Efectivos policiales tratan de determinar las circunstancias en que una menor se hizo de un celular que estaba denunciado como robado.
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Efectivos policiales tratan de determinar las circunstancias en que una menor se hizo de un celular que estaba denunciado como robado.
El móvil había sido sustraído en un establecimiento secundario de Alto Comedero a una niña de 13 años, quien en compañía de la madre radicaron la denuncia correspondiente en la Seccional 56º.
Una serie de investigaciones llevadas a cabo en el establecimiento permitieron orientar la pesquisa a un sector del barrio Tupac Amaru hasta donde llegaron los detectives.
En un domicilio de la 12º Etapa, la Policía se entrevistó con una mujer mayor de edad a quien se le refirió lo ocurrido.
Frente a esta situación la mujer llamó a la hija de 15 años a quien le solicitó que trajera el celular supuestamente encontrado en un colectivo de transporte urbano de pasajero.
Frente a esta declaración, la Policía citó a la propietaria del teléfono móvil quien reconoció que el aparato correspondía a su hija y que aún tenía información personal en cuanto a los contactos y a mensajes que la menor intercambió con amigos y familiares.
Profundizan la investigación
Fuentes policiales informaron que como consecuencia de esta nueva denuncia se inició una profunda investigación tendiente a dar con una supuesta organización conformada por menores de edad que se dedican a sustraer celulares a estudiantes que concurren a distintos establecimientos de esa zona.
Fue fundamental, en el logro de la investigación, los distintos relatos de los estudiantes que tuvieron trascendental importancia en la investigación.
La madre de la víctima habría informado en sede policial que los alumnos tienen miedo de denunciar el robo de sus celulares o pertenencias especialmente cuando concurren a extra clases o clases de educación física.
La mujer radicó la denuncia en la sede de la Seccional 56º en contra de los poseedores.