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La oposición paralizó las calles nicaragüenses

La alianza opositora al gobierno volvió a exigir la salida de Ortega del poder. El presidente movilizó una caravana.

Viernes, 13 de julio de 2018 20:13

El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, movilizó ayer a sus seguidores en caravana de Managua a la rebelde ciudad de Masaya (sur), para contrarrestar un paro laboral de la oposición que, con negocios cerrados y calles medio vacías, exige su salida del poder.

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El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, movilizó ayer a sus seguidores en caravana de Managua a la rebelde ciudad de Masaya (sur), para contrarrestar un paro laboral de la oposición que, con negocios cerrados y calles medio vacías, exige su salida del poder.

Mercados, bancos, tiendas, gasolineras, restaurantes y pequeñas ventas de comida no abrieron en ciudades y pueblos, en apoyo al llamado opositor pero también por temor a saqueos o asaltos.

"Estoy trabajando por necesidad. Pero el paro es un arma para presionar al gobierno, porque a esta situación no se le ve fin. Los pobres somos los que estamos muriendo", dijo Adolfo Díaz, limpiabotas de 67 años, en el solitario mercado Huembes, en el este capitalino, donde hay 4.500 negocios.

En Managua, seguidores del presidente Ortega partieron a bordo de cientos de vehículos y motocicletas, ondeando banderas rojinegras del gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (Fsln, izquierda), enrumbándose hacia Masaya, 30 km al sur.

Ambas acciones se realizaron entre temores en medio de una desbordada violencia que deja unos 270 muertos y unos 2.000 heridos en tres meses de protestas contra el gobierno.

Los opositores reclaman justicia, y elecciones adelantadas o la renuncia de Ortega, a quien acusan de desatar una feroz represión contra las protestas y crear una dictadura con su esposa Rosario Murillo, marcada por la corrupción y el nepotismo.

Para el gobierno los manifestantes son "delincuentes" y parte de la "derecha golpista", apoyada por sectores de Estados Unidos.

La OEA inició ayer en Washington una sesión extraordinaria por la grave situación de Nicaragua, luego de que el miércoles la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh) le presentó un informe que reportó un "profundización" de la violencia y la represión en el país en conflicto.

La protesta continúa hoy en todo el país 
El paro de 24 horas convocado por la opositora Alianza Nacional por la Justicia y la Democracia, que aglutina a grupos de la sociedad civil, comenzó a las 00 locales, respaldado por la cúpula empresarial.
Según seguidores de la oposición, el paro se cumplió en 90%, aunque medios oficialistas reportaron normalidad en algunas zonas de comercio. En Mercado Oriental, el más grande -de unos 20 mil negocios-, está a oscuras y prácticamente cerrado.
El paro, el segundo tras el del 14 de junio -que dejó cuatro fallecidos-, se realiza un día después de una gran marcha en Managua y manifestaciones en otras ciudades, con saldo de cuatro policías y un civil muertos en un municipio del sureste.
En la tercera jornada de presión de la Alianza, los opositores irán hoy en caravana de vehículos por los conflictivos barrios orientales de Managua.
Como salida a la crisis, la Iglesia católica, mediadora en un diálogo entre el gobierno y la Alianza, propuso adelantar los comicios que del 2021 al 2019. 
Pero fue descartado por el presidente Ortega, exguerrillero sandinista de 72 años que gobierna desde 2007 por tercer período consecutivo.

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