del ex Secretario Legal y Técnico de la presidencia K Carlos Zannini y del piquetero Luis DÉlía, vinculados a la investigación de la causa AMIA, se concretó tras la relevante opinión de la fiscal Gabriela Baigún y el consentimiento del TOF 8. Y así como Cristóbal López prepara juicios en contra del estado, Zannini aprovechó para decir que su libertad prácticamente daría por tierra con todo el andamiaje legal de acusaciones en contra de la expresidente Cristina Elisabet Fernández de Kirchner. D´Elía, más rudimentario, así como al momento de su detención se victimizó poniéndose a la altura de Nelson Mandela, el sábado no trepidó en compararse a los mártires de la dictadura que precisamente un 24 de marzo iniciaba el gobierno de facto en la Argentina. Tan revuelto está todo, que por reacción de sectores políticos y de la misma Justicia Federal, las quejas llegaron hasta la SCJ, que debió ceder a los pedidos de investigación de jueces y cámaras de tomaron las últimas disposiciones, acusados de haber cobrado coimas por sus decisiones. Lo más patético, fue el juez Eduardo Farah, de cuyas vinculaciones y militancias no vale la pena explayarse por ser conocidas y obvias. El magistrado, naturalmente negó haber recibido “atenciones” por las “molestias” y se permitió recomendarle al Presidente de la Nación que había reaccionado con indignación, que debería informarse mejor: “Tiene derecho a opinar, debería medirse un poco”. Debería agradecer la Presidencia, que su señoría le concedió el derecho de opinar. Y mientras continúen las inexplicables dilaciones judiciales por las sempiternas chicanas de las defensas o los “descuidos” de sus magistrados, (tanto en Comodoro Py como en “la Copa” jujeña),  comienzan a enfrentarse los que vuelven a sentirse soberbios dueños de la impunidad, con muchos ciudadanos que –exasperados- confunden justicia con venganza. Una cosa tan mala como la otra. Pero es así nomás: a veces da la sensación de que tenía razón la genial María Elena Walsh cuando compuso “El Reino del Revés”: “Me dijeron que en el Reino del Revés/ nadie baila con los pies,/ que un ladrón es vigilante y otro es juez,/ y que dos y dos…son tres!”.

Jujuy se recalienta

         Mirando a estos panoramas que se ciernen sobre la actualidad y el futuro, uno piensa que el Gobernador Gerardo Rubén Morales, por más que tenga ofertas tentadoras para cambiar la vida de Jujuy por la nacional, tal vez vuelva a pensar que a pesar de los problemas de variada índole que enfrenta en su pequeña provincia, quizás siempre sea preferible quedarse aquí, antes que envejecer rápidamente en medio de la selva feroz de las marquesinas nacionales. Aquí el GM tendrá que remar en estos días con la disconformidad de los gremios estatales, a los que les asignó, sin preguntarles nada y sin escucharlos demasiado, un 5% de aumento, sin cláusula gatillo, y la promesa de volver a charlar dentro de algunos meses. Los caciques sindicales, un tanto anestesiados, patalearon algo, pero el aumento ya está liquidado, listo para cobrar con el próximo sueldo, y además, incluye la concesión de ser “en blanco”. El CEDEMS insistirá con un 40% de aumento –valor a todas luces imposible- pero para arrimarse, lanzó un plan de lucha que incluye paros en abril, en fecha a determinar y judicializará la cuestión mediante un amparo. También ira al paro ADEP, explicó su titular, Darío Abán. Ambos gremios docentes se sumarán a las decisiones que tome en los próximos días el Frente Amplio Gremial, que según adelantó el referente de APUAP, Víctor Aramayo, prepara un fuerte plan de lucha.

