El Senado tratará hoy la autorización pedida por el juez Claudio Bonadio para allanar tres domicilios de la expresidente Cristina Kirchner, quien manifestó que no tiene "ningún inconveniente" en que se permita esa medida pero puso una serie condiciones sobre las cuales no hay acuerdo entre Cambiemos y el peronismo.
inicia sesión o regístrate.
El Senado tratará hoy la autorización pedida por el juez Claudio Bonadio para allanar tres domicilios de la expresidente Cristina Kirchner, quien manifestó que no tiene "ningún inconveniente" en que se permita esa medida pero puso una serie condiciones sobre las cuales no hay acuerdo entre Cambiemos y el peronismo.
La Cámara alta sesionará a partir de las 14 y, a diferencia de lo ocurrido la semana pasada, esta vez habrá quórum para tratar el pedido de allanamiento, pero el resultado de la votación quedó abierto debido a las condiciones que puso la exmandataria.
Mediante una carta dada a conocer poco antes de la reunión de Labor Parlamentaria de este martes para organizar la sesión, la senadora del Frente para la Victoria (FpV) manifestó que no tiene "ningún inconveniente en que el cuerpo autorice lo solicitado por Bonadio".
En la misiva, que fue presentada por el jefe del bloque FpV, Marcelo Fuentes, a sus pares durante la reunión, la referente opositora manifestó que "esta decisión no implica convalidar la irracionalidad de las medidas dispuestas por Bonadio en su cruzada persecutoria sino que tiene por principal objetivo terminar, de una vez por todas, con el show montado alrededor de estos allanamientos sin fundamentos".
Cristina Kirchner enumeró en la misiva una serie de condiciones como que "no haya cámaras de televisión ni fotográficas, para evitar así la posterior difusión de imágenes en programas oficialistas con clara intención de humillación y hostigamiento" y que estén presentes sus abogados durante los allanamientos.
También pidió que haya "un senador o senadora" elegidos por ella, que "se resguarden los objetos de uso personal" y por último "que Bonadio no rompa nada" y utilice "los instrumentos técnicos con los que cuentan las fuerzas de seguridad y los organismos de inteligencia, para escanear paredes, divisiones y/o cielo rasos de durlock".
José López aguarda la firma del juez Bonadio
El exsecretario de Obras Públicas José López aguardaba por estas horas que el juez federal Claudio Bonadio homologue su declaración como “arrepentido” en la causa de los cuadernos y hoy podría ampliar su indagatoria.
La defensa oficial del exfuncionario, a cargo de Gustavo Kolman, ya notificó a Bonadio del acuerdo de colaboración que cerró con el fiscal Carlos Stornelli y ahora el magistrado lo tiene bajo evaluación: se prevé que este miércoles lo cite nuevamente para ratificar ese acuerdo y hasta podría ampliar la declaración indagatoria.
López, que ingresó al Programa Nacional de Protección a Testigos e Imputados, no reclamó ser excarcelado pero “está alojado en un lugar especial” que, por motivos de seguridad, no puede ser develado, informó el ministro de Justicia de la Nación, Germán Garavano.
“Está bien, tranquilo, de buen humor y cuidado, alojado en un centro de detención. Sigue como persona detenida, con la vigilancia del lugar, además del grupo especial de Los Lobos, el programa de élite del Servicio Penitenciario Federal para la protección de testigos”, señaló Garavano en declaraciones radiales.
El ministro precisó, además, que el exnúmero dos de Julio De Vido tiene “todo un acompañamiento psicológico” y “poco o nulo contacto con otros presos”.
El viernes último, López se refirió en su declaración de casi seis horas al entramado de pagos ilegales a través de la obra pública y la recaudación de dinero “en negro” para financiar campañas políticas para el kirchnerismo.
Por el momento, el acuerdo de arrepentido sólo tiene validez en la causa por los cuadernos del ex chofer Oscar Centeno aunque su defensora oficial en el juicio, Pamela Biserier, intentará incorporarlo en el debate oral en marcha.
Según indicaron las fuentes consultadas, en los próximos días López ampliará su declaración indagatoria en el juicio, la cual cortó abruptamente hace casi dos semanas negándose a responder las preguntas de su defensa.
