Independizarse e ir a vivir solo en tiempos de crisis resulta costoso. En Jujuy los contratos de alquiler ya estipulan un incremento del 30% anual y los compromisos son a dos años, y para ingresar a un departamento en general piden el triple del valor del alquiler que está en los 5 mil pesos, al que se debe sumar impuestos y comida, sin contar los muebles básicos.
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Independizarse e ir a vivir solo en tiempos de crisis resulta costoso. En Jujuy los contratos de alquiler ya estipulan un incremento del 30% anual y los compromisos son a dos años, y para ingresar a un departamento en general piden el triple del valor del alquiler que está en los 5 mil pesos, al que se debe sumar impuestos y comida, sin contar los muebles básicos.
Lo primero que hay que tomar en cuenta a la hora de conseguir un espacio para vivir es el presupuesto, la zona y si se trata de un departamento o monoambiente que determina el precio del alquiler. Sin contemplar los muebles básicos que se pueden obtener cedidos de la familia, la decisión por estos tiempos debe ser meditada muy detenidamente ya que en promedio sólo por un alquiler de $5 mil mensuales, se ingresa con $15 mil como mínimo, y si sumaran los muebles básicos otros casi $30 mil, con lo cual se requeriría casi 45 mil pesos para la mudanza.
Según lo consultado por El Tribuno de Jujuy a tres inmobiliarias locales, para ingresar a un departamento en esta capital en distintas zonas es necesario contar con al menos el triple del valor del alquiler, y es que se suman además certificación de firma y sellado de contrato.
Otro elemento para tener en cuenta son los requisitos que suponen acceder a un alquiler, y de hecho podrían ser un obstáculo para algunos, porque es clave e ineludible tener garantía. Es que al menos tres inmobiliarias locales requieren que el inquilino sea una persona en actividad laboral, con lo cual no puede ser jubilado, por lo que en algunos casos se descarta a los padres como garantes. Además este debe tener una propiedad y entregar una cédula parcelaria que se solicita en Inmuebles.
En algunos casos se requiere que el recibo de sueldo de quien pretende alquilar triplique el monto del precio de la locación. Al monto para ingresar al alquiler se suman otros que pueden llegar a triplicar esa cifra en el primer mes, como la garantía o depósito y también la comisión para la inmobiliaria. También debe tenerse en cuenta la certificación de firmas en el contrato.
Por ejemplo un departamento en Los Huaicos cuesta alquilar 7 mil pesos y con los aditamentos de comisión, garantía y otros para ingresar llega a los $23 mil. El monto del alquiler irá aumentando 15% cada 6 meses, en un contrato que por lo general es de dos años.
En el caso de un departamento de un dormitorio en la misma zona el alquiler cuesta $5 mil, más $700 de expensas por mes, pero para ingresar sumando todos los ítems hay que abonar unos $15 mil.
Asimismo, por un departamento en Cuyaya se cobra $6.500 de alquiler, más expensas, y para ingresar se debe abonar unos $22.500.
Claro que hay opciones más económicas, pero requieren también prescindir de comodidades básicas como un baño privado. Es que se promocionan habitaciones con baño compartido por $2.500 mensuale
También hay que contemplar que una vez que se alquila hay que mantener el inmueble y en ello se incluye los impuestos, agua, luz, teléfono, gas, celular, internet. Según, Abigaíl Escobar, una joven que vive en un departamento de Chijra y se independizó recientemente, paga $5 mil de alquiler, $450 de expensas, además de canal e internet 1.330 pesos; luz y agua 500 pesos, y gas $700 bimestrales. Otro joven, Julio Castañares, quien vive en un departamento de dos dormitorios en barrio El Paraíso de Alto Comedero, paga de alquiler 4.700 pesos, luz, agua y gas a 900 pesos, y canal e internet a 1.080 pesos. Ambos jóvenes dijeron que los gastos por alimentos es de unos 2 mil pesos, ahorrando.
Equipar una vivienda es muy oneroso
Aunque no todos necesitan lo mismo para vivir, para ingresar a un nuevo hogar se necesitan muchas cosas que en la vida cotidiana compartida con la familia de origen no se perciben. Es el caso de los muebles y electrodomésticos.
En el caso del colchón, por lo general se hereda y puede suceder que pase lo mismo con la heladera, la cocina, mesa y alguna estufa, y ni hablar del televisor que si ya se cuenta supone un gasto menos. Sin embargo, adquirir lo básico es caro: una heladera Gafa está a $13.999, lavarropas de 5k a $9.599, cocina a $4.499 y plancha desde 689 pesos, que sumarían 29.786 pesos en total.
Se puede obviar la mesa y sillas que pueden ser heredadas, pero si hay que comprarlas se gasta unos $5.500 por la mesa y por cada silla desde $1.059, igual que la cama desde $3 mil, colchón unos 6.000 pesos y sillón de dos cuerpos 8.389 pesos.
Hay sin embargo otros elementos que surgen como necesarios: poner cortinas, por ejemplo, que no suelen ser tan económicas, excepto las de baño; cerraduras que es recomendable cambiar por seguridad y ropa de cama.
Para limpieza
Vivir solo también implica un cambio de vida que supone comodidad, responsabilidad, privacidad, control y otros aspectos. Sin embargo, hacerlo implica dimensionar un montón de gastos que aparecerán a medida que surgen las necesidades más básicas como la limpieza y la alimentación.
Es que en principio hay que considerar gastos de limpieza y despensa. Será necesario comprar un montón de cosas que significarán llenar un carrito de supermercado y gastar no menos de 2.000 pesos. Es que solo entre los artículos de limpieza para baño, cocina, limpieza general, habrá que proveerse de trapos de piso, escoba, secador, balde, esponja para lavar platos, gel de limpieza para baños, lavandina, jabón en polvo para lavar la ropa, trabas para tender la ropa, etc.
Para la alimentación demás está decir que hay que llenar la heladera, cuyo precio fluctúa según la calidad y cantidad, y a ello hay que sumar algunos elementos de cocina necesarios, desde la pava eléctrica o no, cubiertos, vasos, tazas y un par de ollas de una reducida batería.