Tras conocerse la fuga de cinco presos de la seccional 33 de Alto Comedero, quedó en evidencia el pésimo estado edilicio y de seguridad en el que se encuentra la unidad policial.
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Tras conocerse la fuga de cinco presos de la seccional 33 de Alto Comedero, quedó en evidencia el pésimo estado edilicio y de seguridad en el que se encuentra la unidad policial.
En un recorrido realizado por El Tribuno, se pudo apreciar, solo en el frente de la comisaria, vidrios rotos, paredes afectadas por la humedad y ventanas forzadas, lo que representa una invitación constante a que los reclusos puedan fugarse.
Cabe aclarar que esta situación debe ser resuelta de manera urgente por las autoridades del Ministerio de Seguridad de la provincia, ante los inumerables reclamos de los vecinos que viven en ese zona.