El empresario Sergio Taselli quedó detenido
El empresario Sergio Taselli quedó detenido ayer luego de presentarse espontáneamente a declarar ante el juez Claudio Bonadio en la investigación por los cuadernos de las coimas.
En dicha investigación, se encuentra imputado como partícipe necesario de la asociación ilícita que condujo, según el fiscal Carlos Stornelli, Cristina Kirchner. El abogado Mariano Cúneo Libarona, a cargo de la defensa del empresario, explicó que la detención responde a la “imputación general” y a las menciones que “le atribuyen en los cuadernos”. “No es él el que figura en las citas y tampoco el domicilio que le atribuyen”.
Su presentación de manera espontánea ante el juez Bonadio se produjo horas después de que se ordenara la detención de Néstor Otero, concesionario de la terminal de Retiro y acusado de participar de la asociación ilícita en la que ya hay más de 38 imputados y 15 detenidos.
Según fuentes judiciales que confirmaron su imputación en la causa por asociación ilícita, Taselli quedó implicado por acusaciones similares a las de Otero. El apellido del empresario detenido por orden de Bonadio figura en los cuadernos de Centeno pero bajo el nombre de “Gabriel Taselli” y según la causa es referencia a Sergio Taselli en realidad.
“Corcho” Rodríguez
El empresario Jorge “Corcho” Rodríguez negó ayer haber estado involucrado en la trama de presuntas coimas en obras públicas durante el kirchnerismo al declarar durante unas dos horas ante el juez Claudio Bonadio.
“Me presenté con el pasaporte para demostrar que el día en el que Oscar Centeno dijo que me veía o que me fue a ver con Roberto Baratta yo estaba en los Estados Unidos”, señaló Rodríguez en declaraciones a Infobae tras prestar declaración indagatoria.
Además de esa mención en los cuadernos, Centeno había declarado ante el fiscal Carlos Stornelli en su acuerdo como arrepentido que en 2013 visitaban al hombre de negocios en un galpón de la calle Bernardo de Yrigoyen, en Munro. “Le entregué pruebas a Bonadio que demuestran que en ese lugar no hay un galpón ni una cochera, sino un edificio de cuatro pisos que tiene entrada peatonal y en el que efectivamente yo me instalé pero recién a partir de abril de 2014”.
“Nunca más”
El presidente Mauricio Macri resaltó ayer que el país debe decirle “nunca más a la corrupción” y reclamó a la sociedad que no se “base” en esas prácticas.
“Decidimos nunca más seguir permitiendo que una sociedad se base sobre la viveza criolla, el atajo, la mentira, la corrupción. Eso, nunca más en la historia de los argentinos. Nunca más”, sostuvo, utilizando la emblemática frase con la que se alude a los crímenes de lesa humanidad cometidos en la última dictadura.
Durante el acto de inauguración de un complejo turístico Parque Termal de Dolores, el jefe de Estado volvió a hacer referencia de esta manera a la causa de los cuadernos, que involucra a ex funcionarios y empresarios por presuntos sobreprecios en la obra pública y pago de coimas.
“Decidimos, hace tres años y un poquito más, que somos mejores que la vida que estamos llevando, que merecemos una sociedad más justa, más transparente”, agregó.
Se entregó Otero
El empresario Néstor Otero, concesionario de la terminal de ómnibus de Retiro, se entregó ayer ante la Policía Federal luego del pedido de detención del juez federal Claudio Bonadio en la causa por los cuadernos del chofer Oscar Centeno sobre pagos indebidos a funcionarios kirchneristas.
Fuentes judiciales informaron que el empresario se presentó en la sede de la Policía Montada ubicada en la calle Cavia y ya se encuentra a disposición de la Justicia.
Otero ya había sido indagado el 9 de agosto pasado en una primera citación de empresarios y ex funcionarios dispuesta por Bonadio al conocerse la causa por los cuadernos de Centeno, quien trabajaba bajo las órdenes del ex funcionario del Ministerio de Planificación Federal Roberto Baratta.
El pasado viernes, el juez Bonadío rechazó la eximición de prisión presentada por Otero para evitar ser detenido.