Un bebé de un año y 5 meses ingresó a la guardia del hospital de Niños "Héctor Quintana" con el rostro desfigurado, los profesionales denunciaron el hecho y pidieron que fuera apartado de la vivienda donde vive con su madre y recién 30 días después se cumplió con la medida.
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Un bebé de un año y 5 meses ingresó a la guardia del hospital de Niños "Héctor Quintana" con el rostro desfigurado, los profesionales denunciaron el hecho y pidieron que fuera apartado de la vivienda donde vive con su madre y recién 30 días después se cumplió con la medida.
Juan Carlos Orihuela (48), es padre del bebé y expareja de una mujer de 33 años, madre de un niño de 7 años y del pequeño agredido. Dialogó con El Tribuno de Jujuy para relatar los "innecesarios" trámites burocráticos que tuvo que realizar para proteger la vida de su hijo.
"Todo empezó a fines del mes de julio, cuando un amigo me avisó que mi hijo estaba internado en el hospital de Niños, me dijo que se había caído de la cama. Llamé a mi exmujer y me atendió un pariente de ella y me dijo que se habían ido a pasar unos días a la casa de otro familiar. Algo no andaba bien y es por eso que decidí ir a la guardia del hospital y me doy con la novedad que mi hijo estaba internado y grave", dijo Orihuela.
"Cuando llegué a la sala vi a mi bebé con el rostro totalmente desfigurado, tenía un ojo prácticamente tapado y un médico se me acercó y me preguntó qué le había pasado al bebé. En ese momento le conté que no vivía con mi hijo y que recientemente había tomado conocimiento que estaba internado", continuó el hombre.
Según lo manifestado por Orihuela, el médico que se entrevistó con él, le dijo que la madre del bebé llegó al hospital, manifestó que el bebé se había caído de la cama, lo dejó internado y durante 5 días no volvió a preguntar ni siquiera por el estado de salud de su bebé.
"Me dijeron que mi hijo lloraba todo el tiempo, estaba asustado y dolorido por los golpes que recibió. Note que los médicos estaban molestos por la situación y ya habían dado intervención a la Secretaría de Niñez y Adolescencia para que el bebé no regresara a esa casa", dijo. "Los médicos fueron muy claros, mi bebé tenía serios golpes y un ojo muy comprometido, tuvo que ser intervenido y no son compatibles con un golpe, mi bebé de apenas un años y cinco meses fue golpeado con un objeto en el rostro y estamos rogando que no pierda el ojo".
Niñez y Adolescencia
Nuestro diario tomó conocimiento que desde el nosocomio infantil se informó de oficio a la Secretaría de Niñez y Adolescencia, y este organismo dispuso que los dos hijos fueran apartados de la casa materna, hasta que se resolviera la situación.
"Deberían haber estado todo este tiempo en una vivienda del barrio Mariano Moreno, pero al otro día mi exmujer violó todo lo establecido y se los volvió a llevar a su casa del barrio 150 Hectáreas de Alto Comedero", dijo.
Además el hombre manifestó que durante todo este proceso no le permitieron ver a su hijo. "Temí por la vida de mi hijo. Cómo puede ser posible que una mujer que agredió con tanta saña a una criatura y que un organismo diera la orden de apartarla de sus hijos y ella no diera caso y nadie haga nada", se cuestionó.
"Pedí la guarda de mi bebé desde el momento que me enteré que había sido agredido, pero no obtuve respuesta por más de 30 días. Todos los días iba a la Secretaría para que ellos vuelvan a apartar a la mujer de los niños, pero nunca tuve respuesta favorable. Gracias a Dios mi hijo está vivo y el viernes me dieron la guarda de mi hijo. Logré sacarlo de ese verdadero calvario que sufrió en manos de su propia madre", dijo.
“Esta mujer es muy violenta, tiene que estar detenida”
Si bien esta conmocionante historia se encamina a un final feliz para la criatura de apenas 17 meses, la expareja de la madre de la criatura adelantó a nuestro medio que va a denunciar el hecho ante la Fiscalía de Investigación, para que se investigue si a la mujer le cabe por lo menos la figura del delito de “lesiones graves”.
“Me asesoré con un abogado y ahora que mi hijo está sano y salvo, nos vamos a presentar ante el fiscal para que inicien las investigaciones, primero para saber con qué objeto fue agredido mi hijo, porque no nos cabe ninguna duda que su propia madre le pegó”, dijo Orihuela.
“Es una mujer muy violenta, todos en el barrio tristemente la conocen por el maltrato que ejerce sobre sus hijos. La semana pasada los chiquitos estaban jugando en la calle en horas de la madrugada y las luces de la casa estaban apagadas, parece que se había ido y los dejó en la calle a sus hijos. Un vecino los metió en su casa y me llamaron y yo avisé a la Policía. En la seccional de las 150 Hectáreas también la conocen, porque tuvieron que intervenir en varios episodios. Ella es muy violenta y tiene problemas con los vecinos”, dijo el hombre.
“Tengo entendido que a raíz de los informes del hospital de Niños que se entregaron a la Secretaría de Niñez y Adolescencia, el fiscal tiene que solicitarlos para poder avanzar en la investigación de la agresión que sufrió mi hijo y esperamos que sea cuanto antes”, afirmó el denunciante.
“La verdad que no sé qué le pudo haber pasado por la cabeza a esta mujer. Supongo que la Justicia pedirá Cámara Gesell para su hijo mayor, porque los vecinos me contaron que su vida también corre riesgo. Los vecinos escuchan que el niño llora todo el tiempo. Según tomamos conocimiento, su hijo mayor tampoco tiene que vivir más con ella, por los malos tratos que sufre. Es una historia muy triste y agradezco a Dios que se esté solucionando de a poco. Voy a seguir este tema hasta las últimas consecuencias”, dijo Juan Carlos Orihuela.