El primer aumento del año, en el precio del pan y sus derivados alcanzó el 20% y a tan sólo dos días de la fecha indicada para su aplicación el panorama se presenta de manera dispar debido a que no todos los comercios del rubro en la zona céntrica y los barrios lo instrumentaron.
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El primer aumento del año, en el precio del pan y sus derivados alcanzó el 20% y a tan sólo dos días de la fecha indicada para su aplicación el panorama se presenta de manera dispar debido a que no todos los comercios del rubro en la zona céntrica y los barrios lo instrumentaron.
A nivel nacional. La Federación Argentina de la Industria del Pan y Afines (Faipa) anunció un aumento de hasta el 12% en el kilo del pan.
Es que, según manifestaron los propietarios, son varios los motivos que llevan a no trasladar ese incremento, entre ellos el temor a que sigan mermando las ventas, mayor competencia entre panaderías y a su vez, reflexionan que el precio al que vendían el pan estaba caro o por lo menos no era acorde a la última suba en septiembre del 2018.
Para otros, aumentar el valor del pan y sus derivados era necesario debido a que las ventas no vinieron siendo del todo favorable, la presión impositiva, el aumento de los insumos y la existencia de panaderías "ilegales" que no sienten el aumento de impuestos, también los afecta. Asimismo, las panaderías consultadas expresaron que atraviesan épocas difíciles y aplican estrategias de ventas para sobrellevar la crisis.
"La situación no sólo en las panaderías es crítica, esperamos que ahora que iniciaron las clase y la temporada de otoño invierno las ventas sean mejores, yo sigo vendiendo con el precio del año pasado", dijo Ester Perales, vendedora de una panadería de la avenida Almirante Brown.
Las subas en el precio del pan también están asociadas a que actualmente los empresarios del sector manifestaron el descenso de venta que afecta enormemente. En este sentido, tras la reunión realizada con el Sindicato de Panaderos se determinó la lista del pan sugerido que lleva el kilo de mignón a $ 84, la docena de facturas a $ 165, el kilo de bizcochos a $ 120, el pan negro a $ 90, el pan galleta a $ 84 el kilo, el pan francés a $ 30 cada uno, los bollos a $ 30 cada uno, las masas secas finas a $ 360 el kilo, el pan de viena a $ 32, el pan de hamburguesa a $ 45, el pan rallado a $ 84 el kilo y la prepizza a $ 32 cada una.
LUCIANA BIANCO, PROPIETARIA
Luciana Bianco, propietaria de una panadería de la calle Almirante Brown, mencionó que hasta el momento no han aumentado el precio del pan y sus derivados teniendo en cuenta que “la gente hoy está un poco susceptible con el tema de las subas, sabemos que algunas panaderías ya han subido el precio. Hasta el momento seguiremos manejándonos con la lista de precios sugeridos cuando se anunció la suba en septiembre del 2018, con algunas diferencias de sus valores”, dijo.
Es así que actualmente, la panificadora ofrece el kilo de mignón a $ 65, el pan negro $ 65, los bizcochos comunes a $ 80, especialidades (masas finas) a $ 150, facturas a $ 120 la docena, prepizza a $ 25, pan de viena $ 25 la bolsita de 6 unidades. Como estrategias de venta, mencionó que brindan también atención los domingos y aparte de vender el pan fresco, ofrecen productos del día anterior a un menor valor.
RAQUEL ROJAS, EMPLEADA
En la avenida Eva Perón, una panadería aplicó la suba del 20% en el pan y sus derivados que implicó un incremento de entre $ 5 y $ 10 en los mismos. “Algunos clientes vinieron preocupados pensando que subiríamos demasiado el valor del pan pero ahora están contentos porque la suba no fue muy alta. De igual manera mantenemos precios baratos y pese a que todo subió buscamos mantener las ventas”, indicó la empleada Raquel Rojas. A su vez puso de relieve que “también padecemos las subas de tarifas que afectan al rubro”. De esta manera, detalló que el mignón pasó a costar el kilo de $ 40 a $ 50, el bizcocho de $ 60 a $ 75, pan salvado de $ 45 a $ 55, surtidos (bollitos, cuernitos) antes costaban $ 18 y ahora están a $ 22, las facturas de $ 7 cada una a $ 9 y oferta de 3 unidades a $ 25, las prepizzas y pan de viena de $ 18 a $ 25, pan de hamburguesa de $ 30 a $ 35 y tostadas de $ 90 a $ 120.
SEBASTIÁN SILVETTI, VENDEDOR
“La suba del 20% es razonable ya que las tarifas de luz y gas vienen sufriendo un incremento, al igual que la materia prima, como la harina, todo subió”, mencionó uno de los vendedores de una panadería ubicada en la zona céntrica, en calle Gorriti, Sebastián Silvetti.
Resaltó asimismo que como estrategia desde hace muchos años la panadería ha implementado la oferta de bolsones económicos de 1 kilo y medio a $ 60 que contiene productos surtidos como: bollo, facturas, bizcochos y mignón, del día anterior. “Más que nada porque estamos ubicados cerca de barrios como El Chingo, Villa San Martín, entonces hay familias que no pueden pagar mucho. El bolsón económico es buscado por los clientes desde tempranas horas”, dijo. Por otro lado, mencionó que esperan para esta temporada de invierno repuntar ventas, “la gente compra lo mismo o lo que le alcanza y no en cantidad”, finalizó.
El insumo principal
Otro de los factores que influyen en la fuerte baja de ventas, según expresaron los vendedores y propietarios, es el valor del insumo principal del pan y sus derivados: la harina.
Notable incremento
Cabe recordar que ese producto ha sufrido un notable incremento, según los últimos datos, en septiembre del 2017 la tonelada de harina costaba entre los $ 2.500 a $ 3.000 y en 2018 alcanzó los $ 7.000 por lo que en ese período la bolsa se vendía a $ 550 y subió a $ 650.
Actualmente, la bolsa se encuentra entre los $ 780 y $ 800 si se adquiere de molinos, por lo que se desconoce el precio mayorista.