Contrariando todas las reglas y disposiciones legales y policiales, una persona a la que se la había secuestrado una importante cantidad de mercadería de origen extranjero, ingresada ilegalmente al país, logró ingresar al depósito donde estaban los bultos, autorizado por un oficial superior de la Unidad Regional 2 de San Pedro de Jujuy.
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Contrariando todas las reglas y disposiciones legales y policiales, una persona a la que se la había secuestrado una importante cantidad de mercadería de origen extranjero, ingresada ilegalmente al país, logró ingresar al depósito donde estaban los bultos, autorizado por un oficial superior de la Unidad Regional 2 de San Pedro de Jujuy.
El extraño episodio puso en alerta a las autoridades policiales que ordenaron se realice un sumario administrativo.
La información brindada da cuenta que un ciudadano de nacionalidad boliviana identificado como Ruben Acuña Ortega Hebert, con domicilio en el barrio Providencia de la provincia de Salta había sido demorado en un control vehicular realizado por efectivos de la Policía sobre ruta provincial N§ 1 a la altura del paraje "Puente Blanco" y se le había secuestrado una importante cantidad de mercadería ilegal, que transportaba en un automóvil VW Suran.
El hombre se retiro del lugar sin firmar el acta correspondiente indicaron a El Tribuno de Jujuy, fuentes judiciales cercanas a la causa , el hombre regresó al día siguiente y después de haber mantenido una entrevista con un oficial superior de la UR 2 se dirigió a la celda donde se encontraba la mercadería y fue en ese lugar donde habría mantenido una fuerte discusión con el personal subalterno.
Hasta ese momento la mercadería secuestrada por contrabando estaba bajo jurisdicción de la justicia federal, razón por la cual ya no dependía de los efectivos provinciales, en el mejor de las casos debió ser la justicia quien debió librar una orden judicial.
Extraña orden
Fuentes oficiales cercanas a la investigación dan cuenta que la maniobra delictiva se detectó como consecuencia de la acción del personal subalterno, que al descubrir una maniobra ilícita procedió a brindar información directamente al fiscal Federal que ordeno se de participación a la justicia ordinaria.
Si bien es cierto que se informó oficialmente del secuestro de 250 mil pesos y que el imputado trató de sobornar al guardia, se omitió informar que la orden superior estaba mal dada, ya que la mercadería secuestrada, que además no estaba contabilizada, ya estaba a disposición de la justicia federal y no podía ser violentadas las fajas de secuestros colocadas oportunamente.
En el operativo se secuestraron 400 billetes de $ 500, 432 billetes de $ 100 y 34 billetes de $ 200.
Deberá hoy el fiscal Ernesto Resúa investigar de donde provino la orden que permitió el ingreso del hombre.