Dos personas murieron y trece más resultaron heridas en el barrio griego de Toronto el domingo por la noche en un tiroteo en el que el atacante murió, presuntamente, durante un intercambio de disparos con la policía.
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Dos personas murieron y trece más resultaron heridas en el barrio griego de Toronto el domingo por la noche en un tiroteo en el que el atacante murió, presuntamente, durante un intercambio de disparos con la policía.
Un hombre de 29 años abrió fuego el domingo en la noche y sembró el caos en el animado barrio griego de Toronto, donde los testigos afirmaron que escucharon unos veinte disparos y el sonido de un arma que fue recargada varias veces.
Una joven de 18 años y una niña de 10 perdieron la vida, al igual que el atacante, al tiempo que 13 personas resultaron heridas, anunció el lunes el jefe de la policía de Toronto, Mark Saunders, revisando al alza el número de víctimas. Algunos heridos se encuentran aún en "estado grave", señaló en conferencia de prensa. Tras llegar rápidamente al lugar, la policía abrió fuego contra el atacante, que fue descubierto poco después en un callejón, muerto, revelaron los investigadores.
Saunders subrayó que era aún demasiado temprano para conocer los motivos que llevaron a actuar a este hombre de 29 años, originario de Toronto, que utilizó una pistola. "No se sabe por qué" disparó a la multitud, repitió el lunes.
"A las 22 (hora local) del 22 de julio de 2018, un hombre que caminaba solo por la avenida Danforth efectuó varios disparos a grupos de gente. Varias personas fueron alcanzadas. Dos civiles fueron heridos fatalmente", había informado anteriormente la Unidad de Investigaciones Especiales de Ontario.
Los vecinos del barrio contaron que escucharon una serie de disparos seguidos de gritos de personas que salían corriendo y que le disparó a un joven que huía.
Funcionarios evidencian un problema con las armas
“Mis pensamientos acompañan a las personas tocadas por la tragedia”, escribió el primer ministro Justin Trudeau.
Los ciudadanos de Toronto “son fuertes, resilientes y valientes, y les apoyamos en este periodo difícil”, añadió después desde la Columbia Británica, en el oeste del país, donde pasa las vacaciones con su familia.
El alcalde de Toronto, John Tory, calificó este hecho como una “tragedia” y advirtió que el tiroteo de este domingo es una “evidencia de un problema con las armas” en esta ciudad.
El alcalde criticó también que los habitantes de la ciudad pueden conseguir armas con “demasiada facilidad”, a pesar de que Canadá tiene una legislación mucho más dura que la estadounidense para la tenencia y porte de armas.
Toronto es la mayor ciudad de Canadá, y sus habitantes están preocupados por la alta cifra de tiroteos que ha sufrido este año, alrededor de 20 de ellos con víctimas fatales, gran parte debido a problemas de pandillas.
En abril, un hombre atropelló con su camioneta a peatones, dejando un saldo de 10 muertos y 15 heridos, en uno de los ataques más mortíferos en este país.
Canadá históricamente ha tenido bajos niveles de violencia armada, sobre todo si se compara con los altos índices en Estados Unidos, su vecino del sur. La semana pasada la policía de Toronto comenzó a implementar un plan para reducir los hechos de violencia que se registran con armas. Esta medida incluye un refuerzo de 200 agentes en el turno de entre las 19 y las 03 en algunos de los vecindarios donde se registran el mayor número de tiroteos. En Atenas, el Ministerio de Relaciones Exteriores se declaró “profundamente afectado por el tiroteo abyecto que golpeó al barrio griego”.