Los “gerardistas”

          Una perlita se conoció en los últimos días. El GM rubricará pasado mañana otro convenio, esta vez con Adrián Oliva, gobernador de Tarija, sobre la reciprocidad en la atención sanitaria de argentinos y bolivianos. La intención es excelente, y no choca, sino se complementa con el proyecto del cobro de un seguro a ciudadanos extranjeros ya propuesto y cuestionado desde diferentes sectores, en algunos casos malinformados en otros con clara mala intención. El caso es que cuando el gobernador boliviano firmó idéntico acuerdo con Juan Manuel Urtubey, muchos funcionarios y legisladores, más gerardistas que Gerardoávidos de anotarse un poroto con el jefe, declararon que el GM “la marcaba la cancha a toda la región” y detrás de elogiar melosa e innecesariamente su gran visión de estadista, descalificaron, y casi hasta cayeron en el insulto al gobernador de Salta asegurando que “no entiende nada y perdió la iniciativa”. De todos modos, más allá de la anécdota fallida será un acto de hermandad aunque el departamento Tarija no limite directamente con Jujuy, sino con Salta. Quizás la Secretaría de Relaciones Internacionales que supervisa estas cuestiones, debería promover un acuerdo similar con Potosí, que sí comparte un total límite internacional con Jujuy, directamente entre el Departamento Yavi y la Provincia Modesto Omiste, donde La Quiaca enfrenta a Villazón.

Los grandes temas

           El GM mientras tanto, sigue en pos de los grandes objetivos que trazó. Ya logró zafar del temporal que se le presentó por la necesidad de postergar la producción de energía del Parque Solar Cauchari, nave insignia de su gestión. Naturalmente, las demoras en una obra de gran porte, eran esperables y de acuerdo a lo que embarullada y morosamente trataron de explicar los funcionarios encargados, la demora de un año, no acarrearía costos adicionales al capital de la gigantesca deuda comprometida en el proyecto, ni habría recarga de los altos intereses pactados. Una vez en marcha la generación de energía, Jujuy, proveedora del fluido, se convertirá en acreedora de buenos dividendos y lo que es igualmente importante, habrá iniciado el recambio cultural de los modos de vida de las alejadas regiones de la Puna. De todos modos, la complejidad de las maniobras técnicas y financieras, siguen teniendo altas zonas grises, que deberían ser explicadas en detalle a la población. Para evitar malas interpretaciones, y para que las dudas que otros no despejan, no caigan como siempre sobre la espalda del primer mandatario. Algo similar se espera para estas horas, con la venta del Ingenio La Esperanza. Queda claro que ya se hizo –bien o mal, o más o menos- todo lo que se podía hacer. Acá también es el GM quien se hizo cargo de todas las decisiones, de pagar los costos de los intentos frustrados, de sostener a funcionarios que no supieron, o no quisieron asumir sus impericias. Hoy la última palabra a cargo de Juan Pablo Calderón,  juez de la causa, mantiene en vilo a la gran región. Las ofertas conocidas distaron de ser el jardín de rosas que algunos prometían: ni fueron grandes empresas internacionales, ni hubo UTEs asociadas dispuestas a venir, ni fueron seis o cinco. Fueron dos, una de las cuales es la colombiana Omega Energy que se mantuvo en su oferta inicial de 86 millones de dólares, que ahora pagaría en cuotas a lo largo de diez años. En diciembre se había anunciado que la misma empresa estaba dispuesta a pagar 85 u$s millones casi de contado, operación que detrás del fuego artificial del anuncio se diluyó tan rápido como se había montado. De acuerdo a versiones, Omega, habría incluido en sus condiciones que la totalidad de los trabajadores de las que se debería hacer cargo, unos 600, deberá volver a revistar en categoría 1, durante tres meses, período en que serían calificados y recategorizados, según experiencia y capacidad. La especie cayó como balde de hielo sobre la cabeza de los trabajadores. La otra empresa, cuya propuesta no parece muy  cercana a ganar la puja es Productora del Noroeste SA, ofreciendo u$s50 millones, sin incluir trabajadores y con menor interés por la cantidad de tierras aledañas al complejo, hoy improductivas.  De todos modos, son todas aproximaciones, ya que solamente los oferentes, los síndicos de la quiebra y el juez conocen fehacientemente el detalle. Transcurridos tres días hábiles para las consultas de rigor, Juan Calderón que ya desestimó objeciones al proceso, y pasado mañana diría si el camino es la venta, o elige otro, del que por ahora nadie quiere hablar.

