Un hombre que dormía en inmediaciones del natatorio Municipal "Guillermo Poma" fue dado por muerto por unas mujeres que suelen caminar cada mañana por el Parque San Martín, quienes solícitas y consternadas se comunicaron con el teléfono de emergencias 911 solicitando la presencia de personal policial y del Same.
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Un hombre que dormía en inmediaciones del natatorio Municipal "Guillermo Poma" fue dado por muerto por unas mujeres que suelen caminar cada mañana por el Parque San Martín, quienes solícitas y consternadas se comunicaron con el teléfono de emergencias 911 solicitando la presencia de personal policial y del Same.
Desde Base Operacional se dio participación a la Seccional 1º que de inmediato envió una comisión hasta el lugar a la vez que se daba participación a la base del Same, desde donde se dispuso el envío de una ambulancia con personal médico.
Ya en el lugar se había concentrado una importante cantidad de curiosos que realizaban una serie de conjeturas respecto de que le podría haber sucedido a "la víctima".
En primer lugar todos culparon por la falta de iluminación en ese paseo público desde hace un par de semanas. Otros le echaron la culpa a la policía por la inseguridad que reina en el lugar por la falta no solo de iluminación sino por la ausencia total de la policía en la zona.
Otros un tanto más fantasiosos afirmaron haber escuchado una feroz pelea entre "mendigos y borrachos" que ocupan ese predio en horas de la noche y que se constituye en un verdadero peligro para los "niños y mujeres" que regresan de sus obligaciones laborales o de sus actividades escolares.
A medida que pasaban los minutos, no faltó quien propusiera retirar la manta que lo cubría a los efectos de poder saber si estaba herido, tenía un golpe en la cabeza o si la muerte había sido por causas naturales.
Al arribar la policía, los efectivos retiraron la manta y al colocar en posición cubito dorsal al hombre y con la asistencia de los médicos del Same en primer lugar se determino que "aún respiraba" y fue cuando comenzaron las maniobras de RCP reanimación cardiorespiratoria, que motivó que el hombre comenzara a moverse ante el beneplácito de los presentes, que habían temido lo peor.
Fue en esos momentos cuando el "resucitado" a viva voz reclamó que se le permitieran seguir durmiendo, ante el estupor de todos que decidieron continuar con su rutina diaria.