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Un Novak Djokovic brillante se coronó

El talentoso serbio se quedó con su séptimo torneo en Melbourne. Ayer derrotó en la final a Rafael Nadal por 6-3, 6-2 y 6-3.

Lunes, 28 de enero de 2019 01:02

El serbio Novak Djokovic desplegó ayer un tenis admirable para vencer sin objeciones al español Rafael Nadal por 6-3, 6-2 y 6-3 en la final del Abierto de Australia y conseguir su tercer título de Grand Slam consecutivo, que se encadena con Wimbledon y el US Open 2018.

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El serbio Novak Djokovic desplegó ayer un tenis admirable para vencer sin objeciones al español Rafael Nadal por 6-3, 6-2 y 6-3 en la final del Abierto de Australia y conseguir su tercer título de Grand Slam consecutivo, que se encadena con Wimbledon y el US Open 2018.

El número uno del mundo fue campeón por séptima vez en Melbourne Park sin ceder ni una vez el servicio en el partido decisivo, que enfrentó a los dos máximos favoritos por espacio de dos horas, cuatro minutos en el "Rod Laver Arena".

Djokovic, de 31 años, se convirtió así en el tenista más ganador en la historia del este prestigioso torneo australiano y en el octavo jugador que suma siete títulos en una de las cuatro citas de Grand Slam.

En ese último rubro permanece todavía por detrás del propio Nadal, campeón de Roland Garros en once oportunidades y también del suizo Roger Federer, poseedor de ocho trofeos de Wimbledon.

Campeón de Australia en las temporadas 2008, 2011, 2012, 2013, 2015, 2016 y 2019, el serbio se despegó del australiano Roy Emerson y Federer, quienes coronaron seis veces en Melbourne.

Ese logro se materializó en la reedición de la final 2012 disputada entre ambos, que poco tuvo que ver con la de ayer porque demandó cinco sets para conocer al ganador de la competencia.

A diferencia de lo ocurrido hace siete años, Djokovic fue absoluto dominador del partido en base a un servicio lapidario y le infligió al español su peor derrota en las 25 finales de Grand Slam que lleva disputadas.

Asimismo, el actual número uno del mundo amplió el historial a su favor a 28 victorias y 25 caídas ante Nadal, que perdió los últimos ocho encuentros jugados con el serbio en canchas duras.

"Nole" se adjudicó un cheque de 4.100.000 dólares australianos (2,952 millones de dólares estadounidenses) tras un recorrido triunfal ante el estadounidense Mitchell Krueger (primera ronda); el francés Jo-Wilfried Tsonga (segunda); el canadiense Denis Shapovalov (tercera); el ruso Daniil Medvedev (octavos de final); el japonés Kei Nishikori (cuartos); el francés Lucas Pouille (semifinales) y el español Nadal.

Apenas el canadiense y el ruso pudieron robarle un set al tenista de Belgrado, que firmó su decimoquinto título de Grand Slam.

Elogios para "Nole"

El español Rafael Nadal aceptó la total superioridad del serbio Novak Djokovic en la final del Abierto de Australia y reconoció que “no hay táctica posible” que pueda desplegarse ante un rival que mostró un tenis de “excelencia” para vencerlo al cabo de dos horas, cuatro minutos en el “Rod Laver Arena” de Melbourne.
El número dos del mundo rechazó también que el “aspecto mental” haya influido para la concreción de su derrota, que sí atribuyó a su incapacidad para tener respuestas físicas frente a un Djokovic intratable.
“No he tenido la capacidad para buscar una solución extra a lo que me exigía el partido, que era la excelencia total de su juego. Hoy he jugado contra un rival que ha sido mejor. Y además no he jugado al mismo nivel que en los anteriores partidos”, resumió el español.
Nadal lamentó no haber podido darle “un extra de velocidad a las bolas para hacerle ver que sus buenos golpes tenían una respuesta”, lo que se explica por el hecho de haber llegado a Melbourne sin disputar partidos oficiales desde septiembre del año pasado como consecuencia de una lesión en la rodilla y el tobillo.
“No hay táctica posible cuando uno juega como Djokovic en la final. He probado restar más delante, más detrás, ser más agresivo e intentar jugar pelotas más altas, pero, al fin y al cabo, cuando uno lo hace todo bien no hay táctica que sirva”, admitió el español.