La oposición se divide

      Pero las piñas al gobierno nacional, el bajón en las encuestas, y la indomable inflación que persisten rodeando la Casa Rosada, y los abismos estructurales, las contrariedades nuevas y los  baches dentro del equipo del gobierno provincial, no parecen ser un motivo de preocupación si se los mide como palos en la rueda del 2019, mientras el peronismo, es decir, la única posibilidad de oposición existente, sigue torpemente atrapado en su tragicomedia de enredos de tiro corto. Tras el fracaso de la “reunión de la militancia” de San Luis, copada por el kirchnerismo con figuras rutilantes como Amado Boudou y el “cuervo Larroque, se concretó la reunión del Consejo Nacional del PJ en Buenos Aires. José Luis Gioja estuvo en ambos, pero de ninguno pudo sacar un documento liminar para guiar a una oposición que critica a Macri, que le teme a Macri, pero que lo alimenta con su persistente desencuentro. Allí estuvo en la histórica sede de Mattheu 130, en su debut como presidente del PJ Jujuy, recientemente normalizado, el titular del distrito Rubén Armando Rivarola. Lo acompañaron Guillermo Snopek, Walter Barrionuevo, y otros notables de la nueva conducción.  Finalmente, pudo exponer el trabajoso “modelo Jujuy”. RR demostró que dialogando, cediendo, tragándose sapos y hasta comiendo vidrio, el PJ local zafó de la intervención, del pasado de derrotas y de casi la disolución; y ahora busca recuperar su espacio y su prestigio. Arrancó aplausos de la concurrencia, y hasta elogios cálidos de los presentes. Pero los intereses personales o sectoriales que Rivarola pidió dejar de lado, siguen siendo más fuertes. El cristinismo boicoteó el Consejo y CEFK volvió a decir en los popularísimos diálogos “reservados” con su exfuncionario Oscar Parrilli, que el Partido, le interesa un tereso. Ella, mientras desprecia a unos y otros, aparentemente disfruta con dejarlos hacer, y apunta a  concurrir a unas PASO en el 2019 donde confía ganar, aunque esa victoria adentro de la oposición, la condenaría a la derrota afuera, 60/40, como ella misma vaticina. En ese entendimiento, ya olvidó la amistad con los hermanos Rodríguez Sáa, sigue utilizando al batallador Agustín Rossi, sigue despreciando a Florencio Randazzo, odiando a Sergio Massa y ningueando a Miguel Pichetto. Así, será difícil todo.  Falta ver cuál será el resultado de la reunión del grupo de gobernadores del PJ en Entre Ríos, donde en días más medirá fuerzas, Juan Manuel Urtubey, confeso aspirante a la presidencia. El vecino ya recibió el incondicional apoyo y cariño de Rossana Bertone, su par de Tierra del Fuego, y sabe que deberá pisar fuerte entre Juan Schiaretti, José Manuel de la Sota, Sergio Uñac, Juan Manzur, Gustavo Bordet. Se reunirán sin saber todavía si concurrirá el gobernador formoseño Gildo Insfrán y el jefe territorial de Rio Negro, Pichetto. Si este “Peronismo Federal” logra armarse, y sumar sus bloques de senadores y diputados nacionales, quizás, comience a aparecer una figura diferente.

      A todo esto, se sabe que existe a nivel nacional un proyecto (que ya habría ensayado armar una cabecera de playa en Jujuy), para crear otro movimiento nacional y popular, que intentaría pasar definitivamente a los libros de historia a los grandes protagonistas de la vida nacional, Unión Cívica Radical y Partido Justicialista. Un gran movimiento federal multipartidario de origen, con una ideología moderna, que diste de ser rígida, y abunde en cursos de acción pragmáticos y elásticos. Algunos se entusiasmaron con la idea. Otros, jamás renunciarán, mientras vivan, a la porción de poder que controlan, o que, desde su posición actual, aspiran a controlar un día. Seguiremos de cerca los movimientos del embrión.

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