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La presidente de la Cámara Federal de Apelaciones de Salta, Mariana Inés Catalano, detalló algunas de las grandes carencias que tiene la Justicia Federal de Salta y Jujuy, las cuales hacen resentir el servicio que brinda la misma, mencionando entre ellas la falta de cobertura en los distintos juzgados, la construcción de una nueva cárcel y la instalación de un horno pirolítico para la incineración de la droga que se secuestra.
Hansen fue nombrado para el Juzgado de Libertador en 2016, pero éste nunca se habilitó. Luego pasó al Juzgado 2 de capital.
Lo hizo durante la asunción de Esteban Eduardo Hansen como juez federal 1 de Jujuy, con competencia electoral, quien también se hará cargo del Juzgado 2 de la provincia, sugiriendo también la magistrada la necesidad de que los poderes judiciales locales se encarguen de las causas de "narcomenudeo" o tráfico de droga en pequeña escala, que también ayudará a descomprimir la situación del fuero federal.
Catalano afirmó que la Justicia Federal del interior del país tiene una competencia múltiple. "No solo se encarga de la faraónica tarea de luchar contra el narcotráfico, que dada la extensión con la frontera con Bolivia es muy compleja, también ve delitos como contrabando, lavado de activos, trata de personas, criminalidad económica y cuestiones no penales que son cuantiosas. Entre ellas los temas previsionales, amparos de salud, cuestiones fiscales, de daños y perjuicios, contenciosas administrativas, hasta en los recursos directos de las universidades nacionales", enumeró.
La jueza señaló que por este cúmulo de tareas hay una gran necesidad de recursos en la Justicia Federal, sobre todo en el nombramiento de jueces, como por ejemplo en los juzgados de Libertador y en el 2 de Jujuy.
Consideró que este panorama "se va a agravar" cuando entre en vigencia el nuevo Código Procesal Federal, que es una reforma al Código Procesal Penal de la Nación, que implementa la oralidad, que instaura el sistema acusatorio, en el que todo se va a ventilar en audiencias públicas. "Entonces ese juez, que tiene que hacerse cargo de todas las cuestiones que mencioné, va a estar afectado en su agenda con las audiencias, que son multipropósito" y pueden extender por horas su labor.
Por eso pidió a las autoridades provinciales de Jujuy y Salta que insistan en la cobertura de las vacantes en la Justicia Federal, con un presupuesto acorde, mencionando que hay un proyecto del senador Rodolfo Urtubey que prevé para ambas provincias diez cargos de jueces.
Otra necesidad que expuso Catalano es la construcción de otra cárcel federal en algunas de las provincias norteñas. "En Jujuy hay dos unidades carcelarias federales que no tienen la estructura de tales. Lo único que tenemos es la cárcel de Güemes, con una capacidad o cupo para albergar a cuatrocientos internos pero que en estos momentos tiene seiscientos. La crisis carcelaria también se judicializa a través de hábeas corpus colectivos, y por más esfuerzos e imaginación que se ponga en la Cámara Federal, las soluciones se escapan", apuntó.
Señaló que se debe insistir con el proyecto de la cárcel en Yuto, para la cual ya se puso la piedra basal con la presencia del ministro de Justicia de la Nación, Germán Garavano, la cual tendría una capacidad para cuatrocientos internos. "Es muy necesaria de cara a todo lo que se viene. Si el acusatorio va a la oralidad y a procesos penales más rápidos, por ende va a haber mayor cantidad de condenados que van a tener que estar alojados en establecimientos carcelarios", agregó.
También mencionó la presidente de la Cámara Federal de Apelaciones de Salta que otra necesidad en la jurisdicción es la instalación de un horno pirolítico, para incinerar la droga que se secuestra en los operativos en ambas provincias. "Son enormes las cantidades de estupefacientes que se secuestran, y es absolutamente imprescindible proceder a la incineración de lo incautado. Hay que quemar la droga no solamente por una cuestión de seguridad, sino también por una cuestión ambiental. ¿Y cómo se hace hasta ahora?. Con la colaboración de empresas privadas, que lo hacen gratuitamente, pero dentro de los cupos y los turnos que ellas tienen. De modo que este es un tema que preocupa y en el Consejo de la Magistratura ya hay un expediente bastante avanzado para la compra de un horno pirolítico para Orán, por lo que es muy pertinente que se gestione la compra de uno para Jujuy", dijo.
Finalmente, consideró que las provincias deben encargarse del tema del microtráfico de drogas, porque eso permitiría a que la Justicia Federal se dedique a la investigación del narcotráfico a gran escala, a la criminalidad organizada, "que es el último eslabón, pero combatiendo a los grandes traficantes vamos a disminuir este flagelo. No desconocemos que esto tiene un costo económico para las provincias. Salta ya trabaja desde el 2014 y los números son bastantes buenos, pero eso implica un costo para la Provincia, la justicia y el sistema carcelario. Si hay transferencia de partidas los estados locales se pueden ir haciendo cargo del tema", concluyó la jueza Catalano.
El Juzgado Federal 1 estuvo a cargo de Mariano Cardozo hasta julio del año pasado, cuando presentó la dimisión a su cargo.
Incertidumbre sobre la cárcel de Yuto
El gobernador Gerardo Morales reconoció que por temas de costos, la cárcel federal no podría construirse en Yuto sino en Tartagal u Orán, según se lo dijo el ministro Garavano. Sin embargo dijo que se va a sostener el pedido de su construcción en Jujuy, que no tiene un establecimiento de este tipo, y valoró que la Cámara Federal de Apelaciones de Salta también lo tenga en su agenda de prioridades.
También destacó que la Provincia ya está adherida a las disposiciones sobre “narcomenudeo”. “Estamos viendo el tema del presupuesto y los jueces que se van a hacer cargo, ya estamos coordinando, necesitamos dar unos pasos más, pero este año vamos a tratar de completar toda la infraestructura institucional para esto, porque es un tema fundamental”, dijo, acotando que la Provincia colaborará con todo lo que pueda para ayudar a la Justicia Federal.