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Hemos visto en las últimas noticias de la semana pasada un nuevo atropello causado por una camioneta en la ciudad de Münster, en la región alemana de Westfalia.
Luego de unos meses de paz sin manifestaciones de terrorismo en Europa este atentado tomo de sorpresa a la población alemana, que se recuperaba del atentado en los mercados navideños de Berlín.
Münster es una ciudad ubicada estratégicamente en Westfalia entre las regiones católicas y protestantes de Alemania. Precisamente luego de la ReformaProtestante se sucedieron Guerras, provocadas por la religión en cuyo escenario tomaron parte las potenciad europeas. Y es precisamente el mismo escenario europeo donde actualmente se desatan atentados y explosiones ocasionados por extremistas religiosos. Matanzas en nombre de un Dios, al igual que hace 400 años, que enseña el amor y el respeto por el prójimo.
Pero volviendo a Münster, es una ciudad muy bonita, en cuyo ayuntamiento fue testigo de la firma de la pax de Wstfalia.
Recordemos un poco los sucesos y el contexto de esta paz.
El tratado de la paz de Westfalia. se firmó en las ciudades alemanas de Osnabruck y Münster en 1648. Este tratado puso fin a la guerra de los treinta años en Alemania y a la guerra de los ochenta años entre España y los Países Bajos, que estaban bajo el dominio español y que con el tratado se reconoce su independencia.
España, durante el reinado de Felipe IIl fue una potencia en Europa, el florecimiento de sus colonias y la continua expansión de la cultura hispana era un modelo a seguir, pero con el reinado de Felipe IV se ven los signos de decadencia, de la que nunca volvería a reponerse.
Este fue el contexto histórico del tratado de Münster, pequeña y acogedora ciudad.Pasear por sus callecitas y observar sus edificios en estilo renacentista hanseático, de ladrillo visto no nos permiten adivinar que esta ciudad fue destruida durante la Segunda Guerra Mundial y reconstruida magnificente, siguiendo fielmente los planos originales de los edificios. La iglesia principal tiene una torre gótica de la que cuelgan tres jaulas, testimonio de la época de las guerras.
Esperemos que vuelvan épocas de paz, en Westfalia y en el mundo entero. Aunque el ser humano por naturaleza es inquieto y no guarda reposo, ha sabido traducir el contexto guerrero histórico en las artes. La música, que nos ocupa en nuestra columna está representada por las batallas, una forma musical que imita la guerra, trayendo sonidos de fanfarrias, imitado cañones, gritos y redobles de tambor. Recordemos solo a modo de ejemplo el “Combattimento de Tancredi y Clorinda” de Claudio Monteverdi, compuesta en 1624.