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Sostienen que el imputado no actuó solo

Federico Llermanos, defensor de la familia de la víctima, considera que la investigación debe seguir, más allá del juicio.

Viernes, 08 de noviembre de 2019 01:00

La familia y la querella de Jairo Salcedo, el joven asesinado el 20 de abril de 2017, sostienen que el imputado del crimen, Carlos Esteban Rubelt, no pudo haber actuado solo.

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La familia y la querella de Jairo Salcedo, el joven asesinado el 20 de abril de 2017, sostienen que el imputado del crimen, Carlos Esteban Rubelt, no pudo haber actuado solo.

Fuentes judiciales sostienen que la estrategia de la defensa es lograr que se cumplan los tres años de prisión del imputado y quede libre.

Las consideraciones fueron vertidas por Daniel Salcedo, padre de la víctima, en compañía de Federico Llermanos, representante legal de la familia.

El abogado sostuvo por su parte que dada las características físicas de Jairo fue imposible que el imputado pudiera hacer todo solo, ya que además de amarrarlo, manejó el auto, lo baleó y después de quitarle la ropa lo arrojó en un camino ubicado al ingreso de la ciudad de El Carmen.

Ese fue uno de los puntos que la querella abordó en la conferencia de prensa llevada a cabo ayer, donde el padre de Jairo se expresó de las últimas novedades con respecto a la causa.

Consultado Llermanos sobre el cambio de carátula en la causa, el letrado afirmó que lo sorprendió, ya que el caso se debió haber elevado a juicio como venía calificado, por considerar que se está frente a un "homicidio agravado por el ensañamiento", debido al concurso de dos o más personas y por ser una de las involucradas integrante de la fuerza de seguridad, ya que el único imputado de la causa hasta ahora es un policía.

Llermanos afirmó que habiéndose valido de su cargo, de su profesión, le permitió conquistar la confianza de la víctima.

Recordó que desde un primer momento la esposa de Salcedo brindó como información que su marido se había ido a reunir con un policía para venderle el auto.

"No dudo de otros implicados"

Son muchas las preguntas que están sin respuesta, entre ellas: ¿quién manejaba el auto?, ¿quién redujo a la víctima?, ¿quiénes estuvieron en el lugar? En relación a la muerte Salcedo y Llermanos afirmaron que Jairo recibió varios golpes primero, y después fue ejecutado, por eso remarcaron que se habla de "homicidio agravado por ensañamiento".

En relación a las pericias de los teléfonos afirmó que realizaron con sumo cuidado el entrecruzamiento de llamadas, Rubelt tenía más de tres celulares y se hicieron entrecruzamiento de datos y cientos de llamadas a teléfonos celulares que no pudieron ser identificados, ya que en esa época se conseguía un chip prepago en cualquier lado.

Llermanos afirmó que se está terminando la primera etapa, pero la investigación deberá continuar y que ellos lo solicitarán, porque se debe llegar al fondo de la cuestión de este difícil caso que estuvo parado por más de ocho meses.

 

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