Al enterarse a través de los medios de comunicación y las redes sociales, los vecinos de Purmamarca tomaron de forma grata el Decreto Acuerdo del Poder Ejecutivo de la provincia N° 8.606 sobre el Cerro de los Siete Colores y recalcaron que fue el resultado de un pueblo unido en la incesante lucha por la defensa de este emblemático paisaje.
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Al enterarse a través de los medios de comunicación y las redes sociales, los vecinos de Purmamarca tomaron de forma grata el Decreto Acuerdo del Poder Ejecutivo de la provincia N° 8.606 sobre el Cerro de los Siete Colores y recalcaron que fue el resultado de un pueblo unido en la incesante lucha por la defensa de este emblemático paisaje.
El despertarse una mañana y encontrarse con rejas, alambres, palos y un cartel de propiedad privada, fue el comienzo de una lucha que los lugareños iniciaron al sentir que el patrimonio, los recuerdos de la niñez y la cultura eran avasallados con esta acción que los propios turistas al pie de un cerco al Patrimonio de la Humanidad no podían entender.
Desde allí se movilizaron, en primer lugar los vecinos de las 10 viviendas, y posteriormente recibieron el apoyo de la asamblea de autoconvocados que luchaba por las lagunas, del pueblo purmamarqueño y de todo un país que los alentaba para seguir defendiendo este paisaje único en el mundo.
Tras mantener una reunión con Edgardo “Memo” Vilte y conocer las ideas de un proyecto cultural que incluía la modificación de este sitio natural manifestaron su desacuerdo y tomaron otro tipo de medidas que fueron sometidas a votación popular como el inicio de acciones legales, abrazos simbólicos, festivales y debates donde plantearon en ese momento la expropiación del Cerro de los Siete Colores y el Paseo de los Colorados como parte del Patrimonio de la Humanidad.
Además del fallo que la Justicia emitió el pasado 10 de enero donde se prohibía realizar algún tipo de acción en el lugar, los purmamarqueños se vieron sorprendidos con el Decreto anunciado en los medios por el gobernador Gerardo Morales y lo tomaron de manera muy grata al pasar a constituirse en un bien público y no privado para que pueda ser resguardado, preservado y no explotado de alguna manera.
En este sentido, Vanesa Condorí, vecina del pueblo, sostuvo que “este es un logro del pueblo, de los vecinos que se unieron para luchar y defender el Patrimonio. Si bien hay una decisión política si no hubiéramos visibilizado el tema esto no iba a ser posible. Los purmamarqueños nos dedicamos a visibilizar el tema, el pueblo luchó, tuvo un gran compromiso, hicimos campañas, juntamos firmas y luego recibimos la fuerza de muchas personas, turistas de muchos lugares nos daban propuestas e ideas”.
"No conocemos bien el decreto pero vamos a evaluarlo para conocer bien cómo es, cuáles van a ser la medidas de protección más allá de la expropiación, porque el objetivo sigue siendo proteger el Cerro de Siete Colores, el Paseo de los Colorados y que se preserve sin hacer modificaciones al paisaje natural”.
Además agregó que “esto nos ayuda pero también estamos en una instancia judicial que vamos a esperar a ver cómo sigue por la demanda que realizamos como vecinos. Esto no es una lucha de unos sino de todos, para nuestros hijos para que aprendan a valorar y cuidar nuestros paisajes que forman parte de nuestra vida y de nuestra cultura”.
Los terrenos más codiciados
Desde la declaración de la Quebrada de Humahuaca como Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO en el año 2003 y del auge del turismo en Purmamarca por las bellezas e imponentes paisajes con los que cuenta el pueblo de los siete colores, el valor de las tierras aumentaron notablemente, hasta tal punto que un purmamarqueño no puede soñar con acceder a algún terreno.
El costo aproximado del metro cuadrado ronda en los 3500 pesos. Una propiedad de aproximadamente 1000 metros cuadrados se ofrece en Purmamarca a 3 millones de pesos, valor mínimo que además varía según la ubicación.