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20 de Abril,  Jujuy, Argentina
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Dos jujeños muy cerca de la gran catedral

Ambos cultivan el arte musical en el Viejo Continente y están dispuestos a colaborar en la reconstrucción.

Miércoles, 17 de abril de 2019 01:02

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Sebastián Cordero es un músico jujeño que vive hace 18 años en París, Francia a tres kilómetros de la Catedral de Notre Dame.

En contacto con El Tribuno de Jujuy contó que el incendio de este emblema mundial le produjo al igual que a todos los parisinos "una sensación de tristeza total y de angustia tremenda".

"Tuvimos que dejar de ensayar por la magnitud de la situación que estamos viviendo, es muy grave. Nuestros teléfonos empezaron a sonar con llamadas de diferentes personas preguntándonos qué es lo que estaba pasando aquí y cómo estábamos y por eso decidimos cortar nuestra actividad", contó Sebastián.

Indicó que esta situación "que no se la imaginó nunca nadie mantuvo a las personas en shock con las calles cortadas y con la incertidumbre sobre si se podrá salvar algo de Notre Dame", comentó.

Y agregó que "el gran temor que tienen los parisinos es que no se puedan llegar a salvar las dos torres de delante de la Catedral, patrimonio cultural". Finalmente, esto no sucedió.

Rafael Montero

El jujeño Rafael Montero es tenor y profesor de canto en Colonia (Alemania), y en varias oportunidades ha cantado en la Catedral de Notre Dame. Ante la tragedia sufrida de uno de los monumentos más emblemáticos de la capital francesa Rafael indicó que pronto volverá a París y "como jujeño con carrera internacional en la ópera voy a ofrecer mi granito de arena para la reconstrucción de este lugar en el que canté", manifestó. Adelantó que es muy probable que sus colegas músicos hagan una recolección de fondos para la reconstrucción y "si eso no ocurre yo mismo voy a iniciar una acción para que entre todos reconstruyamos Notre Dame", aseguró. Y exclamó: "No puedo creer que el lugar donde yo canté tan hermoso e imponente y que tengo grabado en la retina de mis ojos, ya no existe más". Rafael expresó que "todo lo que se ha destruido ya no será como antes. Y las personas que no tuvieron la fortuna de conocer esta catedral nunca podrá saber la belleza perfecta y original de Notre Dame".