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Tratamiento ante abusos y sus crueles secuelas

Las consecuencias pueden ser hasta suicidios explicaron desde la institución que también trabaja en otros flagelos.
Sabado, 13 de abril de 2019 01:01

Ante un caso de abuso sexual lo primero es pedir ayuda de especialistas y una de las alternativas es la fundación "Luz de Vida" que trabaja en la contención de personas que sufrieron esta problemática o de violencia intrafamiliar y de adicciones.

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Ante un caso de abuso sexual lo primero es pedir ayuda de especialistas y una de las alternativas es la fundación "Luz de Vida" que trabaja en la contención de personas que sufrieron esta problemática o de violencia intrafamiliar y de adicciones.

Al respecto, la presidenta de la institución, Gabriela Muñóz, que es capacitadora en educación sexual y preventora en abuso sexual infantil, mencionó, en diálogo con El Tribuno de Jujuy, que "el abuso sexual infantil es un flagelo mundial, ninguna sociedad escapa de esto y lamentablemente nuestra provincia presenta altos índices de este mal. Cada vez salen más casos a la luz y gracias a eso se puede prestar más ayuda a las personas que lo necesitan".

Señaló la importancia de visibilizar estos casos, "esto es algo que por vergüenza o humillación se mantiene en silencio por eso nuestro primer mensaje a las víctimas es que se animen a romper ese silencio porque no son culpables y necesitan salir adelante. Si esas heridas están ocultas la víctima no va a poder recibir esas medicinas para sanar. Cuando sacamos todo a la luz comenzamos a sanar".

Para salir de esta situación comentó que se requiere de un abordaje amplio, "hay esperanzas de vivir de otra manera y que los espacios se pueden llenar transformando cualquier situación de dolor en una vida plena y eso se logra con asistencia emocional, espiritual y tratando a las personas como seres integrales. Con todo eso se puede construir una mejor sociedad".

Lo primero que hay que hacer es confesar la situación, "muchas veces las familias piensan que el tiempo va a curar las heridas pero no es así. Si la víctima no recibe asistencia apropiada puede sufrir graves consecuencias que van desde la vergüenza, la culpa, la humillación hasta el suicidio", añadió.

“LUZ DE VIDA”  / GABRIELA MUÑÓZ (DER.) JUNTO A OTRA INTEGRANTE DE LA INSTITUCIÓN QUE FUNCIONA EN CALLE ALVEAR.

En ese sentido explicó algunas causas de este flagelo, "el desequilibrio familiar, la falta de amor, la indiferencia, la violencia, los hogares devastados hace que las personas crezcan en un ambiente malo y se expresen mediante abusos. El ser humano tiene tres componentes, uno es lo emocional, otro lo físico y también lo espiritual, si las tres partes de nuestra estructura como seres humanos no están firmes y sólidas no tenemos estabilidad en la vida".

Continuó diciendo que "salimos a la sociedad a generar espacios para que si hay alguien que lo necesite pida ayuda. Tratamos de identificar todas las emociones que se formaron en su mente. Ante emociones de culpa, vergüenza, autoestima baja, de inseguridad, de introspección, les mostramos cuál es la verdad, el amor, el respeto, etc".

En niños y jóvenes

En relación al abordaje que realizan en niños sostuvo que por medio de un material bibliográfico que se llama "Cuentos que no son cuentos" que está destinado a chicos de 2 a 10 años intentan explicarles sobre esta problemática de una forma didáctica.

Esos libros ayudan a la prevención del abuso infantil, "a cuidar nuestras partes públicas y nuestras partes privadas. Hubo casos que a partir de la lectura de esos cuentos algunos niños confesaron una situación de abuso. Ahí comienza a girar la rueda a favor de la víctima porque sale a la luz y podemos ayudarla", dijo Muñóz.

En adolescentes trabajan con otro material que habla sobre el grooming a fin de que sepan identificar este flagelo y prevenirlo.

Por último, remarcó que "la familia es la célula de la sociedad, si está enferma la familia también lo estará la sociedad".

Adicciones y violencia intrafamiliar

La fundación “Luz de Vida”, además de realizar contención a víctimas de abusos sexuales, hace lo propio con personas que sufrieron violencia intrafamiliar y a sus respectivas familias. 

También trabajan con la contención del grupo familiar de personas adictas. No lo hacen con personas adictas pero están en contacto con otras fundaciones que trabajan en la rehabilitación de adictos para poder establecer esos lazos y tener a donde derivar casos.

“La oficina es el punto que queremos mostrar para que cualquier persona que necesite ayuda desde acá le podamos brindar consejos que necesitan. También salimos a las escuelas y a otros ámbitos para brindar talleres de prevención de abusos, de violencia intrafamiliar y adicciones”, manifestó Gabriela Muñóz. 

Ante casos de violencia en niños explicó que “generalmente tratamos de hablar con el núcleo familiar pero si los padres son los que ejercen violencia lo primero que hay que hacer es la denuncia y luego darle contención a los niños”.
Es importante que exprese lo que está viviendo para ofrecerle ayuda psicológica y espiritual, “le enseñamos al niño que esas situaciones no son normales, porque muchas veces se naturaliza a la violencia. Hay que escuchar sus vivencias para plantear una realidad diferente”, agregó.

En ese sentido sostuvo que “no es un trabajo fácil porque a veces la familia no colabora pero tampoco es imposible”.

Este sábado se llevará a cabo un taller de violencia intrafamiliar desde las 18 en el centro vecinal del sector B4 del barrio Alto Comedero.

Atención gratuita a víctimas

Son cuatro miembros los que fundaron la institución y en total son 12 los que están colaborando de forma voluntaria. 

Hay especialistas en diversas ramas como ser psicología, educación sexual, prevención en violencia, abogacía y un equipo de gabinete espiritual.

Los que sufrieron o saben de alguien que haya padecido una situación de violencia intrafamiliar, abuso o sea adicto puede comunicarse con la fundación por medio de sus vías de comunicación. Facebook: Fundación Luz de Vida, teléfono: 388154544620 o al email: fundacionluzdevida siempre@gmail.com.

También pueden dirigirse a la sede de la institución en Alvear 731, primer piso, oficina Nº 12 de lunes a viernes de 8 a 12 y de 18 a 21. 

La atención es totalmente gratuita y todos los que puedan colaborar con la fundación pueden hacerlo.