A partir de 2019 rigen nuevas alícuotas del Impuesto sobre los Ingresos Brutos que benefician a los sectores productivos jujeños. El objetivo es incentivar la producción de bienes y su posterior industrialización para fabricar alimentos y otras manufacturas con destino a los principales mercados, su distribución y ampliación de capacidad.
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A partir de 2019 rigen nuevas alícuotas del Impuesto sobre los Ingresos Brutos que benefician a los sectores productivos jujeños. El objetivo es incentivar la producción de bienes y su posterior industrialización para fabricar alimentos y otras manufacturas con destino a los principales mercados, su distribución y ampliación de capacidad.
La Secretaría de Ingresos Públicos del Ministerio de Hacienda y Finanzas de la Provincia informó que Jujuy continúa reduciendo las alícuotas en ciertas actividades productivas, teniendo alguna de las más bajas del país.
Este beneficio para las pymes se enmarca en el Consenso Fiscal celebrado en 2017 por el gobernador Gerardo Morales con sus pares de otras jurisdicciones y Nación.
Además expresaron que es decisión del Gobierno provincial mantener y, en la medida de lo posible, reducir paulatinamente la presión fiscal en relación a la alícuota actual general del 3%, lo que posibilita mantener ciertas ventajas competitivas en el ámbito productivo local.
A ello se deben agregar los beneficios de la Ley Provincial Nº 5.922 de Promoción a las inversiones y el empleo, que entre otros beneficios ya entregó más de tres millones de pesos en certificados de créditos fiscales y reducciones de impuestos a pymes jujeñas, y con la cual se continuará trabajando en nuevos proyectos y beneficios.
Con la nueva Ley Impositiva Nº 6.114 determinadas actividades productivas están viendo reducidas sus alícuotas en el Impuesto sobre los Ingresos Brutos (alícuota general del 3%) a partir del 1 de enero de 2019. Puntualmente: las actividades agrícolas y sus cultivos, la ganadería, y otras como la silvicultura, pesca, explotación de minas y canteras, redujeron sus alícuotas del 1,2% al 0,75%. Dentro de la industria manufacturera se destaca la reducción para la elaboración de productos alimenticios del 1,6% al 1,5%, lo que beneficiará a los emprendimientos dedicados a la elaboración de pan, azúcar, carne, quesos, fiambres y embutidos; y bebidas.
Las ramas de fabricación de otros bienes manufacturados contarán con reducciones desde alícuotas del 1,8% en 2018 al 1,5% para el 2019. Esa medida beneficiará a las firmas dedicadas a la fabricación de cemento, insumos químicos, hierro y acero, fundiciones y productos metálicos, carpintería metálica y de madera, saladeros, hormigoneras y embotelladoras, entre otras.
La construcción, de gran impacto en la provincia por la ocupación de mano de obra, bajará su alícuota del 3% para tributar al 2,5% en 2019. Entre las actividades beneficiadas se encuentran la construcción de obras de ingeniería civil, edificios, casas, infraestructura e instalaciones. En poco más de un año la alícuota pasó de 3,5% al 2,5%, tuvo una reducción de poco más del 28%.
Esta disminución se acentuará para algunos rubros en forma gradual hasta el año 2022, debido a la decisión adoptada.