Talleres se quedó con el primer "chico" sin sobrarle nada. Ayer le ganó a San Antonio de Salta 1 a 0 en partido de ida jugado en el estadio "23 de Agosto" con el arbitraje de Aldo Córdoba.
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Talleres se quedó con el primer "chico" sin sobrarle nada. Ayer le ganó a San Antonio de Salta 1 a 0 en partido de ida jugado en el estadio "23 de Agosto" con el arbitraje de Aldo Córdoba.
Los primeros minutos fueron de estudio, aunque la primera chance la tuvo la visita en la cabeza de Hoyos.
Pero la repuesta del "expreso" llegó en un contragolpe que comandó Vilca, acompañó Rivero y terminó con la definición de Maxi López.
Después el propio López tuvo el segundo grito pero Mulieri se quedó con el mano a mano del atacante periqueño.
Talleres buscaba aprovechar los espacios que dejaba la Villa en el objetivo de alcanzar la igualdad.
San Antonio poco a poco se adelantó, utilizó bien las bandas, intentó ganarles las espaldas a Arroyo por la derecha y Lavayén por la izquierda. Justamente en un centro cruzado, Hoyos cabeceó solo a las manos del golero Llanos. Tras cartón, Rivero por el costado izquierdo encaró y su remate se fue "besando" el poste derecho del "1" local.
Con el 1 a 0 a favor de Talleres se fueron al descanso.
En el complemento, San Antonio adelantó las líneas, creció por momentos el juego de Navarro, pero no encontraba el socio ideal para poder tener profundidad y dejar a los delanteros cara a cara con el arquero del "expreso".
El ingreso de Gastón Rojas le dio movilidad, pero siempre jugó un tiempo más adelantado que el resto. El calor comenzó a pasar factura y el cansancio se notó en algunos jugadores. Pero la visita con tranquilidad y a paso firme lo acorraló a Talleres que perdía rápido la pelota, no encontró espacios para contragolpear.
Con el ingreso de Pascuttini primero y luego con Casasola, buscó poner un equipo rápido de mitad de cancha hacia adelante, pero la bocha nunca llegó limpia y lucharon más de lo que pudieron jugar.
Para colmo, Vilca por doble amarilla se fue expulsado cuando el cronómetro marcaba 38 minutos. Eso obligó al "expreso" a rearmar las líneas, Saavedra entró para hacerse cargo de la pelota y "frizar" el balón, algo que no sucedió.
Amén de ello, San Antonio no tuvo un mano a mano claro como para alcanzar la igualdad, sin embargo, dejó la sensación que por dominio la revancha será complicada.