El guardavallas Marcos Díaz, que se desvinculó de Huracán en diciembre pasado, se transformó en jugador de Boca Juniors, luego de la reunión que celebró el presidente de la entidad de la Ribera, Daniel Angelici, con el representante del jugador.
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El guardavallas Marcos Díaz, que se desvinculó de Huracán en diciembre pasado, se transformó en jugador de Boca Juniors, luego de la reunión que celebró el presidente de la entidad de la Ribera, Daniel Angelici, con el representante del jugador.
El arquero santafesino, de 32 años, vuelve a juntarse con el DT Gustavo Alfaro, después de que Juan Cruz Oller, apoderado del futbolista, se entrevistara con el presidente "xeneize".
El arquero, que vistió también las camisetas de Colón de Santa Fe y Gimnasia de Jujuy, concretó su arribo a Boca en virtud de una eventual inminente salida de su colega Agustín Rossi, hoy afectado al plantel boquense.
La llegada de Díaz, que quedó libre de la entidad de Parque de los Patricios, estaría atada a la partida de Rossi, a quien Boca le extendería el vínculo por tres años más y lo cedería a préstamo a Independiente, si es que Martín Campaña es transferido.
El propio Alfaro, en conferencia de prensa brindada en horas del mediodía, había adelantado que la llegada del arquero que dirigió en el 'Globo' dependía de una hipotética partida de Rossi y de que Díaz “no se vaya a Europa”.