En las últimas horas de ayer trascendieron algunas versiones que comprometerían seriamente al carcelero imputado por la fuga de los detenidos de la seccional 47º "Paso de Jama" de Palpalá el miércoles.
inicia sesión o regístrate.
En las últimas horas de ayer trascendieron algunas versiones que comprometerían seriamente al carcelero imputado por la fuga de los detenidos de la seccional 47º "Paso de Jama" de Palpalá el miércoles.
Malestar en la fuerza por la decisión del juez Jorge Zurueta que no le otorgó la detención al carcelero, que podría fugarse.
Fuentes cercanas a la investigación aportaron detalles relacionados con la fuga de Aguilera, Segovia y Medina, quienes abandonaron la sede policial sin ningún tipo de impedimentos por parte de los efectivos que se encontraban de guardia.
En la noche del martes la guardia y al menos los cinco detenidos en la misma celda de los evadidos habrían compartido un asado, situación que se reiteraba con cierta frecuencia, dada la familiaridad que existía entre los detenidos y los cuidadores.
Uno de los hechos sorprendentes fue la ausencia de familiares de los tres evadidos en la sede policial, que estaría demostrando la tranquilidad que tenían al saber que esa madrugada pondrían en práctica un aceitado plan.
El Tribuno de Jujuy fue el único medio que dio a conocer en su edición del jueves que los investigadores del hecho desde un primer momento habrían detectado graves como groseras irregularidades en la fuga.
Incluso el propio jefe de Policía, Guillermo Corro, afirmó a todos los medios de prensa que no había boquetes, rejas limadas ni cerraduras forzadas.
Puertas sin llaves ni candado
Dos de los detenidos que se encontraban alojados junto a los fugitivos y que decidieron permanecer en el lugar les informaron a sus allegados que esa noche las "puertas fueron dejadas abiertas" y quienes se fugaron tenían planeada la hora y contaban además con apoyo logístico del exterior.
La denuncia a la Base de Operaciones Policiales alertando sobre la huida de detenidos habría sido brindada por vecinos del barrio, quienes además habrían dado detalles del auto al que ascendieron los detenidos para darse a la fuga por la ruta nacional 66 con rumbo desconocido.
Lo grave del hecho es que cuando la guardia fue consultada sobre la situación reinante en la sede policial, se les informó que "todo estaba tranquilo y que no se registraban novedades".
Aún así y pese al informe el jefe de servicio nocturno arribó al lugar donde le informaron que todo estaba bien, situación que motivó que se realice un recorrido por las dependencias donde se pudo dar, recién en ese momento, con la novedad de la evasión de los tres presos judicializados.
Un sargento de la fuerza de seguridad provincial fue acusado de ser el presunto autor de los delitos de "cohecho pasivo y favorecimiento de la evasión en concurso ideal".
El fiscal de Investigación emitió distintas solicitudes al Juzgado de Control a cargo del juez Jorge Zurueta, quien hizo lugar a las relacionadas con allanamientos rechazando el pedido de detención del uniformado.