La localidad de Tres Cruces, en el portal norte de la Quebrada de Humahuaca, no es sólo un paisaje bonito. Los cerros en que se recuesta, con su carga de belleza y su piedra habitada en el transcurso miles de años, es el marco de una rica cultura que se expresa, entre otros matices, con la copla y la hechura de la chicha.
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La localidad de Tres Cruces, en el portal norte de la Quebrada de Humahuaca, no es sólo un paisaje bonito. Los cerros en que se recuesta, con su carga de belleza y su piedra habitada en el transcurso miles de años, es el marco de una rica cultura que se expresa, entre otros matices, con la copla y la hechura de la chicha.
Este sábado, en torno a un escenario alzado a las espaldas de su terminal de ómnibus, se llevará a cabo la 3º edición del Festival de la Chicha y la Tonada, del que nos habla Claudia Guanuco, encargada del área de Cultura, para decirnos que "nació a raíz de que veíamos que nuestras costumbres, tanto la parte de la copla como de hacer chicha, se estaban perdiendo. Entonces dijimos de hacer una actividad con la participación de nuestros artistas, que son los copleros, ya sea locales o de donde fuese que vengan, y para ir recuperando el conocimiento y la práctica de hacer la chicha de maíz".
EN COMPETENCIA / COPLERAS Y CHICHERAS PARTICIPARÁN DE CERTAMEN.
Son saberes que, nos dice, "se van perdiendo porque mucha gente se va con el conocimiento. El sábado empezamos por recibir a los copleros que llegan de diferentes lugares y, si traen chicha, mejor. Es competitivo. En años anteriores trajeron chicha de Iturbe y de Iruya, pero la mayoría son de Tres Cruces, y en cada lugar tienen sus gustos diferentes, su forma de hacer. La ganadora del año pasado, por ejemplo, la hace con una harina especial que traen de Bolivia".
Para decidir quiénes son los premiados, nos cuenta que "se ve como hacen la presentación, la indumentaria. Deben traer cinco litros y se hace la degustación, teniendo en cuenta el sabor, el color y le preguntan a la chichera cómo se hace. Todo eso lo tiene en cuenta el jurado, y en la copla también se tiene en cuenta la indumentaria, la concertación, la claridad de la voz, no superarse las cinco coplas los individuales, y lo que es cuadrilla no pasar de los ocho minutos".
Nos explica que "nosotros tratamos que se respete la época. Estamos en verano y se ve todo lo verde, está ya para carnaval y es la tonada bien alegre. Pasa el carnaval y ya es otra tonada, y esas dos tonadas es lo que más se diferencia. En agosto hay otra tonada, que es un poquito alegre, pero cuando pasado el carnaval es triste. El festival lo pensamos en esta fecha para hacerlo antes del carnaval".
Y cuenta, "ya el año pasado se vio la participación del pueblo, se animaron a subir al escenario porque mucha gente sabe cantar pero les cuesta hacerlo delante de un micrófono. Vamos a empezar a las 10, pidiendo permiso a la Pachamama, y vamos a contar con grupos folclóricos. Pensamos terminar cerca de las 20", concluyó