Luego de que El Tribuno publicara que el Ministerio Público de la Acusación en conjunto con los efectivos de la Brigada de Investigaciones identificaron a una segunda persona involucrada en el crimen de una mujer de 87 años ocurrido el año pasado en el barrio Los Perales, se supo que el segundo imputado se encuentra detenido por un hecho de abuso sexual ocurrido posteriormente al asesinato.
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Luego de que El Tribuno publicara que el Ministerio Público de la Acusación en conjunto con los efectivos de la Brigada de Investigaciones identificaron a una segunda persona involucrada en el crimen de una mujer de 87 años ocurrido el año pasado en el barrio Los Perales, se supo que el segundo imputado se encuentra detenido por un hecho de abuso sexual ocurrido posteriormente al asesinato.
Según las fuentes consultadas, la segunda persona involucrada en el crimen de Amalia Rivero, protagonizó otro hecho días después del crimen, muy cerca de ese inmueble y según el hilo que siguen los investigadores, ingresó a una vivienda, abusó de una mujer y luego se robó el vehículo que abandonó cerca del barrio Belgrano de nuestra ciudad.
El trabajo de investigación fue llevado adelante por la Unidad Fiscal Especializada en Delitos Graves contra las Personas, Femicidios, y paralelamente por el Fiscal Especializada en Violencia Familiar, de Género y Delitos contra la Integridad Sexual, encabezadas por Diego Cussel y Alejandro Bossatti, quienes lograron entrecruzar los datos que tenían y dar con el malviviente.
Se supo que se llegó a esta segunda persona de apellido Morales por el cruce de llamadas que los investigadores analizaron con el teléfono celular del primer hombre detenido, de apellido Carrizo que realizaba distintos tipos de trabajos de mantenimiento dentro del predio habitacional donde vivía la mujer, oriunda de la provincia de Buenos Aires.
Todo apunta a que Carrizo se ganó la confianza de los residentes del lugar y como a veces realizaba trabajos de seguridad, se encargó de desconectar el sistema de vigilancia por monitoreo del predio y así facilitar el crimen y robo a la anciana.