Diana Armata tiene 14 años y posee una extraña enfermedad. Está esperando que sus estudios sean analizados en España y unas de las complicaciones que posee es en la vista. Por ello, su familia pide colaboración de anteojos ya que son de escasos recursos y ella los necesita para poder estudiar, ya que es lo único que la distrae. Hace poco tiempo intentó quitarse la vida.
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Diana Armata tiene 14 años y posee una extraña enfermedad. Está esperando que sus estudios sean analizados en España y unas de las complicaciones que posee es en la vista. Por ello, su familia pide colaboración de anteojos ya que son de escasos recursos y ella los necesita para poder estudiar, ya que es lo único que la distrae. Hace poco tiempo intentó quitarse la vida.
“Pedimos ayuda de la sociedad, estamos pasando una situación económica muy dura al margen de la situación de Diana. En relación a eso, ella se intentó suicidar, está muy triste y no puede ver”, mencionó, Olga Armata, su madre.
En dialogo con El Tribuno de Jujuy, entre lágrimas y con tristeza, nos contó la historia de su hija.
Desde los 5 años empezó a manifestar malestares y la internaban una y otra vez. Desmayos y cefaleas eran algunos de ellos, pasaron los años y ella seguía así. A pesar de que le hicieron múltiples estudios médicos, no lograron darle un diagnóstico certero hasta que la situación empeoró. En el año 2010 le agarró una parálisis cerebral que le afecto el lado izquierdo del cuerpo que al día de hoy la dejó con secuelas.
El 1 de mayo del año pasado, otra vez ingresó al Hospital de Niños “Héctor Quintana” con dolores, tenía el rostro y las piernas hinchadas, le dijeron que era un problema renal. Le dieron una dieta y le recomendaron que use barbijos y guantas para salir de su hogar.
Ese día también le hicieron una biopsia, cuyo resultado decía que la pequeña tiene una enfermedad llamada “glomerulonefritis”. Una patología poco común, de la cual no se sabe el origen, de inmediato empezaron a medicarla y le aconsejaron hacer actividad física.
Al poco tiempo la nena se volvió a descompensar, “no podía respirar y tampoco ver, encima no teníamos un peso. Tuvimos que esperar a que pase el primer colectivo para viajar al hospital”, comentó su madre. Quedó internada desde ese día.
A fines del año pasado le dijeron que sus estudios debían ser analizados en España, y eso salía 3000 euros. “Primero pedí ayuda por todos lados, pero desde el hospital me dijeron que el hospital puede hacer esas gestiones y su ADN pueda ingresar al lugar donde tienen que hacerle ese estudio”. Con ese resultado se puede saber la patología con más exactitud de la enfermedad ya que todavía no hay un diagnóstico preciso.
“Hasta el momento no hay novedades, y para que se agilice eso, la doctora me dijo que puedo ir juntando la plata esa y no esperar más”, agregó.
Entre las dificultadas que ella presenta posee problemas en la vista y al ser una familia de escasos recursos necesita lentes que ellos no pueden costear. Para todos los que quieran colaborar con la niña, el número de teléfono es: 155801221 (número de la madre). También se puede ayudar con artículos para el hogar y mercadería en general.
La enfermedad
La glomerulonefritis es la inflamación de los pequeños filtros de los riñones (glomérulos). Los glomérulos eliminan el exceso de líquido, los electrolitos y los desechos del torrente sanguíneo, y los hacen pasar a la orina. La glomerulonefritis puede aparecer de manera repentina (aguda) o gradual (crónica).
Puede ocurrir por sí sola o como parte de otra enfermedad, como lupus o diabetes. La inflamación grave o prolongada asociada con la glomerulonefritis puede dañar los riñones. El tratamiento depende del tipo de glomerulonefritis que tengas.
Los signos y síntomas de la glomerulonefritis dependen de si padeces la forma aguda o crónica y de la causa. Los primeros indicios de que algo no anda bien pueden ser los síntomas o los resultados de un análisis de orina de rutina.
Los signos y síntomas de la glomerulonefritis comprenden:
Orina de color rosa o amarronado, debido a que hay glóbulos rojos en la orina (hematuria)
Orina espumosa debido al exceso de proteína (proteinuria)
Presión arterial alta (hipertensión)
Retención de líquidos (edema) con hinchazón notoria en el rostro, las manos, los pies y el abdomen
Muchos trastornos pueden provocar glomerulonefritis. A veces, la enfermedad es hereditaria y, otras veces, se desconoce la causa. Los trastornos que pueden originar la inflamación de los glomérulos renales comprenden: